Estábamos aquí, en el lugar mas importante del colegio, la oficina del director el cual muy poca gente tiene el honor de verlo, tan solo de pensarlo se me ponía la piel de gallina, mas que todo porque muy probablemente… hablen de mi en esta reunión inesperada.
—¡¡Señor director, estamos aquí, soy Mónica!!
Hubo un pequeño instante de silencio el cual se me hizo eterno, las manos me sudaban y mi nerviosismo empezó a aumentar, hasta que, mi corazón se paralizó al escuchar sus palabras.
—Pasen por favor.
Abrimos la puerta y ambos entramos a la oficina personal del director de este prestigioso colegio, tragué saliva y me preparé mentalmente para asimilarlo, ya que después de lo que me dijo Luna, no veo al director con los mismos ojos, ahora mismo él es para mí, una figura de máximo respeto.
Entré y visualicé el interior, nada a cambiado desde la última vez que entré aquí, ni siquiera él, se ve igual de joven que aquella vez, su cabello lacio y corto de color café, ojos verdes claros, su blanca piel, con su traje habitual y, sobre todo, su mirada seria la cual imponía respeto. La última vez que entré aquí fue cuando apenas tenía 12 años de edad, en ese entonces era una enana que apenas sabia de que iba el mundo, era alguien quien se dejaba llevar por sus emociones a tal punto de causar problemas a los demás, fue por mi desconocimiento del mundo y de mi propia habilidad que casi cometo una locura en ese primer día de clases, eso fue… lo que me llevó a tener esa reunión en esa ocasión, y ahora… siento que estoy cometiendo el mismo error de aquella vez.
—……— Apreté mi puño observando al directo —“No eh cambiado nada… soy patética” — Pensé con frustración.
—Se bienvenida a mi oficina nuevamente— Sonríe —Anahí.
—……— Tragué saliva
—Sabes por qué estás aquí nuevamente ¿No es así?
—Si…
—Me alegra que lo entiendas…— Sonríe
Cruzamos miradas y un par de segundos de silencio se hicieron presentes, sentía que este momento… duraría por siempre.
—¡¡Felicidades por ganarte un puesto en el Comité de elite!! ¡¡Ahhh!!, ¡¡Me preocupaba mucho tener que trabajar con muchachos a los cuales no conozco muy bien!!, ¡El anterior comité eran todos muy rectos y me sentía en constante presión al darles ordenes ya que esperan mucho de mí!, ¡Al menos este año estará alguien con el cual ya he tratado antes!, ¡Anqué claro, sin importar que pertenezcan al comité, no podrán verme! — Se levanta —Pero…— Toma la mano de Anahí —Tu eres la única de este año que podrá verme, así que, por esa razón, esforcémonos en hacer de esta institución un lugar mejor ¿Sí? — Sonríe.
—………— Quedé perpleja observándole —Ehh…— Regresé a observar a mi maestra —……— Regresé a ver al director —¿Ehhhhhhhhh?
(2 minutos después de explicar mi confusión)
—¿Qué?, ¿En serio pensabas que te iba a retar? — Se echa a reír —Para nada, para nada— Se limpia las lágrimas que soltó por la risa —Solo quería felicitarte por tu increíble combate y también por ganarte un puesto en el comité.
—¡Me asusté mucho, estaba muy nerviosa!
—Ya lo creo— Sonríe —Tu puesto ya está más o menos decidido, perdiste en la final del grupo A, eso quiere decir que te enfrentaras con el que pierda en la final del grupo B, ahí se discutirá el tercer y cuarto lugar en la que tu serás partícipe, mientras que el quinto se discutirá con el que perdió contra ti en la semifinal del grupo A y con la que pierda en la semifinal del grupo B, con ello ya estarían los 5 puestos del comité de este año.
—Ya veo… aunque… la verdad es que no me apetece mucho formar parte del comité, siento que será mucho trabajo.
—Pues…— Sonríe —¿Qué te puedo decir? — Observa con una mirada seria —Quieras o no… lo harás Anahí.
—……— Observé con algo de inquietud.
—Debes hacerlo, ya que al formar parte del grupo el cual está a tan solo un escalón debajo de mí, nadie te pondrá un dedo encima… incluyendo los del gobierno, cuando te gradúes de aquí puedes decidir si ir o no a la universidad, las decisiones de los chicos y chicas que pertenecieron al comité en este colegio han sido catalogadas como “absolutas”, nadie, ni siquiera el gobierno puede influenciar en ellos para hacer cambiar sus decisiones de vida.
—Mis decisiones de vida…— Observé sorprendida.
—¿Es lo que quieres no? — Sonríe —Vivir tu propia vida.
—……— Sonreí con todas las ganas de echarme a llorar, pero lo soporté —¡¡Si!!
Mi maestra y el director sonreían de oreja a oreja, es cálido, me sentía muy feliz, sentía su protección y preocupación, eran como unos padres que querían verme salir adelante y cumplir mis sueños, se sentía muy bien.
—Bien— Junta las manos —Para finalizar, quiero hablar de algo más…
—¿De qué se trata? — Cuestioné curiosa.
—Se trata… del hombre encapuchado que me hicieron conocer mediante este informe rápido— Enseña una hoja tambaleándola.
Era de esperarse que tocaría ese tema, después de todo es algo preocupante que una persona tan sospechosa ande vagando por el colegio y aún no sea localizada.
—¿Conseguiste encontrar algo? — Cuestionó Mónica.
—Me gustaría decirte que si Mónica, pero lastimosamente lo único que tengo de él son pequeños segundos que captaron unas cámaras de seguridad.
En eso nos mostró dos videos, una donde fue el punto de contacto, donde Luna y yo nos lo topamos, y otro donde este se encontraba en uno de los tejados del colegio, se lo podía observar que estaba muy interesado en el combate final que tuve con Anoha.
—Ambos videos tienen una cosa en común… en el primero, cuando termina de hablar con Anahí y su amiga, se les queda observando un par de segundos y luego desaparece, incluso la cámara hace una pequeña interferencia en ese momento— Dijo el director con un tono de preocupación —En el segundo video es más de lo mismo, se le puede observar como de la nada aparece en ese tejado el cual la cámara consigue captar, pero luego de un par de segundos después cuando el combate de Anahí termina desparece de la misma manera y la cámara… vuelve a hacer interferencias— Se queda observando el video —Es muy extraño todo esto.