Escándalo (Basada en Louder than bombs de BTS(

Escándalo

Casi no había dormido nada ¿Quién iba a decir que la promoción de la película sería más agotadora que el rodaje mismo? Pero el tono de Eli por teléfono no dejaba lugar a réplicas y, aunque nunca antes me había reprochado estar demasiado cansado para salir con ella, intuyó que ese no era un buen momento para decir “No puedo verte, necesito dormir” así que ahí estaba, llegando a la pequeña cafetería donde lo había citado.

Era uno de sus lugares favoritos. Un local pequeño y no muy concurrido, pero la iluminación tenue y el mobiliario en tonos crema y chocolate lo hacía bastante acogedor y a su novia le gustaba la música que solían poner en el fondo. A él honestamente cualquier lugar con aroma de café y su risa le parecía perfecto.

En general todo el tiempo que habían pasado ahí había sido muy agradable, usando los postres y las bebidas calientes cómo excusa para disfrutar de la compañía del otro sin pensar demás en ninguna otra cosa, así que consideró la posibilidad de que ella simplemente quisiera pasar más tiempo juntos o hubiera malinterpretado su tono, pero la esperanza de tomarse una taza de café tranquilo  se disipó cuando notó la expresión con la que lo esperaba y el hecho de que se había maquillado, algo que no acostumbraba hacer a menos que intentara disimular  que estaba enferma, desvelada o había estado llorando.

— ¿Qué pasó?

Intentó preguntar en el tono más conciliador posible mientras la tomaba de la mano, pero Elizabeth se soltó y puso sobre la mesa una revista con una foto suya abrazando a una hermosa actriz en la portada.

Casi se le escapa una maldición cuando comprendió lo que pasaba. ¡Carajo! Quería hablar con ella antes de que se publicara, no esperaba que llegara a sus manos tan rápido.

—Son muy fotogenicos los dos, se ven muy bien,  pero lo que más me gustó fue la entrevista…

Dijo mientras tomaba de nuevo la publicación y buscaba una página para leer en voz alta.

“P: La crítica está sorprendida con tus habilidades histriónicas, especialmente en las escenas románticas ¿A qué atribuyes el éxito en tu debut como actor?

R: Obviamente hubo mucha preparación antes de cada escena, pero bueno, después de todo ¿Qué tan difícil puede ser pretender estar enamorado de una mujer como Natalie?

P: Hablando de la química entre ustedes, que tanto ha dado de qué hablar, ¿Cómo lograron acoplarse tan bien sin haber trabajado juntos antes?

R: Ese tipo de cosas simplemente se da, no puedes forzarlo. Natalie es una mujer hermosa y una gran actriz, me alegro mucho de haber estado con ella en este proyecto y espero que cuando el público vea la película  pueda percibir esa chispa tan maravillosa que surgió entre nosotros.

P: Es inevitable hacer esta pregunta ¿Qué puedes decir respecto a los rumores de que el romance trascendió la ficción y hay algo entre ustedes dos en la vida real?

R: Sólo te puedo decir que su personaje y el mío están irremediablemente enamorados y cuando te apasionas tanto en un proyecto de este tipo, no siempre es fácil saber dónde termina la ficción y empieza la vida real...”

Le quitó la revista para detenerla. Sonaba más molesta con cada palabra que pronunciaba y al parecer pensaba leer toda la entrevista.

— Es sólo para hacer ruido antes del estreno de la película, a la gente le gusta creer que hay algo de realidad en lo que ve en la pantalla, pero Natalie y yo apenas cruzamos palabra cuando no hay una cámara apuntandonos.

— ¿Y aún así surgió una “chispa maravillosa” entre ustedes”? ¡Wow!

Respondió fingiendo admiración lo suficientemente teatral para dejar claro que estaba siendo sarcástica.

— Sólo le respondí a la reportera lo que ella y sus lectores querían escuchar, entre nosotros no hay ni chispa, ni química ni nada ¿De acuerdo? Hubieran preguntado exactamente lo mismo sin importar quien fuera mi coestrella, incluso si hubiera sido otro hombre.

— No me interesa lo que los demás digan o quieran escuchar. Puedo soportar los chismes, las telenovelas que se inventa la prensa de espectáculos o lo que comente la gente en internet, pero no que tú mismo insinues que estás enamorado de otra mujer, con la que por cierto pasas mucho más tiempo que conmigo , en una entrevista para una revista de circulación nacional, ¿A quién le estás diciendo la verdad? ¿Realmente le mentiste a esa reportera o sólo estás diciéndome “lo que quiero escuchar” a mí también?

Las cosas habían llegado demasiado lejos, habían acordado por el bien de la carrera de los dos mantener su relación en secreto, pero una cosa era saber que algo debía ser privado y otra muy distinta no estar segura de si era real o no.

— ¿Quieres que diga la verdad? ¿Quieres que haga público que estamos saliendo para que se acaben los rumores con Natalie?

La retó.

No, eso no era lo que ella quería y él lo sabía perfectamente, le había dejado claro desde un principio que quería ser “Elizabeth”, no  “la novia de Samuel”.

— Lo que quiero es que no vuelvas a buscarme hasta que se te pase la “confusión” y tengas bien claro dónde termina la ficción y empieza la realidad.

Cuando lo vió llegar y sentarse junto a ella no había tomado todavía la desición de terminar con él, aunque lo había considerado desde hacía ya un tiempo y su comentario simplemente la había empujado a decirlo en un impulso.

—¿Estás terminando conmigo? 

Dijo mientras la tomaba del brazo para evitar que se levantara y se fuera.

—No lo sé, a veces siento que la confundida soy yo y no somos más que ficción.

¿Podía realmente decir que tenía novio cuando ninguno de los dos podía permitirse hacer pública su relación y sobre todo ambos sabían que no tenían ningún futuro debido a lo mismo? 

—No me vengas con eso, ¿De verdad estás dejándome por algo que salió en una maldita revista?

Demandó, incrédulo e indignado.

—Baja la voz, por favor.

Pidió ella al notar las miradas que empezaban a concentrarse en la mesa del fondo del local.