Antología de historias Taekook Kooktae

Tren de Medianoche

Vkook✨

Jungkook sabía que llegaba tarde, su viaje en el tren salía a las 12 ¿Porqué había elegido ese horario? Tenía que irse a Busan.

Con una pequeña valija marrón en sus manos se sentó en un banco esperando el tren. La terminal estaba vacía, el viejo taquillero dormía plácidamente en su incómoda silla.

Estaba nevando a pesar de que en unas semanas iniciaría la cálida primavera. Jungkook vestía un abrigo café con botones negros, pantalones holgados marrón y unos delgados guantes que no le ayudaban de mucho.

Escuchó pasos a lo lejos de la parada.

Un jóven caminaba en las orillas tan cerca de los rieles mirando a la espesa nieve de los alrededores, su rostro
estaba rojizo por el crudo invierno, titiraba del frío. Llegó hasta el banco y volteó a ver al jóven que boquiabierto por su belleza.

-¿Puedo sentarme?, preguntó bajito. Jungkook asintió con las mejillas sonrojadas. -Hola Jeon.

Ohh.

Ahora lo recordaba.

-Hola... TaeHyung.- susurró mirando a su ex novio.

-No has cambiado nada, Jeon. - Susurró TaeHyung frotando sus manos para darse calor.- .Eran un par de tortolos enamorados en primavera hace dos años, en otoño tuvieron una pelea por todas las críticas que recibían. Ambos se separaron por la homofobia de su ciudad; Seúl.. Ahora era dos jóvenes "heterosexuales" con vidas normales. Jungkook vió un anillo en el dedo anular de TaeHyung y suspiró decepcionado.

Tal vez solo su romance con él había terminado para siempre y él es feliz con una bella mujer.

¿Cómo has estado?.- preguntó TaeHyung sonriendo apenas. Escucharon a lo lejos el silbato del tren. Pronto de separarían de nuevo.

-Estoy muy bien. Hoy me iré a Busan, buscaré un trabajo de doctor en el hospital y seré normalmente feliz.

-Me alegro mucho, Jungkookie. - respondió cortante. - Yo también me iré. Regresaré a mi pueblo y seré un agricultor como mi padre. Talvez ponga un negocio de verduras o no sé.

-Grandioso.

-Así es.

Ambos quedaron en un silencio incómodo.

TaeHyung corrió hacía los rieles se arrodilló y posó su oído en los rieles que sentía vibrar por la cercanía del tren.


 


-¡TaeHyung sal de ahí!- gritó Jungkook levantándose de la silla, el tren estaba bajando la velocidad. Para detenerse pero temía por su ex novio.

-Ya. Estoy bien JungKook, no tengas miedo, solo quería saber cómo se escucha. respondió sonriente.

-Es medianoche, no debes hacer eso. Los faros no iluminan bien las vías.- dijo el pelinegro viendo cómo TaeHyung sube a la tarima.

-No importa no debes preocuparte por mí. No somos nada.-

Auch.

Eso sí le había dolido a ambos, Jungkook con pequeñas lágrimas en sus ojos asintió.

-Tienes razón, no somos nada. Pero alguna vez lo fuimos todo susurró con dolor.-

el tren se detuvo y abrió las puertas. Algunos pasajeros salían exhaustos.

Ambos subieron y buscaron sus asiento. Vaya casualidad tenían sentarse en el mismo lugar.

-Jeon y-yo...

-No digas nada, Kim, quiero tener mi viaje en paz mañana .- respondió.

Jungkook bufó. Aún no sabía cómo le hizo el castaño para olvidarlo tan rápido, después de todas las bellas cosas que habían pasado. ¿Cómo se había olvidado de él tan rápido?

Jungkook sacó un libro "Orgullo y Prejuicio" si de algo sabía de ese libro es que del odio al amor solo hay un complicado paso.

TaeHyung alzó la mirada para ver si no había alguien en el vagón. No había nadie.

-iPor qué elegiste esta hora para irte a Busan, Jeon. - preguntó curioso TaeHyung sonriendo jugando con su anillo de oro.-

JungKook lo vió de reojo y suspiro.

-Es mi problema, señor Kim Hay más lugares en este vagón. O me voy o te vas.-

-Uhg.. creo que alguien se enojó por nada.. mi querido ex. Te pusiste así desde que viste mi anillo ¿Verdad?- TaeHyung soltó una risa sonora. Tomó del mentón a su amor eterno y éste enojado empujó su cuerpo del asiento haciéndolo caer de culo.

-¡Jungkook! Deja de comportarte así.- vociferó.

-Entonces no me toques, eres casado. Déjame en paz.- vaya pelea de ex.

-Y eso qué? No puedo tocarte solo por qué eres mi ex?

-Eres el peor amor que he tenido.

-Ya lo sé, por eso te sonrojas, señor Jeon.

TaeHyung se volvió a sentar. Estaba listo para decir su verdadero motivo.

-JungKook ¿Quieres que te explique sobre mi matrimonio?

-No quiero. Estoy felizmente soltero y no quiero escuchar tu miel por ella.-

-Ven conmigo JungKookie.- TaeHyung se levantó jalando las suaves manos del pelinegro. JungKook se dejó guiar por él.

Su ex era de las personas bromistas con su pareja y JungKook no quería soportar su actitud que hasta hace unos minutos amaba con su corazón.

¿Le había devastado la ruptura? Sí. ¿Quería volver con él? Sí. Definitivamente eso quería. Pero ahora él era un hombre casado tal vez con una mujer tan perfecta como él.

TaeHyung lo llevó al final del vagón, se encontraron con un par de personas dormidas y trataron de no hacer mucho ruido con sus zapatos de cuero cafés.

Al salir escucharon el ruido de los rieles, el resonante sonido del viento y un crudo frío de invierno recorrió sus anatomías.

-Vaya Jeon JungKook.. sabía que te dejarías llevar sin chistar- murmuró él sonriendo triunfante.- Vine por tí.

-¿¡Qué!?- JungKook tembló al escuchar la grave voz de su ex.- Señor Kim TaeHyung. No estoy de humor para tus estúpidas bromas y...- el castaño levantó su mano y acarició su mejilla que de inmediato se tiñó de carmín.-

-Ven conmigo a Daegu.

-Vive feliz con tu esposa. Yo ya encontré a alguien más..- JungKook mintió haciendo pucheros.

-Que mal mientes, sabes que nunca has sido bueno con las mentiras. Tu naríz se mueve como un conejo cuando mientes.

Jungkook se vió la naríz y evidentemente se movía como un conejo. Se tapó la nariz con una mano y el sonrojo se tornó rojizo otra vez.



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Editado: 16.09.2022

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