Alexis se quedo parado frente a la puerta de cristal de aquella oficina. Estaba de vuelta. Aún no se le quitaba la sorpresa que fue ver nuevamente a Alejandra. Pero percibir que era eso. Alzo su mano para tocar aquella puerta cuando esta se abrió y vio a la dueña de sus pensamientos con una sonrisa que se le borro al verlo ahí. Y no supo que fue lo que mas le molesto, si el hecho que sus sonrisas se esfumara al verlo o que estuviera acompañado de alguien más
—¿Alexis? —lo miro con nerviosismo —, ¿Qué es lo que se te ofrece?
—Necesito hablar contigo
Alexis la miro brevemente antes de mirar con caras de pocos amigos al hombre que sonreía mientras le devolvía la mirada
—Alexis te presento al licenciado Raúl
Señalo al hombre que estaba a su lado al ver el estado en que se encontraba Alexis. Si las miradas mataran Raúl estaría a tres metros bajo tierra. Pero eso al parecer en vez de enfadaron solo le causaba risa a Raúl
—Un placer conocerlo
Dijo con una sonrisa burlona y Alexis solo asintió haciendo que la tensión se hiciera palpable en el ambiente
—En estos momentos estoy de salida Alexis, si gustas cuando regrese podemos tratar el asunto que quieres hablar conmigo o puedes tratarlo con Rubén
Alejandra poso la mano en el brazo de Raúl para decirle que se fueran pero las palabras que salieron de la boca de Alexis detuvieron cualquier palabra provocando que se pusieran rojas las mejillas y haciendo que Raúl soltara una carcajadas por el tono de celos que se pudo escuchar en la voz de Alexis
—¿Cómo?
Pregunto ella, al no saber que más responder
—Que esta bien, que le diré a Rubén que necesito reparar nuestras relación
—¿Te has vuelto loco?
—Si, posiblemente me he vuelto loco —confirmo —, por que así me dejaste
Alejandra solo pudo ponerse roja pero de furia ante el descaro de Alexis. ¿Enserió le decía eso? Cuando el fue quien había decidido volver a dejarla rota para ir con su prometida
—Si, suele dejar ese efecto —hablo Raúl —, por eso no hay que dejarla ir tan fácil
Tanto como Alexis como Tamara voltearon a verlo, el primero cerro los puños tratando de tragarse toda la ira qué corría por sus venas al escuchar esas palabras. Era sin duda que él quería o en el pero de los casos tenía una relación con Alejandra. Al ver que Alexis ya no podría controlar su rabia Raúl hizo salir a Alejandra de que edificio sin mirar al hombre que estaba atrás de ellos tratando de controlarse
—¿Qué fue todo eso? —le pregunto ella al estar ya en marcha dentro del auto
—Un empujoncito —sonrió negando —. Vamos Alejandra, los dos se quieren es más que obvio
—¿A caso no te dije que lo de nosotros era imposible?
—Ya te dije que no es imposible, solo tienen que despejarse de todos esos secretos que los atormentan
—Eres un entrometido —negó —, te falta preguntarme si quiero regresar con el
Rubén lo miro con cara de “Me estas mintiendo a mi” y ella solo sonrió. Al llegar al departamento que estaba rentando Raúl una sonrisa se le instalo a Alejandra en los labios al ver a la persona que estaba recostada en un pequeño moisés con un chupete en la boca
—Hola mi vida hermosa —hablo con dulzura a la pequeña que sonrió al verla —, ¿Cómo está la pequeña de mamá?
Alejandra alzo a su bebé en brazos mientras veía a Alicia entre los brazos de Raúl.
—Hola Alicia, perdón por no saludarte —acercó más a su bebé a su pecho —. Pero me moría por abrazar a mi bebé
Alicia con una dulce sonrisa negó
—No te disculpes, mi futura nuera hace que todo mundo la voltee a ver. Ese es su encanto
Solo una sonrisa en los labios se le instalo recordar como se entero que estaba embarazada y por lo siguiente también que terminaría emparentados Raúl y ella
10 meses atrás
Alejandra se encontraba sentada en aquella mesa dejando que los rayos de sol le pegaran un rayo en la cara mientras aguarda en la espera de su compañía ya hace un mes que había dejado atrás a Alexis o al menso eso trataba. Y Raúl le ayudaba a dejar esos pensamientos que por ratos aparecía agraviado con la sonrisa y los ojos de aquella persona. Pero por mas que quisiera no podía dejar ese sentimiento tan puro e ingenuo que aun sentía desde que ella tenía 17 años
—Corazón traicionero, se supone que deberías estar de mi lado
Murmuró para si misma , pero ¿Cuándo el corazón se ha puesto de acuerdo con la mente? Era una batalla que sin duda su terco corazón se aferraba a ganar
Soltó un suspiro antes de ver como Raúl se acerca hasta ella visiblemente con una sonrisa tensa
—Disculpa la demora —le dio un beso en la mejilla —, hasta esperado mucho
—Tranquilo, ¿Todo bien?
Lo vio visiblemente tenso y sonriendo con tensión. Algo muy raro viniendo de él, por que ella no conocía a alguien mas alegre y optimista que el hombre que tenia enfrente de ella
—Alejandra —tomo su mano —, recuerdas lo que te dije la primera vez que te conocí
Ella se tenso involuntariamente, aun recordaba que él le comento que quería una oportunidad, pero ella por mas que quisiera corresponder a sus sentimientos no podía. Aun seguía presa del veneno qué había dejado aquel hombre en sus venas
—Raúl, yo…
—Alejandra, antes de que digas algo tengo algo que comentarte
Tomo sus manos con cariño y con suavidad las acaricio
—Ayer conocí a la mujer con la que voy a compartir mi vida —soltó sin mas —, y además tu hija será parte de mi familia
Ella se soltó con miedo sus manos y negó
—¿Qué broma es esta Raúl? —sintió la garganta cerrada y el picor de sus ojos por las lagrimas que querían salir —. Tu sabes que yo no…
—Si puedes gestar un bebé —miro su vientre —, ya estas gestando a la heredera del grupo Alcázar y Valle
Ella negó mientras llevaba sus manos a su vientre. En eso una mujer bella de cabello chino y una belleza que parecía de otro mundo con piel de caramelo se acercaba a ellos