Narra Hera
En cuanto se da cuenta mi presencia y me pregunta:
—¿Te has divertido mucho? —aunque en realidad no me divertí mucho, pero mejor me callo ese detalle—
—Sí, me he divertido mucho y la película me ha gustado bastante.
—Me alegro que te hayas divertido—. Me marcho a mi habitación ,sin embargo, noté que él me miraba como si estuviera descubriendo que estoy ocultando algo.
En cuanto entro a mi habitación me pongo la pijama de repente recibo un mensaje de Adam. Espera un momento, no le di mi número. Tal vez se lo haya dado Massimo.
Cuando lo leo , me pide disculpas por su comportamiento en el cine.
Es cierto que no tengo ganas de responderlo, así que lo dejo en visto acto seguido me meto en la cama y me meto en YouTube para ver expediente Criminal. Me gusta saber todo sobre investigación criminal y espero que algún día pueda ser criminóloga.
En cuanto empiezo a ver allí un caso de una joven de mi misma edad que fue asesinada por su padrastro, lloro de rabia. Es verdad que hay tanta maldad en este mundo.
La investigación se centra en su padrastro y también en su madre, quien al parecer ha sido cómplice del crimen. Hasta que mis ojos se vuelven pesados por el peso de la tristeza, y por eso decido dormir.
Han pasado algunos meses desde que me he centrado en mis estudios debido a que en la mansión reina un ambiente de mala energía a causa de las discusiones entre mis padres. Incluso me fui al apartamento para alejarme de sus peleas.
Justo ahora mismo me encuentro en un restaurante cerca de un hermoso parque. Estoy disfrutando de una deliciosa comida italiana. En ese instante, aparece Adam con una mujer muy atractiva riendo .
En cuanto termino la comida, le pido la cuenta al camarero. Él ya me conoce porque vengo a comer o cenar con él a menudo.
Nos comunicamos con lenguaje de signos, ya que es el único que me entiende.
Tras haber pagado la cuenta, a punto de levantarme de la mesa, Adam me ve. Al instante le dice algo a una chica y se acerca a mí. Nada más acercarse, intenta besarme. Por supuesto, me aparto. Entonces me pregunta qué me sucede.
Sin rodeos, le digo en tono molesto
— Me duele mucho la cabeza.— Adam sospecha con mi expresión por supuesto. Intentar hablar conmigo entonces,
—Adam, con la sinceridad que mereces, te digo que necesito un tiempo porque no puedo seguir contigo mientras pienso en otra persona. Por eso, necesito un tiempo. —Él toma mi mano y dice que lo comprende, pero noto que le duele. Al ver su expresión, finalmente me da el tiempo que necesito.
—Pero con una condición: cuando estés triste o tengas ganas de hablar con alguien, aquí me tienes.
—¡De acuerdo! —Asiento y le doy un beso en la mejilla antes de marcharme del restaurante.
Al salir del restaurante, comienzo a caminar hacia mi mansión. Cuando he llegado veo cómo Enzo besa a su esposa y juegan entre ellos, lo que me provoca unos celos insoportables.
Cuando notan mi presencia, los ignoro por completo, pasando a su lado y dirigiéndome a mi habitación. Al entrar, subo la música al máximo volumen
Durante unos minutos, Enzo entra y me pide amablemente que baje un poco la música. Sin embargo, me rebelo e ignoro completamente su petición. Él comienza a bajar la música, adoptando un tono de voz serio y diciéndome que mi comportamiento no es apropiado. Nuevamente, me rebelo, ignorándolo por completo. Sus ojos se vuelven inusualmente oscuros, respira con dificultad y unos minutos después, suaviza su rostro y
Me pregunta qué sucede.
Sin ningún reparo
, le respondo:
— No me pasa nada. Vale. Así que no me preguntes nada más y, por favor, ¿puedes salir de la habitación porque me voy a cambiar? —Veo que suspira un par de veces y luego sale de la habitación cerrando la puerta de inmediato. Me cambio de ropa y me pongo algo más cómodo. Después, subo un poco el volumen de la música y me tumbo en la cama, comenzando a leer. Así pasé la tarde en la habitación.
Por la noche aurora me comunica que Massimo va a venir a cenar. Por supuesto, Aurora está muy feliz porque no viene a menudo, me fijo que la mesa está llena de la comida favorita de Massimo. De pronto, aparece él con Enzo. Cuando Massimo me ve, se acerca de inmediato y me da un gran abrazo ya claro que me aparto de él diciéndole con un poco ilusión
—Me alegro que verte — me mira y me doy cuenta que él y Enzo intercambian sus miradas como si estuviera diciendo que estoy rara
A continuación nos sentamos comienzamos a cenar mientras aurora le pregunta a Massimo como va los estudios simplemente la responde con bien aunque con mucho exámenes hasta que Massimo me pregunta cómo estoy
Le contesto
—Estoy bien —sigo cenando
Durante la noche no han parado de hablar sobre el futuro de Massimo. Mientras tanto, yo me aburría escuchando la conversación. En cuanto terminé de cenar, me retiro a mi habitación ante la mirada de ellos, que dejaron de hablar .
Cuando entro a mi habitación, me acuesto en la cama y acto seguido abro Wattpad. Comienzo a leer y veo una escena en la que una pareja se rompe. Eso me recuerda a mí con Adam. Después de un rato, las lágrimas comienzan a caer.
No había pasado ni un minuto cuando entró Massimo y me seco rápidamente las lágrimas.
Se acerca a mí y se sienta junto a mi de pronto, le pregunto por qué ha cambiado tanto estos días y por qué ha roto con Adam.
Después, le digo que quiero irme lejos porque me siento asfixiada y necesito comenzar mi vida lejos de todo y, si es posible, no depender de nadie. Allí es donde me pregunta si quiero irme a vivir con él y estudiar juntos. Sin pensarlo dos veces, asiento con la cabeza dos veces.
—Bueno, princesa. Iré a hablar con nuestros padres para que sepan que vendrás a vivir conmigo hoy. Mientras tanto, haz una maleta con todo lo que necesites.
En cuanto termino de guardar mis cosas, me pongo una chaqueta sencilla, ya que estoy vestida aunque sea ropa de estar por casa. Echo un último vistazo a mi habitación y salgo caminando hacia el salón. Allí veo a Aurora con ojos llenos de tristeza al verme. Enseguida me dice algo que me llega al fondo del corazón, mientras Enzo me mira con una expresión igual a la de Massimo cuando se fue, pero esta vez noto que está triste pero lo disimula. Sin pensarlo dos veces, les digo: