LA META

El camino es extraño, hay zombis armados hasta los huesos... la luz del sol desapareció y ha venido la noche. La guitarra de Amon cambio totalmente el ambiente del inicio. Casas viejas y abandonadas aparecen en el camino y entramos a una ciudad en ruinas con luces parpadiantes. Me recuerda a esas típicas películas de suspenso y terror.

Az ha mantenido su boca cerrada desde hace 15 minutos y pronto aparecerá Amon. Avanzamos un buen tramo pero es lógico que Amon nos alcanze en segundos.

No me ayuda que mi acompañante este así. Pensé que después de contarle mis razones me llenaría de preguntas... e hizo todo lo contrario. ¡Elea eres una tonta! Quizás la muerte se siente demasiado mal por el veneno y no lo quiere decir para no preocuparme.

-¿Cómo te sientes? Ya descubriste si se bloqueo algún super poder...-

Sigo observando alrededor, tengo miedo de que me aparezca hasta el mismo Godzila. Cambio de velocidad porque el camino esta señalizado con flechas raídas que dice Racing... Ahora voy más lento ¿Ese es un espantapajaros saludando con el rotulo que señala el camino?

-¿Elea?¿Qué tiene que ver Slaanes en tu historia?- Me consulta 

Veo más adelante y hay locales abandonadas con pocas luces. Pienso que podríamos pasar a curar sus heridas y probar una loca teoría que tengo desde que pasamos al siguiente nivel. La piel me pica y no he podido dejar de pensar cual es la razón. 

-Me encantaría contarte todo, pero ¿Podemos cambiarte el vendaje?¿Por favor?-

Él mira afuera y me confirma con un sutil movimiento de su cabeza. Yo saco unas armas que estaban atrás.. Meto una granada en mi traje... y cuelgo en el hombro un arma. ¿Qué? No quiero que me aparezca Fredy o quién sabe. Mejor tener un arma que no tener nada. La muerte baja solo y esta esperandome afuera. Salto del auto y llamo a Hapi. 

-¡Estamos perdiendo el tiempo!. Aunque me cures mi herida, este veneno seguirá... en mi cuerpo...-

Az se queja y su rostro parece cansado, no me engaña su pausa, el no quería decir "cuerpo", iba decir "matándome". Mi idea era despitar a Amon en la apuesta para que crean que llevan la ventaja... Ahora sólo debo probar si tenia razón en mi teoría.

-¡Hapi! ¡Se un buen chico y vigila afuera!-

Tomo a la muerte del brazo y lo jalo caminando al establecimiento de la farmacia... Las puertas estan caídas y todo esta tirado en el piso... 

-¡Estas ignorandome a propósito! -

La muerte se queja de mi actitud y a decir verdad ¡Sí! ¡Claro que lo hago!

-¡Bienvenido a mi mundo! ¡Eso hiciste tú cuando te conocí la primera vez!... ¡Eres peor que un muro o un bloque de hielo...!

La muerte me fulmina con su mirada y yo me aguanto las ganas de reirme en su cara. Creo que ya tuvo suficiente... Entramos y busco algunas vendas o gasas. Tomo un paquete de primeros auxilios de emergencia. Puede que lo necesite...  

-Desde ahora te voy a llamar Az porque decirte la muerte, ya no me funciona.-

Sigo hablandole para que no se duerma. Cada vez parece que su calor esta abandonando su cuerpo y sé que poniendolo de mal humor encenderá sus sentidos.

-¡No pienso contestar si lo dices!¿Qué haces Elea?¡Estamos perdiendo tiempo valioso!- Me contesta

-Lo dice el que tiene cara verde y está sudando como un pavo en el horno...-

Aún lo sostengo, él no se da cuenta pero esta apoyandose en mi hombro cada vez más.  Abro el baño y la luz funciona, hay un lavamanos, de mala gana logro que se siente en el bater.

¡Los hombres si que son un dolor de cabeza! Empiezo a cortar la venda improvisada con su guadaña que se convirtió en mi pequeña navaja. Intento ignorar que la herida se ve horrible.... La limpio rápido y vendo. Después me lavo y le digo.

-¡Puede que tengamos una opción para tu veneno! Pero necesito tu ayuda... ¡Cierra los ojos!- La muerte lo duda pero accede sin ganas  y cierra sus ojos.

Empiezo a quitarme mi ropa. ¡Slaanes es un tonto y un zorro!. Pero si salgo de esto me las pagará. Me quedo en ropa interior y veo mi reflejo en el espejo, estoy llena de tatuajes de animales y otros signos.  Yo no entiendo como los voy a usar. Además dijo el color rojo es para venenos. Me lo busco y hay una serpiente en mi antebrazo de color rojo... Exactamente en el lugar que me picaba.

Lo más seguro que la muerte sepa que hacer y por eso tengo que mostrarle el arsenal de opciones que tengo en mi cuerpo.  El traje que escogio tapaba mi tatuajes por eso debía quitarme la ropa. Y mi cara esta super caliente pero no hay de otra. ¡Te odio Slaanes! ¡No pudiste dejarlos sólo en el brazo! ¡Las piernas!

-¡Abre los ojos!- Digo respirando lo más normal posible e ignorando mi pena. 

-¿Los ves?-Le muestro los tatuajes... 

-¿Si fuera un demonio cómo lo puedo usar? Slaanes dijo que el rojo era para venenos...-

La muerte parpadea y parece asombrado que este llena de tatuajes... Su rostro apenas logra mantenerse despierto. Levanta su mano y toca cada uno de mis tatuajes, me doy la vuelta para que revise mi espalda...¡Tranquila Elea! ¡Esta viendo tus tatuajes!  No puedo creer que a estas alturas de mi vida sea la primera vez que estoy casi desnuda ante alguien..