Adriana Hoffman es una joven modelo, deseada por muchos y odiada por envidiosos que desearían alcanzar lo que la joven tenía. Ella lo tenía todo, belleza, inteligencia y una enorme felicidad que embargaba a todo el mundo, incluso a aquel hombre casado.
El amor no entiende de papeles, no entiende de lejanía y mucho menos de fronteras. Cuando uno está perdidamente enamorado, a veces se puede perder la moralidad o algunos principios básicos.
Ellos no esperaban encontrarse pero el destino lo hizo. ¿Quién sabe porque los juntó? De ellos podría salir algo bueno o algo terriblemente malo.
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Lo prometido es deuda, aquí les traigo la historia de Adriana y Ernesto, los padres de Eleanor y Lukas. Espero que disfruten de la historia.
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He estado pensado en hacer una pequeña dinámica si os parece bien, sino pues nada.
La dinámica consiste en hacerme preguntas, de cualquiera de mis novelas, ya sea en los comentarios de la novela en la que tengan duda o curiosidad sobre algo, para ello podrán PREGUNTA y a continuación lo que queráis preguntar.