"Un secreto más"

Narra Tan.

Hoy e decidido invitar a Itzia a desayunar, en las afueras de la ciudad, intentare hablar con ella y decirle mis verdaderas intenciones y los planes que tengo con ella.

*En un lugar desconocido.

Las cosas no serán siempre de manera sencilla, las decisiones que uno toma son aquellas que definirán nuestro propio destino y el rumbo de nuestras vidas.

A lo lejos de la ciudad cerca del arbol de la vida, se encuentra un secreto que solo conocen la naturaleza y los amantes que ahi se esconden. El principe de la tribu tenia un amorío con una chica de la aldea, que antes de conocer a Itzia ya sostenía una relación romántica con ella, todas las tardes a cierta hora del día, ellos se veían a escondidas, pues no podían revelar nada de lo que entre ellos dos había. Es verdad que el príncipe Tan podría ser demasiado cautivador, aunque nadie conocía mucho de su vida sentimental, entre sus allegados se comentaban todos los encuentros fuera de lo políticamente correcto.

Esa tarde se encontró con una chica de cabellera larga y abundante, un tono canela en su piel y unos ojos demasiado expresivos y dulces.

Una vez los dos estaban juntos comenzaron a dialogar y a pensar lo que seria de ellos en un futuro, toda la tarde fue exquisita, llena de amor. Pero su tiempo había terminado y ahora le tocaba al príncipe Tan, enfrentarse a lo que tanto tiempo había pospuesto.

*mientras tanto al día siguente con Itzia.

A Itzia le había llegado el aviso, de que el príncipe Tan quería verla mas tarde, además de que desayunarían juntos, Itzia estaba demasiado entusiasmada por compartir mas tiempo con el príncipe Tan, ya que era su único amigo a parte de la chica que siempre estaba con ella. Con el que podía hablar y expresar sus emociones tales y como eran, esta vez Itzia se arreglo un poco mas de lo normal, ya que quería causar una buena impresión al príncipe Tan.

Al sentirse tan sola, comenzó a pasar mas tiempo con el príncipe y este con sus cuidados comenzó a ganarse el afecto y la amistad de ella, pero esto se verá opacado por lo que pasara muy pronto.

Llego el momento en que Tan e Itzia se encontraran, así cuando estuvieron juntos él la llevo a fuera de la ciudad, pero no a una parte tan apartada, desayunaron frutos deliciosos y de pronto el príncipe tan con un aclaramiento de garganta, llamo la atención de Itzia, haciendo que esta fijara su mirada solo en él.

Itzia comenzaba a pensar muchas cosas, pero estas estaban alejadas de la realidad que pronto se convertiría en el calvario para ella misma. Así que solo se quedo inmóvil y espero a que él comenzara a hablar. Como el era un buen amigo para ella y lo estimaba tanto, solo esperaba que no se le declarara o en su defecto le pidiera matrimonio, ya que ella no podría traicionar sus raíces y hacer eso.

Pero lo qué salió de la boca del príncipe la dejo completamente estupefacta...

El efectivamente, le pediría matrimonio a ella, pero básicamente solo era un arreglo mutuo, una promesa vacía, que los beneficiaria a los dos. Así que el se dispuso a explicarle a Itzia lo que tenia en mente.

Explicación del príncipe Tan.

-Bueno Itzia quería hablar contigo de los intereses que los dos compartimos, a lo largo de este poco tiempo, han pasado muchos hechos, que nos han afectado de alguna manera a ambos, así que quería proponerte un trato. Si finges aceptar mi propuesta de matrimonio ante todo el pueblo, solo estarás a mi lado por poco tiempo, después te concederé tu libertad y jamás tendrás ningún problema, vivirás una vida plena y sin ataduras, pero tienes que aceptar todo lo que te estoy diciendo.

Itzia no podía creer que fuera tan fácil todo y que de esa manera pudiera conseguir la libertad que tanto deseaba tener, aunque no se pasaba del todo esas palabras, ya que algo tan sencillo, siempre conlleva términos pequeños que pueden imposibilitarte tu libertad.