Rápido como el Viento.
Tres años Después.
── ¡Derek Foster!
Levanto mi mirada aturdido al escuchar a la secretaria llamarme.
Al escuchar los aplausos sé que debo levantarme, lo hago a regañadientes, para ser sinceros no quería venir, pero he sido obligado por mi padre y Jess. La graduación es muy importante, sobre todo cuando finalmente estudias lo que realmente querías.
Hace tres años me armé de valor para decirle a papá que cambiaría de carrera, a la que siempre quise desde mi adolescencia. Lograrlo no fue fácil, tenía que mejorar mis notas, no es que yo fuera malo, pero podía llegar a un acuerdo para no tener que empezar de cero. Al subirlas y poner mucha dedicación, sólo tardé tres años en completarla, cosa que sorprendió a muchos de los maestros, inclusive al niño bonito.
Me levanto con una sonrisa falsa y me aproximo a que me entreguen mi título, como mi mala suerte siempre me acompaña, el que me entrega el título nada más ni nada menos es Ryan. Apenas y sonríe cuando me entrega el título con una mano y con la otra me estrecha la mano, volteamos a la izquierda para la foto y me suelta. Escucho las felicitaciones de los demás profesores y del director.
De camino a mi asiento, le dedico una mirada irónica a mi padre, puesto a que es el único de pie aplaudiéndome.
El evento pasa ante mis ojos de forma rápida, puesto a que estoy demasiado distraído desde hace tres años. No presto atención al discurso del director o al del mejor estudiante de la promoción. Simplemente me quedo sentado con la mirada perdida, y cuando finalmente acaba, salgo ignorando el llamado de algunos compañeros y de Mars. Con este último casi no he hablado desde lo sucedido con Jenna.
Aunque no lo parezca, me hace falta Mars, debajo de mi orgullo, extraño los viejos tiempos. Sólo que aún tengo demasiado orgullo y rencor que sanar.
Cuando voy por los pasillos una chica pequeña se posiciona en frente de mi con esa mirada, esa mirada de niña enamorada y esperanzada. Respiro hondo para llenarme de paciencia.
── H-hola, Derek. ──Alzo las cejas causando que se sonroje── Me llamo Alexa ¿No te gustaría venir conmigo y unos amigos a comer pizza?
Me inclino un poco hacia ella si dejar de mirarla a los ojos, ella traga saliva.
── ¿Por qué iría contigo?
── N-no lo s-sé, pero me gustaría que fueras conmigo.
── ¿Cómo una cita?
── Sí.
Entrecierro mis ojos analizándola, finalmente me enderezo. Los últimos tres años me he enfocado en mejorar mis actitudes impulsivas, y he tenido un buen progreso, las prácticas de boxeo y terapia han ayudado bastante. No he tenido ninguna relación con mujeres desde entonces, no he salido con ninguna ni he jugado como solía hacer al entrar en esta universidad. Por lo que, como me comprometí a no tratar mal a una mujer, bajo ninguna circunstancia, he cambiado mis tácticas de rechazo.
── Soy gay, Alexa.
Tal vez no sea la mejor, pero es la que mejor funciona.
Ella abre los ojos con sorpresa y se sonroja. Casi me rio al verla, pero eso me delataría.
── Pero, hace años saliste con la zo... Alexandra. ──Se corrige al ver mi mirada de advertencia.
Si de algo me encargué, fue eliminar esa reputación falsa. Claro que hay uno que otro que le encanta rebuscar en el pasado.
── Ella es la dueña de mi corazón, no hay espacio para mujeres. Por eso soy gay, es igual de interesante. Que te vaya bien.
Camino rápidamente para no darle la oportunidad de responderme, sé que es ridículo poner mi vida personal en pausa por esperarla, sobre todo cuando ya sé que no volverá. Pero me siento bien así, porque soy consciente que sólo existe una mujer para mí, no hay necesidad de tratar de reemplazarla.
Una mano en mi hombro me detiene, por un momento me preocupa que sea mi padre, y no es por nada malo, simplemente no quiero escuchar sus planes para celebrar la graduación. Para mi sorpresa esta Edd, uno de los nuevos trabajadores de mi padre que se ha encargado de parte de mi entrenamiento en peleas, con el tiempo nos hicimos bastante cercanos gracias a que tenemos casi la misma edad.
── Felicidades por tu graduación, Dek.
── Gracias, supongo.
Me mira con los ojos entrecerrados, sabe que mi graduación no me emociona para nada.
── ¿Huyendo de tu padre? ──Pregunta con diversión.
Aprieto mis labios al ser atrapado, luego le respondo con ironía.
── Nah, simplemente estoy caminando por donde él no está.
── Y a su vez, también estas evitando a Mars. ──Comienza a caminar y lo sigo sin pensarlo o sin mirarlo de nuevo, Edd mas que nadie sabe lo molesto que aún sigo con Mars por haber embarazado a Jenna── Tu sabes que no puedes seguir culpándolo por algo que paso hace tres años, ya no tiene mucha coherencia, además si tienes en cuenta que el bebé de la chica...
── Lo sé. ──Lo interrumpo── Sólo... necesito algo de tiempo.
Edd me mira de forma reprobatoria.
── ¿Y cuánto tiempo planeas dejar que pase mientras tu rencor se elimina de tu sistema? Sabes perfectamente que tú no eres la persona más comprensiva del mundo, Mars te necesitaba y aun lo hace, puedes arrepentirte si no recuperas el tiempo perdido.
── Sé que tienes razón.
── ¿Entonces?
Aprieto los labios antes de responder, Edd es una de las personas que más me ayudo con mis problemas de ira y comportamientos impulsivos. Fue quien me motivo a tomar terapia para controlar mi carácter explosivo, por lo que no sirve de nada mentirle.
── Supongo que aún no he mejorado mucho mi forma de pensar. Lo sigo viendo como el culpable cuando yo he hecho cosas peores, además de que no soy nadie para juzgarlo.
── Sólo habla con él, Derek.
Mis hombros se hunden al escucharlo, mi mente se llena de imágenes de Mars engañando a Jess con Jenna, sólo presencié una ocasión de los muchos encuentros escondidas que Mars se encargó de ocultar. Suspiro antes de abrir mi boca para responder, sin embargo, otra voz que no proviene de Edd, me interrumpe.