Inicia diciembre, mi mes favorito ya que en este mes es Navidad, finaliza un año e inicia otro pero sobre todo, lo más importante, le dieron a Peter una semana fuera de la clínica, así que pasaremos Navidad juntos, bueno nosotros y Tom, ya que él al enterarse de la noticia, dijo que era momento de conocerlo.
Esta es la última semana de trabajo, la empresa nos da 3 semanas de vacaciones, estaba con los chicos en la cafetería...
- ¿Que harán estás vacaciones? -- nos pregunto ángel
- Yo iré a visitar a mis padres, ahí pasaré Navidad y Año Nuevo -- respondió Susana
- Yo la pasaré con mi novia. -- dijo André-- ¿Y tu Alicia?
- En casa, aprovecharé estos días para descansar. -- respondió
- Que aburrido. --dijo André haciendo que todos empezaran a reír
- ¡Oye! Hay muchas formas de ser feliz y esta es una de ellas..-- añadió Alicia
- Como digas. -- sonríe -- ¿Y ustedes? --Nos señaló a Ángel y a mi
- La pasaré con mi hermano. -- respondí
- Pasaré Navidad con la familia y Año Nuevo con mi novia. -- dijo Ángel
Noto que Alicia y Susana me miran sonrientes...
- ¿Que sucede? -- les pregunto
- Creo que alguien viene a verte. -- respondió Susana mientras reía junto con Alicia
Al voltear veo a Sebastián caminando hacia nosotros.
- Hola chicos -- saluda a los chicos los cuales le responden principalmente Susana y Alicia -- Hola preciosa --dice mientras se sienta a mi lado-- ¿Interrumpo algo?
- No, estamos platicando de nuestros planes. ¿Verdad? --pregunto a los chicos
- Así es. ¿Que tiene planeado para estas vacaciones Señor Stan? -- pregunta Susana
- En primera llámenme Sebastián que ya estamos en confianza. Y respecto a tu pregunta -- se pone a pensar su respuesta -- creo que iré a Los Ángeles, la verdad no estoy muy seguro, lo veré en su momento -- se ríe -- aunque podría cambiar mis planes -- me mira fijamente
- Oye Susana, hay que ir a terminar lo que te comenté. -- Habla Alicia quien le guiña el ojo al tener su atención
- ¿Que cosa? Ah sí, vamos -- se pone de pie junto con Alicia -- vamos chicos -- le dice a Ángel y a André -- Nos vemos luego.
- Feliz Navidad --le dice Alicia a Sebastian-- por si no nos vemos de nuevo --sonrie coquetamente
- Feliz Navidad Alicia. -- los cuatro se van dejandome con Sebastián-- ¿Y tu qué harás estos días? --me pregunta
- La pasaré en familia.
- ¿Con tu esposo? -- pregunta algo desanimado.
- Así es. Con él y con mi hermano.
- Espero que se la pasen bien. Acompañame a la oficina --se pone de pie-- ahí tengo tu regalo de Navidad, pensaba dártelo el viernes pero viajaré mañana así que hoy es mi último día.
- ¿Un regalo? No era necesario Sebastian.
- Si lo es y los regalos no se rechazan así que vamos. --me ayuda a ponerme de pie--
- De acuerdo vamos.
Salimos de la cafetería, íbamos al elevador cuando nos encontramos a Elizabeth...
- Sebastian, Ana ¿Que tal? -- nos saludo
- Buen día señorita Elizabeth. -- respondí
- ¿Vas de nuevo con Tom? -- esa pregunta me tomo por sorpresa
- Claro, sabes que soy indispensable para él. -- sentí celos al escuchar esto
- Solo en el trabajo, así que no te ilusiones -- aguante la risa al ver la cara que puso Elizabeth
- Imbecil -- respondió enojada
- Si, si, ¿Nos vamos Ana? -- me preguntó Sebastian
- ¿Desde cuándo socializas con los empleados? --me miro despectivamente
- Desde que Tom te contrato --en tu cara perra -- Ana, vámonos -- me tomo de la mano--
Al entrar al elevador, ya no aguante la risa...
- Que hermosa sonrisa tienes --me sonroje al instante
- Gracias, y lamento esto, no se qué tiene en contra mía.
- Envidia simplemente. ¿Viste su cara? No aguanto un mini insulto --reimos
- ¿Es cierto sobre lo de Tom, digo el señor Hiddleston?
- Completamente, desde que Tom la contrato siempre busca un pretexto para estar cerca de él, ¡que fastidio! -- mis celos crecieron al escuchar esto-- Llegamos --se abrió el elevador
Al salir note un gran pasillo con varias puertas, caminamos hacia la última, Sebastian abrió la puerta y entramos.
Sin duda alguna no escatiman en lujos ya que tanto el de Sebastian como el de Tom, irradiaba elegancia, tenía un mini bar, una sala, un clóset, su propio baño, y la vista era hermosa, la diferencia entre ambas era el tamaño, el de Sebastian era un poco más pequeño que el de Tom.
- Hermosa oficina. -- fui directo hacia el ventanal -- y hermosa vista.
- Gracias y si es una hermosa vista --tuve la sensación de que no se refería a la ciudad -- Espero te guste --me entrega una caja envuelta en papel de regalo de color dorado --
- Gracias pero...
- Pero nada --me corta-- me hubiera gustado dártelo en una cena pero viendo la situación no es una buena idea.
- Sebastian yo...
- Tranquila, ya acepte la derrota, por ahora --sonrie--
- Te mereces ser feliz Sebastian y conmigo no podrás serlo. Recuerda que estoy ...
- Casada -- me duele saber que lo estoy lastimando -- Lo se, pero ¿porque no veo tu anillo? ¿Porque cuando hablas de él, no te brillan los ojos? --me acorrala a una pared--
- Soy muy distraída que puedo perder las cosas por eso no uso mi anillo --si soy distraída pero la verdad es que no tengo anillo, Tom no lo vio necesario--
- Por más excusas que digas se que no eres feliz. --se acerca demasiado a mi que solo nos separa la caja-- tranquila no voy a besarte, y no es porque no quiera hacerlo, deseo besarte pero no quiero ponerte en una situación incómoda. --se aleja de mi--
- Me tengo que ir -- camino hacia la puerta --
- ¿Ana? --voltea a verlo-- Se que no eres feliz con él, acepto tu decisión de estar con el apesar de eso pero si en algún momento decides dejarlo, aprovecharé la oportunidad por más mínima que sea por estar contigo.
- Está bien. -- ambos reímos-- Feliz Navidad Sebastian.