Años Perdidos

Tú también

— Yo iré — Ignacio propuso. Del mismo cajón sacó otra arma , pero esta con el puñal dorado — No te muevas de aquí — me señaló dando una mala impresión —Cuando salga le pones seguro y no abras a nadie , incluso si escuchas gritos , no salgas Leyla .

Su advertencia me estremeció . Me hizo temblar , incluso rogar que esto fuera un sueño , pero el sonido del portazo , duro y alarmante me desmintió .
Estoy alerta ante cualquier sonido , pero nada se escucha , nada proviene de la casa , ni gritos , maullidos o ladridos . Nada . 
Me levanté de la silla y me senté en el suelo poniendo más drama a todo , junté mis piernas y escondí mi cabeza entre ellas.

Pienso y pienso como puede resultar todo esto , pero solo se me viene una imagen en la mente , Rix empapado de sangre , con los ojos bien abiertos , viéndome y dedicándome su última palabra : "Adiós ".

Ignacio en ningún momento dió detalle de cómo cayeron rendidos los gorilas . Y si él le dió un arma a Rix , es por que los hombres de Benedicto también deben de tener .

Todo por información y papeles de mi herencia .

" Usan la fachada de Seguridad, para matar sin piedad , sin culpa " , su voz ronca invadió mi mente , aquel hombre atado en el árbol realmente me había marcado .

Por resultado pensé lo peor de mis aliados , una cosa es obtener lo que quieres , pero matar es otra , ¿Matarían a Rix sin compasión solo por interponerse en su camino? .

"Mi vida será una mierd* pero yo decidí cada uno de mis pasos , nadie me la controló ". Una vez más su voz allanó mi mente , logrando perturbar mis ansias de ver el lado bueno a esto.

Justo hoy mi cerebro se dignó a reproducir palabras claves de su boca. Ha intentado atropellarme , pero tiene un buen punto  , ¿Qué hago aquí lamentado lo que va a pasar?. Todos ellos toman sus propias decisiones , dejando atrás las consecuencias .

La frase dice : "Piensa antes de actuar ", lo hago , pero de tanto hacer eso las oportunidades se van de mis manos , me vuelvo inservible , débil . No soy capaz de luchar por mí misma . Dejo todo en mano de los demás , soy cobarde , egoísta e inconsiserada . Soy hipócrita al criticarla , insultarla , cuando soy peor que ella .

La frase debería ser :"¡Mierd* deja de pensar , levántate y actúa".

                         ***

— ¿Dónde esta?— hablé desesperada con voz apagada .

He revisado la mayoría de cajones y aún no encuentro un cuchillo , justo hoy los cubiertos se propusieron esconderse de mí. 
Entré a la casa de puntillas , sí , a mi propia casa , esperé encontrar los muebles tirados por doquier ,los jarrones en miles de pedazos regados sobre la alfombra , o las ventana rotas , pero nada de eso ,todo en su mismo lugar . Mi meta era conseguir un arma para defenderme , pero opté por agarrar la sartén , según la película Enredados es útil y práctica.

Apreté el mango fuerte , salí del comedor y subí al segundo piso con cautela , por eso mismo al salir de la cabina de vigilancia me quité los tacones , estoy descalza y no me preocupo por ensuciar la planta de mis pies por que ya lo están por el camino de cemento hacia la puerta.

No escucho nada , me pregunto si Benedicto envío ninjas en vez de guardaespaldas.

— ¿A dónde voy primero? — susurré.

Hay 3 caminos por tomar , la del centro lleva a mi habitación , la de Úrsula y otras vacías , la de la derecha a la de Rix e Ignacio que usa pocas veces , la de la izquierda lleva al despacho ,y la habitación de Lucía .

Ignacio debe estar obviamente a la izquierda con Lucía , sin embargo ahí está el despacho , todo sería mas fácil si hubiera luz , podría ver si hay hombres ocultos o algo. Es ahora o nunca debo ir a la izquierda .

Toco la pared solo con las yemas de mis dedos , la cuáles tiemblan al sentir lo frío que está. Avanzo sin prisa , a pesar que el tiempo es corto ,y con mi mano derecha sostengo aún el mango de la sartén. El vestido no me deja mover mis piernas como quiero , doy pasos cortos e interrumpidos.

— Auch — me quejé .Al notar mi imprudencia tapé mi boca de inmediato soltando el sartén , produciendo un corto estruendo.

Tontamente volteo tratando de fijarme si alguien oyó , pero es imposible fijarse con esta obscuridad.

Al parecer había pateado la pequeña mesa blanca , la cual siempre lleva encima un jarrón lujoso , para mí suerte no cayó , no obstante me hizo llamar la atención . Espero que nadie haya escuchado , a quien miento ,fue ruidoso.

Toqué mi pecho para ver cuan acelerado estaba mi corazón , y en efecto latía sin medir el impulso , amenazando con salir de mi pecho en cualquier momento , bajé mi mano , suspiré , y al haber recuperado la calma — solo un poco — me agaché , justo en ese momento me agarraron por detrás , retrocedí unos cuantos pasos por escalofríos , pero seguían agarrándome , con una mano tapaba mi boca , y su otro brazo rodeó mi cintura . Levantó mi cuerpo apoyando mi espalda en su pecho y empecé a patear sin conseguir nada .

Soy consciente de que retrocede , sin embargo no puedo hacer nada para detenerlo , tiene fuerza sobre  humana , ¿Quién es?,¿A dónde me lleva?, me asusto , entro en pánico , no se que va a ser de mí , solo quise ayudar a Rix . Mi intención no era mala .

Pienso lo peor de todo , qué tal si el que me está sujetando trata de hacerme daño mientras los demás se ocupan con sus problemas en pleno corte de luz .
Ignacio debe estar con Lucía .
Los hombres de Benedicto están en el despacho de Úrsula .
Los gorilas están tirados por ahí .
Ahora que lo recuerdo , solo ví unos pocos , llegué a contar solo 6 , cuando en realidad son como 10 , teniendo en cuenta de los que vigilan afuera de la casa .
Uno debió no caer , y ese hombre me está llevando a no sé dónde.
Querrá desquitar conmigo sus locuras más perturbadoras .

No . No . No puedo acabar así .




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