Capítulo 9 : Michelle

Lucia se fue a la mansión para hacerse el chequeo habitual. Hasta que Percephone terminó de escribir algo en su libreta, que también lo hacía siempre.

—Ya puedes dejar de venir, González.

—¿Entonces ya terminó ?

—Si, te puedes retirar.

Mientras guardaba los utensilios utilizados. Ella camino hacia la puerta pero se detuvo.

—Señora Percephone... ¿Qué ocurrió con Jacob?

Jones no se dio la vuelta, solo le contesto muy poco.

—En otro lugar.

—¿Pero a dónde?

—¿Por qué quieres saber, acaso no era que le temías, eh?

Lucia agacho la cabeza.

—Si... Pero... Él ¿Está bien?

—Siendo sincera esa pregunta me es incómodo decírselo a alguien que no es de su intimidad. Tú no eres nada él y por lo tanto, no te diré nada más.

«Vaya...que fría y directa »

—Se que no me conoces del todo pero...

—Y no me interesa, por favor retirarte.

Lucia quedó impactada, sabía que por causa suya Jacob ya no estaba. Pero por causa de él ella sufrió también.

Era de entender que ella actuará de esa forma, después de todo era su abuela.

Cuando estaba a punto de irse ella le dijo por último:

—Podrás ser novia de mi nieto, Jake. Pero lo que hay entre ustedes es solo de su incumbencia. Sin embargo... Con Jacob es diferente, él día en que te nos unas a esta familia será solo ese día en que te dirigiré la palabra.

Llego a su casa, se sentó en la cama. Era sábado y ya se habían cumplido 35 días desde que dejó de ver a Jacob. Jake no le mencionaba nada, Percephone le dejo en claro que no lo hará. Los amigos de Jake tampoco sabían. A Lucia solo le quedo la melancolía.

—Si me hubiera dado la oportunidad... Yo solo quería disculparme y darle las gracias por haberme sacado del infierno.

—Así que tú eres Lucia —interrumpió una voz.

Parecía a la de una niña pero sus ojos le mostraban lo contrario

Era una mujer aproximadamente a su edad. Cabello azul, ojos miel tirando aún color amarillo. Piel de porcelana.

—Jacob me dijo que te visitará, mi nombre es Michelle.

Lucia la miro extrañada, aquella chica le sonría sin parar.

—¿Y como esta él?

—Ohh lo siento eso es un secreto...

—¿Y por que no me lo dices?

—Yo no te haré caso, solo a Jacob.

—Entonces... ¿No me harás daño?

—Es lo que justamente Jacob no me lo permitió —sonrió sínicamente.

—¿Eres un demonio?

—Si.

—¿Jake sabe de ti?

—Si.

—¿Y por que no te vas? , ya sabes que estoy bien

—Jacob me pidió que te cuidara, por si tu novio falla.

Michelle se recostó en una silla mientras daba vueltas.

—No te preocupes por mi, soy muy cautelosa. Ni tu hermana notará mi presencia.

Lucia le miro el vestido particular que llevaba.

Combinaba con su cabello, con algunos bordes negros.

—¿Y como conoces a Jacob? ... Si quieres decirme.

—¡Eso sí! —salta del lugar.

Se sienta en el suelo frente a ella , entrelaza sus piernas y apoyo sus codos en sus rodillas.

—Soy su mejor amiga, confidente, su mayor fan. Lo conozco demasiado, hasta sus peores pesadillas...

—Eso... Es

—¿Interesante?.... ¡Obvio! . Jacob es especial como yo. Pero hay algo que no he llegado a comprender. ¿Por qué Jacob se fijo en ti?....

—Ni yo lo sé...

—Quizás sea por diversión... He,he, he... —agarra una almohada de su cama y lo tira al suelo y se recuenta.—¿Ya te beso?

Lucia se sonrojo.

—Por lo que veo si. ¿Te gustó?...

—No.

—Yo creo que sí.

—Dije que no.

—Pues yo digo que si.

Michelle se ríe por malicia.

—Ay deja de mentirme. ¿Qué Jacob no te dijo que los demonios leen los pecados?

—Si...

—Entonces no hace falta explicar.

Se dio la vuelta para mirar el techo.

—Qué casa tan pequeña. Ni se asemeja a la mansión de Jones.

—¿Y que esperabas?, esta es mi vida, mi familia no es rica como ellos.

—Ohh bueno, yo solo decía.

Lucia se sentía incómoda. Quería que ella se fuera, apenas apareció algo en ella se le hacía insoportable.

—Está bien, me voy.

Lucia la miro impactada.

—OK...

Michelle salió por la ventana.

Le sonríe antes de saltar e irse.