Capítulo 2

La reunión de los miércoles terminó como de costumbre con los empleados corriendo con las nuevas asignaciones, pero sentían que ahora con Thanos a cargo la presión era más grande.

Steve se dirige a la oficina presidencial, Thanos entra primero y luego él. Ambos hombres se sientan en el elegante juego de muebles.

—¿Qué ha pasado? —Thanos suspira.

—Lo de siempre, sus escenas de celos donde me encuentre —cruza una pierna.

—Lo siento Thanos, pensé que se le pasaría —Steve suspira, quería mucho a Thanos, siempre quiso un hijo varón, pero su esposa le había dado una hija, a él lo veía como el hijo que no había tenido —Veré que hago con Philippa, mi hija está fuera de control, salir de casa sin guardaespaldas, solo por seguirte.

—Envíala fuera de ciudad El Sol por unos días —pasa su mano por su nuca, vestia un elegante traje hecho a su medida, oscuro, se pone de pie, media un metro noventa, era de complexión músculosa, su cabello era castaño claro, lo peinaba elegantemente, sus ojos eran claros, como decía Philippa era un dios que se había caído del Olimpo, jamás había conocido a un hombre tan guapo como él —Llega el equipo de las empresas Maltés que hemos estado esperando, la mayoría son mujeres —levanta el documento que estaba en su escritorio y se lo entrega a su tío, él lee la lista de las personas que estarán en Ciudad El Sol —Significa salidas a cenar con el  equipo y no estoy de humor para las escenas de Philippa.

Steve deja el documento sobre el mueble donde está sentado.

—Estoy de acuerdo, es una cuenta muy importante y no la perderemos por Philippa, le pediré a mi asistente que busque algo en que pueda entretenerla mientras el equipo está en la ciudad. Tus cosas ya llegaron a casa está mañana

—A cómo está la situación tío, creo solo esta noche me quedaré en tu casa, es mejor que me quedé en un hotel mientras me entregan mi casa.

—Estoy de acuerdo —Steve se despide.

Ahora que Thanos estaba al frente de la empresa familiar, había dejado la ciudad Dorada para mudarse a Ciudad El Sol, originalmente se quedaría en su casa, mientras le entregaban su casa, pero los celos de Philippa habían crecido considerablemente.

Saco su móvil y llamo a su asistente, urgentemente debía encontrar algo en que Philippa se distrajera mientras estaba la visita.

                                     ******

—Padre, necesito hablar contigo —Philippa era una joven alta, medio un metro setenta, delgada, era bellísima como su madre, su cabello rubio lo usaba largo hasta la espalda, andaba descalza.

—Philippa estoy ocupado —su padre frunce el ceño al leer los resultados de una de las filiales, saca rápidamente su móvil y llama a su asistente, él llega rápidamente de la cocina con la botella de agua de su agua.

—Señor Cobham.

—Transfiere doscientos mil dólares a la cuenta de Philippa —mira a su hija —Compra lo que quieras hija, debo seguir revisando estos documentos.

—¿No se supone es trabajo de Thanos? —pregunta mientras se pone de pie.

—Lo es, él ha detectado el faltante, es un hombre muy inteligente, estaba bien maquillado el archivo, pero él lo detectó, siéntate Mario, te mostraré donde está el faltante.

Philippa observa a su padre por un momento, había ido con él para hablar de Thanos, quería su ayuda, que él hablará con él y le pidiera que se casarán, no quería perderlo, había contratado a un detective, en menos de una semana había dormido con tres mujeres diferentes, moría de celos porque ellas tenían lo que ella no, sus besos, sus caricias, su cuerpo.

Estaba desesperada, al subir los escalones para sus habitaciones miró al séquito de empleados que venían del ala este de la casa, enarca una ceja y es cuando recuerda que él se quedará en su casa, mientras le entregan su casa. Ciudad Doral está a media hora de Ciudad El Sol, pero Thanos había decidido mudarse, no quería viajar todas las noches hasta su casa, eso le pareció fantástico a Philippa, estaría más cerca de él.

—El Señor Cobham ¿Estará en la habitación azul? —el mayordomo asiente.

—Así es señorita Cobham —ella esconde su sonrisa, su casa constaba de tres plantas, a Thanos siempre le gustó dormir en la segunda planta y a ella por supuesto la tercer planta, pero esta noche cambiaría sus hábitos, subió los escalones de dos en dos, entró a su habitación y se desnudo para darse una larga ducha, tomó la máquina de afeitar y sonrió, esta noche dormiría con Thanos y obviamente su padre al enterarse que dormían juntos, los casaría.

Su móvil suena, lo levanta y lee la notificación de que doscientos mil dólares habían sido depositados a su cuenta.

                           *****

Thanos estaba cansado, entró a la habitación, encendió la luz y se dirigió al cuarto de baño a darse un baño, le gustaba dormir desnudo, se quita la toalla que tenía enrollada en su cintura y se mete a la cama dentro de las mantas, estaba tan cansado que se quedó dormido rápidamente, Philippa sale de las cobijas y las bajas, sus ojos se llenan de lujuria al ver el cuerpo de Thanos, era virgen, no por que deseaba llegar así al matrimonio, simplemente por que no había tenido la oportunidad de estar con Thanos, sus manos acariciaron su musculoso pecho, bajo hasta su cintura y sin pudor sus dedos acariciaron la piel terciopelada de la intimidad de él, ella sonrió al ver como responde a sus caricias, acerca sus labios a los de Thanos, por años había soñado con besarlo, él gimió, para él estaba teniendo un sueño erotico con una extraña, en sus sueños sintió como ella se subía a su cuerpo para besarlo, corresponde al beso con la misma intensidad, sus manos recorren las nalgas firmes de ella, siente su cuerpo listo, pero al escucharla decir su nombre, él sale de su ensoñación, se despierta y al ver a Philippa encima de él la mueve hacia su costado, estaba furioso.

—¿Qué haces en mi cama? —cubre su cuerpo desnudo, pero ella se pone de pie dejandole ver su cuerpo perfecto.