Anita

Capitulo 30. El Peso Del Pasado.

Disfruté mucho el tiempo extra con mi padre, pero tuvo que partir hacia su lugar en este mundo. Lo despedí con un desayuno como a él le gustaba: café negro y algunos postres que preparé. Antes de irse, me pidió una charla a solas, y accedí.

En esa charla, me pidió que no llevara las cosas demasiado lejos con Salvador hasta estar segura de lo que siento, luego nos abrazamos fuerte y, sin decir más, subió a su carruaje, no negaré que sentí una gran tristeza al quedarme sin Frank cerca.

Tras unos días tristes, decidí dar un paseo por la ciudad. Primero busqué un buen almuerzo y luego fui a la biblioteca a ver si había novedades. Al cruzar la puerta, vi un rostro familiar era Jack ,al verlo, di media vuelta y salí corriendo. Me senté en las escalinatas sin poder respirar con normalidad; fue impactante verlo con una mujer.

Jack corrió hacia mí, se sentó a mi lado y, sin mirarlo, le recomendé volver con ella. Le dije que no esperaba encontrarlo ese día; supongo que fue casualidad, o no, no lo sé.

Me mareó volver a oler su perfume. Le rogué que me dejara sola, pero no se movió. En un ataque de rabia, le dije que no quería volver a verlo. Me levanté y huí. Él me siguió, insistente. En un intento por detenerme, me abrazó, y entonces sí, las lágrimas brotaron. Nos quedamos en silencio unos segundos hasta que recuperé la compostura y le sugerí que volviera con la mujer rubia que lo tenía tan bien agarrado del brazo,sin mirarlo, bajé la cabeza y me alejé.

¡Buenas tardes a todos! Espero que estén disfrutando del libro. Si les gusta, ¡no duden en comentar! Les deseo un buen día. ¡Adiós!




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