Puerto Rico
Al despertar lo primero que vio Yeimy fue a Alexis que la observaba con el semblante cansado
—Yeimy —susurro —, Yeimy ¿Cómo te sientes?
—Alexis —susurro con la voz rota —, nuestro bebé
Solo pudo decir eso antes de que las lágrimas se apoderaran de ella mientras él la abrazaba. Le dolía verla así, con el alma destrozada por eso no pudo evitar soltar unas lágrimas que rebotaron en el cabello de ella
—Lo sé… lo se pequeña —beso su cabeza —, pero te prometo que saldremos de esta. Pronto este dolor cesara y nunca volverá
—Mi bebé Alexis —volvió a sollozar —. Mi bebé se ha ido, me quiero ir con él
—No digas eso pequeña, hay mucho por vivir —la miro limpiando sus lágrimas —, y te prometo que yo estaré hay para ti. Siempre que me necesites estaré hay para ti, nunca me alejare de tu lado.
—Quiero ver al doctor —le dijo separándose de él —. Necesito saber qué es lo que paso, ¿Por qué no pude retener a mi hijo en mi vientre?
—Yeimy no —negro —, no es bueno en tu estado
—Quiero saberlo Alexis, tengo el derecho
—Bien, pero yo estaré presente —le hizo saber
—No, quiero hablar con él en privado —lo miro —, por favor. Quiero hablarle en privado
—¿Por qué? —le pregunto —, también es mi hijo y necesito saber por que tuviste el aborto
—Por favor Alexis, necesito estar sola con el doctor. Te prometo que te lo contare
ÉL solo asintió antes de que saliera para llamar al doctor. Aquel hombre alto con algunas hebras de canas entro a la habitación con una tabla en la mano se paró enfrente de ella para luego introducir su mano a su bolsillo
—Me alegro que este mejor señorita Montoya —sonrió —, si sigue así esta misma tarde le podemos dar de alta
—Doctor, ¿Qué paso? —le pregunto
—Pregunta del ¿Por qué esta aquí? O ¿Por qué sufrió un aborto?
—¿Por qué volví a perder a mi bebé? —susurro mirando la puerta no quería que Alexis escuchara
Aquel hombre soltó un suspiro y asintió
—Entonces ya sabía que había abortado otro bebé —confirmo —. ¿Puedo preguntarle cómo lo perdió? Por qué está claro que por una intervención médica no fue
Pero ella solo negó con la cabeza y el asintió
—Como médico le digo que es de suma importancia que me diga como perdió a su primer bebé —se sentó en la silla junto a ella —. Su primer aborto dejo secuela por no haber atendido correctamente. Su matriz fue dañada al momento de quitar los residuos, dejando cicatrices las cual la llevaron a tener un aborto espontáneo inevitable
—¿Qué quiere decir? —pregunto nerviosa
—Que su bebé de todos modos no hubiera resistido. Lo hubiera perdido tarde o temprano, su matriz no esta en condiciones de mantener el feto, era inevitable lo que paso. Mira cuándo una mujer está embarazada el cuello uterino se cierra para mantener el feto dentro, pero el tuyo no pudo resistir por eso el dolor y el sangrado excesivo
Ella solo se llevó las manos a la cara para empezar a sollozar
—Quiere decir que no… no poder tener un bebé nunca
—No, claro que podrá tener más embarazos. Tendrá que someterse a tratamientos para sanar su útero y así podrá procrear vida nuevamente. Ahora mismo le hemos dejado el útero libre
—Gracias
—Señora, todo saldrá bien. Usted podrá volver a tener un hijo —sonrió y le extendió una tarjeta —, este es mi numero por si tiene una duda. Solo llámeme si necesita atención médica y estaré hay
Ella solo pudo sacar una pequeña sonrisa y negó
—¿Eso incluye Nueva York?
Él llevo su mano a su insipiente barba e inclino la cabeza un poco para contestar, pero Yeimy jamás se imaginó su respuesta
—Solo llámame he iré a donde usted este
Sin más se levantó acomodándose su bata y salir de aquella habitación donde estaba Alexis y una mujer. La cara del doctor fue una clara demostración de que había algo mal
—Doctor, ¿Qué le pregunto mi prometida?
—Solo me pregunto si podría volver a concebir
—¿Y podrá concebir nuevamente?
—Ella podrá concebir nuevamente si sigue todas mis indicaciones. Las cuales ya le informe a ella —lo interrumpió al ver que iba a preguntar —. Y si no hay otra cosa por decir me marcho
Lo vieron partir sin mirar atrás
—Alexis, piensa lo que te dije —hablo la rubia —, sé que todo esto es infortunio. Pero no es más desgracia estar con una persona que no amas por lastima, solo la harías más desdichada
—Basta Olivia. No cambiare de opinión y si me permites necesito ver a mi prometida
Alexis abrió la puerta encontrándose con Yeimy que intentaba bajarse de la cama
—Yeimy, ¿A dónde vas? No puedes bajarte aún estas débil
—Quiero irme ya Alexis, estoy aburrida y sabes que odio los hospitales
—Pero no puedes irte. Aun el medico no ha dado la orden
—¿Y qué quieres que haga aquí? Estoy aburrida
—Yo puedo acompañarte —escucho la voz de aquella mujer mientras se adentraba en la habitación —, al menos mientras estés aquí en el hospital. Le voy a contar un secreto que espero quede entre los tres
Se acercó hasta pararse en los pies de la cama y se inclinó levemente después de haber mirado a ambos lados como si aún hubiera gente ahí que pudiera escucharla
—A mi también me desagradan los hospitales
—Entonces no deberías estar aquí —contesto bruscamente Yeimy —, vete a tu casa. Yo estaré bien
Pero antes de que ella pudiera responderle la figura de León se asomó por la puerta
—Hola, prima —miro a Alexis —, primo
—Lion, amor ¿Qué haces aquí? —sonrió —. Pensé que estarías aún con mi hermana
—Lo estaba pero llegaron tus padres, se fue con ellos
—¿Mi hermana se fue con mis padres? Desde que se murió su esposo nunca ha querido irse con nosotros a la casa
—Pues se fue, y llevo sus maletas —miro a Alexis antes de decir: —. De ahí se iría a Nueva York
—¿Y tú mi amor? Te iras a Nueva York también o… aceptaras la propuesta que te he hecho