CAPITULO 26

DONNY

Ayer pude besar a Diana mientras estábamos viendo una película de fantasía pero no lo hice. Mi hermana estaba a mi lado y eso sería raro, también su hermano estaba ahí, además, quiero que nuestro primer beso sea mejor que algo así, en una sala de cine llena de olor a mantequilla y queso fundido.

Hoy vine temprano a la casa de Diana, la llamé hace unos minutos para que me abriera la puerta. Ella aparece y me mira frunciendo el ceño y presionando sus labios, con una expresión de confusión. Cada vez que Diana hace ese gesto me parece muy linda, ella es tan linda.

—Eh, hola —rasca su brazo—. ¿Qué pasa? ¿Cómo viniste aquí?

Señalo hacia atrás. —Mi auto, ya lo tengo de regreso y quise venir por ti para ir a la escuela.

Ella abre un poco la boca, mi corazón late al ritmo de un tambor cuando veo sus labios. No sé cómo me he controlado todo este tiempo sin besarla, lo he querido hacer desde que la conocí. —Ah, ¿Llamo a Eddy? ¿Anne va ahí? No la veo.

Sonrío de lado. —No Diana, solo tú y yo, ¿vamos?

Diana parpadea nerviosa. —¿Ah, si? Bueno, supongo que podemos ir solos... Eddy, él ya se iba a ir en unos minutos y…

— ¿Ya estas lista? —pregunta alguien detrás de ella.

Diana cierra los ojos. —Ay no —intenta cerrar un poco la puerta para evitar que vean quien está afuera.

Pero su hermano, Ben aparece. De pronto toda mi seguridad se ha marchado, no sabía si él estaría aquí. —Oh vaya, ¿Vienes por mi hermanita?

Cada vez que usa la palabra “hermanita” me siento amenazado. —Yo…

— ¿Quién es? —Otra voz—. Ey, Ben, ¿Quién está ahí?

Adam aparece y sonríe de manera burlona cuando me ve. —Ah, Diana, ¿Tan temprano tienes visitas?

Diana se voltea hacia ellos. — ¿Pueden, por favor, irse a otro lado? ¿A otro país, quizás?

Ben estira su mano y me toma del brazo. —Pasa Donny, ¿Quieres comer algo antes de ir a estudiar?

Yo entro sin tener escapatoria. —Gracias, estoy bien.

Adam frunce el ceño. —Entonces, ¿Qué pasa? ¿Por qué estás aquí?

Rasco mi cuello e intento no ver a Diana. —Bueno, yo pensé que sería buena idea, ir a la escuela, pasar por diana. Tal vez.

Adam se cruza de brazos. —Ben iba a llevarla, puedes irte.

— ¡Adam! —Grita Diana enojada—. No seas grosero.

Adam rueda los ojos, la abraza por encima de los hombros y recuesta su mentón sobre su cabeza mientras ella se mueve intentando liberarse de él. —No es ser grosero, Diana.

Ben ríe. —Es cierto, solo te cuidamos.

No me siento intimidado por ellos, soy de la misma altura que ambos y yo también me ejercito pero, ¡Son los hermanos mayores de la chica que quiero! Claro que me siento así, no quiero que me desaprueben o que piensen mal de mí. —Yo no le haría nada a Diana, jamás.

Ben mueve su mano y le aprieta la mejilla a Diana. —claro que n o lo harás, será tu peor error en esta vida.

Diana se libera de Adam —Ustedes dos me van a matar —mira hacia el fondo—. ¡Mamá! Tus hijos están avergonzándome.

Su madre aparece al lado de su padre. — ¿Qué pasa, Diana? —luego me mira y sonríe—. ¡Donny! Qué bueno verte, ¿Cómo has estado?

Su padre sonríe también. —Hola muchacho, ¿Todo bien?

Bueno al menos sus padres no intentan correrme de aquí. —Sí, buenos días.

Su madre se acerca a Diana y le arregla el cabello que Adam despeino. — ¿Qué pasa, amor?

Diana mira enojada a sus hermanos. —Ellos están siendo groseros con Donny.

Su padre se acerca y suelta una carcajada. —No sean así, Donny es un buen chico.

Adam suspira. —No estábamos haciendo nada.

Su madre, que es más baja que ambos, les da una palmada en los brazos. —Diana ya no es una niña, no alejen a un chico guapo de ella, déjenla.

—Mamá —Diana se sonroja—. ¿Sabes que, Donny? Es un buen momento para que huyas de este lugar, yo no puedo hacerlo pues compartimos ADN.

Sonrío. —No huiré.

Eddy aparece y se detiene cuando me ve. —Ah, ¿hola? ¿Qué haces aquí? Yo ya iba por Anne…

Asiento. —Te está esperando —aviso.

Eddy mira a sus hermanos y luego a mí. — ¿Te están molestando, verdad? —suelta una carcajada y se para delante de mí—. Oigan, él no es como los otros, Donny es genial y Diana es la que es grosera todo el tiempo, no se preocupen por ella, tengan pena por él.

— ¿Puedo irme? —Pregunta Diana—. Tengo clases, necesito irme.

Ben me mira. — ¿Valoras tu vida, Donny?

— ¡Ya basta! —Pide Diana—. Tienen que parar con esto, algún día me casaré y creo que ustedes seguirán siendo tan irritantes.

Ellos solo se ríen, incluyendo sus padres. Sé que a Diana esta situación la está avergonzando pero yo pienso en lo afortunada que es al tener una familia que haría cualquier cosa por ella. Sus hermanos claramente la están cuidando, sus padres son buenas personas. Extraño mucho a los míos.

Diana se acerca a mí. —Solo iré rápido por mis cosas, ¿sí?

Asiento viendo hacia otro lado, no quiero que sigan las amenazas. Diana sube las escaleras corriendo como si temiera que al tardarse, sus hermanos digan algo incorrecto mientras ella no está aquí.

—Oye Donny —habla Adam—. El hermano número tres de Diana vendrá pronto, vamos a tener una reunión contigo, ¿Está bien?

Eddy bufa. —Eso será divertido, Chris es otro nivel —me mira—. Prepárate.

¿Qué?

— ¡Ya! —baja de dos en dos las escaleras, yo solo espero que no se tropiece por apurarse.

— ¿No hay ni siquiera un adiós para tus hermanos? —pregunta Ben cuando Diana le da un beso a cada uno de sus padres.

Ella rueda los ojos y les da un abrazo de lado. —Adiós, los quiero pero deben aprender a no hablar tanto.

—También te queremos, conejita —se despide Ben.

Eddy, Diana y yo salimos de ahí y tomo una respiración larga. Eso fue intenso. —Bueno, voy por Anne —avisa Eddy—. Nos vemos en la escuela.