Epílogo

Observo las miles de cicatrices que tiene mi cuerpo, las internas y las externas. Las externas están ahí, a la vista para que todo el pregunta, ya ni me afectan, sientan incluso bien, ya no duelen, ya no me agobian, ahora son solo decoraciones en mi cuerpo. Esas cicatrices con como mis tatuajes, algo que cuenta una historia.

Ahora las cicatrices internas se sufren en silencio y sanan tan despacio que desesperan, no sabes cuando estarás bien o si llegarás a estarlo en algún momento. No creí que la herida por la muerte de mi madre pudiese reabrirse pero nunca conté con Eliza, con que ella me contase la verdad de aquel día que la perdí. A mi madre la ejecutaron, esa era la verdad, la mataron como si hubiese cometido un crimen cuando solo se enamoró, amó a un hombre que le correspondió en todos los sentidos pero que estaba atado a alguien ido de la cabeza. La cicatriz de papá es tan nueva que todavía supura, quema y arde como el primer día pero sana, lentamente va cerrándose hasta que en algún momento solo quedará una marca que dolerá pero con la que se puede vivir.

Las cicatrices del secuestro siguen vivas, latentes, me temo que esas serán las más difíciles de sanar. Todavía me despierto por las noches, bañada en sudor, creyendo que vuelvo a estar allí, que vuelvo a ser brutalmente golpeada e insultada. Todavía tengo miedo de que él aparezca y me la vuelva a quitar, tengo miedo de que me lo quite todo, aunque sé que está muerto, yo lo asesiné y no siento ningún tipo de culpa, sé que no está bien, pero sé que con él vivo jamás podría vivir en paz.

Las cicatrices del odio no se apagaran jamás, no podré perdonar nunca a Eliza, no hizo nada bueno por nadie. Lo único que le puedo agradecer es que me diese a Brandon, pero por desgracia mi hermano es resultado de una violación. Otra cosa que jamás podré perdonale, el daño que le ha hecho a Brad, él tiene pesadillas. No puede y se siente culpable por ser producto de una violación, a pesar de saber que papá lo amaba y de seguir vivo seguiría amándolo. Él no puede dejar de pedirnos disculpas a mí y a Lukas porque su madre mató a la nuestra, pero él no podría tampoco evitar aquello, era un niño como yo.

Las cicatrices por la separación de Lukas laten con menos fuerza, y se cierran a gran velocidad porque estamos juntos y no nos vamos a separar o al menos eso espero.

La cicatrices por Jackson están cerradas, solucionamos nuestros problemas, fuimos a terapistas de familia y pareja que nos ayudaron a entender todo. No por él, sino por mi que no podía dejar la culpa de haberle ocultado a nuestra hija, aunque él me hubiese perdonado, yo no me perdonaba a mi misma.

- ¿Qué ves?- no miro a mi psicólogo, sigo centrada en el ejercicio, en mirarme al espejo.

- Una mujer fuerte.

- ¿Qué tan fuerte Eleanor?

- Mucho, capaz de resistir miles de guerras más, de levantarse y poner la otra mejilla después de que la golpeen con fuerza y la derriben.- me enderezo.- Veo a una mujer determinada y llena de valentía, dispuesta a enfrentar la vida.

- ¿No tienes miedo?

- Es imposible carecer de miedo.

- ¿Entonces?

- Ya no me escondo.

- Ya no te escondes, ¿qué significa eso para ti?

- Que he renacido, ya no soy aquella chica que recibía palizas de su madrastra, ni la que dejaba que la insultasen hasta que se cansasen por miedo a ser golpeada.

- ¿Dónde está esa niña Eleanor?

- Muerta, enterrada junto a mis padres.

- ¿Si tuvieses a tus padres aquí, qué les dirías?

- A mi padre que me crío bien, como puso aún con el dolor de verme a mi y no ver a la persona que más amaba, siendo yo el reflejo de ella. Que lo perdono por no protegerme como yo creía que debía hacerlo, y que lo amo con locura.- suspiro.- A mi madre que fue la mujer más humilde, valiente, amorosa y cariñosa que pude conocer a pesar de vernos poco y de que nuestros tiempo juntas fuese tan reducido.

- ¿Qué le dirías a tu hija si comprendiese todas tus palabras?

- Mamá hizo cosas mal, te alejó varios años de papá y no espero que entiendas mi miedo, solo que no me odies mi niña. Si, no lo hice por ti sino por mí, porque mi miedo rozaba la locura, pero espero que ahora haya recompensado el tiempo que perdiste con tu padre.

- ¿Qué le dirías a tus hermanos?

- A Brandon, gracias por cuidarme enano, por hacerme ver que el y sí solo sirve para llorar más, gracias por enseñarme que el amor de un hermano puede ser a veces mayor que el de un padre.- sonrío.- A Lukas le diría que volviese al pasado y recuperase a su niño interior, que odiase menos y amase más, que el rencor solo consume y el amor te hace vivir. Le diría que se liberase de cada uno de sus demonios y que aceptase la ayuda que le proporcionamos, porque lo amamos.

- ¿Y a tu esposo?

- Que lo amo.

- ¿Solo?

- Él sabe que mis te amo esconde miles palabras que no digo.- él espera que hable más.- Sabe que mis te amo significan gracias, gracias por hacerme feliz, por ser mi lugar seguro, por hacerme más valiente, por hacerme ver más fuerte, gracias por venerarme y no odiarme. Gracias por ver en mi cicatrices dibujos y no dolor, gracias por darme una familia,

- ¿Y a mí?

- Gracias por tener paciencia.

- Muy bien Eleanor, puedes ponerte otra vez la camiseta, hemos terminado la sesión de hoy.

- Gracias de verás.

- Es mi trabajo.

- Lo sé.

Salgo de la consulta sintiendo que me libero. Sentí que me liberé cuando me tatué mi espalda por completo, se sintió como lo correcto y hoy esto se siente como lo correcto.

Mi tatuaje significa tanto,.