Capítulo 2

Nuestros ojos no se habían separado.
El profesor le dijo al tal Dean que tomara asiento, él asintió y camino en silencio bajo todas las miradas, incluso la mía.

Luego de eso los murmullos sobre el chico nuevo disminuyeron y la clase siguió su curso. Debía admitir que el chico era guapo, pero no es como si me fuera a enamorar de el.

Más tarde, las chicas y yo nos encontrábamos comiendo cuando Dean se acerco a nuestra mesa.

- Hola, ¿puedo hablar contigo?- dijo mirándome

- ¿eh?, Claro- dije esperando a que hablara ahí mismo

- En privado- susurro

Yo lo mire con algo de duda, pero me levante y lo seguí fuera del comedor.
El se apoyo el la pared y yo me gane frente a él.

- Ten, esto se te cayó en la mañana- dijo tendiéndome una libreta, la que yo ocupaba para escribir pensamientos y sentimientos

Pensaba que la había dejado en casa por eso en la mañana escribí esa pequeña poesía en mi cuaderno. ¿Por que la tenia él?

- Pero que...?- dije tomando la libreta

- Chocaste conmigo en esta mañana- dijo interrumpiéndome- y no te disculpaste

"Vaya chico este" pensé. La culpa pudo haberla tenido él y me esta culpando a mi.

- Bueno, lo siento. No te vi- dije seria- y gracias por devolverme la libreta

- Claro que no me viste, si no, no me hubieras chocado. En cuanto a tu libreta, de nada. Debo admitir que tiene un contenido interesante- dijo con algo de burla

Okey. Eso fue todo. Puedo aguantar muchas cosas pero que invadan mi privacidad no.

- ¡¿La leíste?!, ¡¿por que?!- le grite enojada

- Porque me llamo la atención - dijo sonriendo

- Mira niño bonito, uno no va mirando las cosas que no son de uno. Te agradezco que me hallas devuelto pero esta libreta es privada- le dije muy molesta, levantando la libreta a nivel de sus ojos y señalándola

El no dijo nada solo sonreía, pero cuando sus ojos bajaron a mi mano con la libreta su ceño se frunció.

Claro. Al haber levantado el brazo mi chaqueta se corrió un poco y dejo a la vista una marca de quemadura de cigarro que tenia en mi muñeca. Esa marca me la había hecho mi papá cuando tenia 10 años, la hizo porque no le había traído la mejor nota en un examen, y al momento en que le mostré la hoja el puso esa cosa en mi muñeca marcándome.

- ¿Que te paso aquí?- dijo tomando mi muñeca

Esto me gusta. El no debería haber visto eso. Debo salir de aquí.

- Nada- dije soltándome de su agarre

- No soy idiota, eso no es "nada"- dijo enderezándose

- Pues entonces no es nada que te importe- dije dándome la vuelta y entrando nuevamente al comedor.

Cuando llegue a la mesa donde antes estaba comiendo estaba algo alterada. No es para menos, ese chico invadió mi privacidad, recordé cosas que desearía borrar totalmente de mi mente y alguien había visto una de las tantas marcas de mi cuerpo.

Tome mis cosas y les dije a las chicas que estaría en el patio. Deseaba estar sola.
Busque un lugar donde no hubiera mucha gente y me senté bajo un árbol que tenia una gran sombra.
Aun tenia mi libreta en la mano por lo que la puse entre mis piernas y acaricie la tapa.
Quería escribir tal cual me sentía.

" Debo ser fuerte
Debo luchar,
Que no me alcance la muerte
Aun no me quiero marchar

Debo ser fuerte
Pero es complicado
Descubrirán mis secretos
Y mi cuerpo marcado"

No note que una lagrima se deslizo por mi mejilla hasta que cayo en la libreta. Me limpie rápidamente y me levante de mi lugar.
Faltaba poco para que sonara la campana así que me encamine a mi sala para la siguiente clase. Al llegar vi a las chicas y yo solo pude sonreírles.

Cuando la clase empezó, sentí que era observada y no era necesario buscar al responsable. Yo sabia que esos ojos cafés no se habían despegado desde que su dueño había entrado a la sala.

Sigo pensando que ese chico revolverá toda mi vida, pero lo que no se es si lo hará para bien o para mal. Debo alejarlo de mi.