CAPITULO 36

El siguiente día de escuela fue normal, aunque vi a Rilley de lejos él no parecía interesado en mi existencia así que no se acercó. Eso fue algo bueno, no quería verlo de nuevo.

Todo ha ido bastante regular hasta que llegó la hora de la salida. Caminaba con Donny de la mano cuando entornó los ojos al frente. — ¿Esos son tus hermanos? ¿Acaso no se iban a ir por la mañana?

Es cierto, todos ellos iban a regresar a sus respectivas ciudades mientras yo estaba en la escuela es por eso que nos despedimos ayer por la noche. Esto es extraño, no solo están mis tres hermanos aquí en la entrada de la escuela sino que están hablando con Eddy, ¿habrá sucedido algo?

—Creo que iré a ver —le digo y caminamos unos pasos cuando ellos miran hacia el lado izquierdo después que Eddy señala hacia un lugar.

Mis ojos siguen el camino imaginario dibujado por mi hermano y me doy cuenta que están viendo a Rilley a punto de entrar a su auto. Mis hermanos caminan hacia él y mis ojos se abren, ¿Qué van a hacer?

—Ay no —suelto y aprieto la mano de Donny.

Parece que él lo comprende también pues nos apresuramos para seguirlos en caso haya que detenerlos antes que hagan algo muy malo. Pero ellos cuatro se separan y se acercan al auto de Rilley colocándose en cada esquina del auto.

Rilley los mira confundido, aún tiene un golpe marcado en el rostro. Es difícil decir quien se lo hizo. — ¿Quiénes son ustedes?

Adam se acerca a él. —Eso no importa —le dice.

Eddy se acerca del otro lado y tiene el rostro rígido. —Estamos aquí para advertirte que jamás toques a Diana.

Rilley sonríe de lado. — ¿De eso se trata? ¿De Diana?

Por suerte no se han percatado de mi presencia o la de Donny. Chris le da un par de palmadas al techo de su auto. —Sí, y te advierto que ella es todo para mí, ¿entendido? Tengo tantas ganas de hacerte daño pero me estoy reteniendo, la próxima vez no lo haré.

Ben también se acerca. — ¿Sabes qué? Simplemente no vuelvas a internar nada con ninguna chica —lo mira a los ojos—. ¿Entendiste?

Eddy abre la puerta del auto. —Ahora vete de aquí antes que decidamos hacerlo a nuestra forma.

Adam lo empuja un poco. —Nunca más, ¿Entiendes?

Rilley intenta permanecer tranquilo pero puedo ver que su mirada está intimidada. Él ya no parece tan seguro de sí mismo rodeado de cuatro chicos muy enojados. —Bien, ya no me importa ella —entra a su auto y cierra de un golpe.

Ellos se mueven un poco para dejarlo pasar, cuando se aleja todos parecen exhalar al mismo tiempo. Sé que mis hermanos no son violentos pero sé que haría cualquier cosa para defenderme y cuidarme. Eso me hace sonreír.

Corro hacia ellos y abrazo a Ben por la espalda. —Me asustaste —dice él riendo—. Pensé que era alguna admiradora.

Lo suelto y me acerco a Chris. —Los quiero mucho.

Chris me aprieta y se ríe, luego voy con Adam y también lo abrazo. Esto es algo que siempre me ha gustado, abrazar a mis hermanos. Puede que nos cambiemos de cuidad muy seguido pero mi familia ha sido lo único permanente en mi vida. Tener a mis hermanos y a mis padres conmigo ha sido

—Tu también —abro mis brazos para abrazar a Eddy—. Ven aquí.

Él se queja pero deja que lo abrace, luego me empuja para separarnos. —Ya, suficiente, todos nos están viendo.

Chris suspira. —Bien, hora de irnos.

Claro, se tienen que ir. No me gusta cuando se van pero no hay nada que pueda hacer, la vida continua y ahora ellos tienen vidas independientes. Al menos los veré de nuevo muy pronto. —Los voy a extrañar.

Adam sonríe. —Tranquila, nos vemos en un mes para mi fiesta de compromiso —señala a los demás—. No falten.

—Jamás —Ben lo abraza por los hombros—. Nuestro Adam se nos casa, ¿no es genial?

Él rueda los ojos. —Como sea, ya es hora de irnos —me da otro abrazo—. Te hablo cuando llegue.

Ben da un paso hacia mí pero levanta su mirada. —Ey, Donny —le hace una seña—. Acércate.

Donny se coloca tímidamente a mi lado. —Um, hola.

Ben toma su mano y la estrecha. —Cuida a Diana mientras estamos lejos, ¿bien?

Chris suelta una carcajada. —Y si la lastimas, ya has visto cómo podemos llegar a actuar.

Yo exhalo. —Bien, no se cansan de avergonzarme aun cuando están a punto de irse, ¿no?

Adam asiente con una sonrisa. —Por favor intenten no pasar mucho tiempo a solas —me mira entrecerrando sus ojos—. A menos que quieras otra vez “la charla”

Me cubro el rostro. —Ya, ¿saben qué? No los extrañaré.

Donny ríe un poco. —Tranquilos, seré muy bueno con ella —me mira y sonríe—. Cuidaré de Diana.

Mis hermanos se despiden una vez más de Eddy y de mí, los vemos alejarse y se suben todos al auto de mi padre. Seguramente después irá por él al aeropuerto.

Eddy se acerca con nosotros. —Extrañaba hacer esto, intimidar a un chico por ti.

Empujo su hombro. —Sí, mientras ustedes se divertían yo sufría aunque esta vez no me molesta.

— ¿Vas a intimidarme también? —pregunta Donny riendo.

Eddy entrecierra los ojos. —No, eres el hermano de mi novia, no quiero problemas.

Tomo la mano de Donny. —Entonces tú deberías intimidar a Eddy, ¿no?

Él me acerca a su cuerpo para abrazarme. —Um, no realmente, es bueno con Anne.

Eddy se cubre la boca. — ¿Por qué ahora son tan cursis? Extraño cuando se peleaban.

Donny besa mi frente. —Me gusta más esta nueva fase de nosotros —yo rodeo su cintura con mis brazos—. Por cierto, ¿Dónde está mi hermana?

—Ya viene, estaba ayudando a una profesora hace un rato —explica y mira detrás de nosotros—. Y ahí está.

Anne se acerca sonriendo, mira a Donny y a mi abrazados e intenta no reírse, luego toma la mano de Eddy. —Entonces, ¿Cómo salió todo?

Eddy asiente. —Perfecto, no creo que ese idiota vuelva a molestar a nadie.

Anne suelta una larga respiración. —Es un alivio, realmente es un idiota.