capitulo 1: la quiero a ella

"No quiera a nadie atado a mi vida... Pero apareciste tu  en ella  y no te pienso soltar"
 

Narrador omnisciente
(Yop mera)
 

Otro día mas en el orfanato "apartados por la Luna", un lugar bastante conocido por todos los seres sobrenaturales que co-existian con el mundo humano, esta lleno de niños de dos a doce años, niños huérfanos humanos o sobrenaturales y su única forma de salir de ese lugar es siendo "apartado" o pasando la edad de doce años que era cuando ya no podían estar ahí, aunque eso por suerte o por desgracia jamás pasaba en el lugar 
 

¿Qué como son apartados?, se preguntarán.  Bueno, algún ser  sobrenatural tiene que llegar a ese orfanato y comprarlo, para que los encargados del lugar marquen al niño o niña escogido, los sobrenaturales solo pueden comprar a uno, ya sea porque es su pareja de vida o por que simplemente quieren una persona que tendrán a su lado de forma segura y permanente sin importar lo que pase luego. Si ese llegaba a  ser  el caso estos seres sobrenaturales podían  liberar a se apartado soltando el sello que los mantenía atado al otro para que pueda tener una vida normal

Esta historia se trata de ella, una pequeña niña de tres años que quedo huérfana en un accidente automovilístico. La señora Monserrat la salvo de morir en el auto en llamas y la llevo a ese lugar, no se vive mal y tampoco se les trata mal a ninguno de los niños o niñas, solo se les era castigados cuando lo veían necesario, Pero eso sí. De formas crueles que a veces llegaba a costar la vida de los niños y por ese mismo motivo ninguno desobedecía a las ordenes de los encargados del lugar que los cuidaban 

La pequeña llamada Fumiko, que significa "gran belleza" llevava apenas ahí dos semanas esperando a que alguien llegue al lugar y la compre. Siendo consciente ya de todo lo que pasará  si llega a ser la elegida de  alguno

Cuando los niños son apartados los mismos trabajadores del lugar se los llevan a sus hogares luego de marcarlos como pertenecientes a algún ser sobrenatural, es algo asi como un código extraño y único que jamás puede ser repetido en su muñeca izquierda si este es apartado por su ser destinado,  alma gemela o pre-destinado y en su derecha si es por otra persona lejos de ser esa persona destinado a ser  pareja de vida

Asi los mismo seres sobrenaturales saben y es tan conscientes que no pueden tocarlos  ni hacerles nada a esos pequeños escogidos y si lo hacen se las verán con los dueños de ellos, los "apartados" a como los llaman en ese lugar y todos los que conocen esa marca no son llevados con su dueño en ese instante si no son algún tipo de pareja de vida eterna. O Cuando cumplen 16, 17 o 18 años dependiendo de quien sea su dueño y de que manera fue apartado este,  también asi como es tomado en cuenta su raza y que tipo de dueño sea _destinado o conveniencia_

La pequeña niña protagonista de nuestra historia  juega con su amigo, que ya ha sido apartado por un vampiro  los días anteriores como persona destinado, por ultima ves mientras se va con la Señora Eboli a donde vivirá el de ahora en adelante

Ya tocaba la despedida y ella estaba triste por que se quedaría sola ahí puesto que los demás de los niños del lugar la evitaban por alguna extraña razón, pero a la ves  feliz, por que el iría a conocer otro lugar que no fueran las paredes blancas  de ese lugar

Dos horas luego que el ya se había retirado del lugar con su nueva "familia", ella estaba en el jardín cantando una canción de cuna que le cantaba su mamá al dormir junto con su hermano  para evitar pensar en la tristeza que sentía

Mientras que en las puertas de el mismo lugar estaba entrando un alpha con su hijo de doce años a ese orfanato para buscar una amiga de juego para su hijo... Eso significaba que iría desde ya a vivir con ellos, si las cosas hubieran salido como lo querían, claro está.

Pero algo sucedió, apenas el joven niño de doce años  que entraba con un fatal humor porque había sido llevado al lugar obligado por su padre  cruzó las puertas de ese lugar el aroma a libros nuevos y campo de flores le llego a sus fosas nasales callando toda tormenta que lo tenía de mal humor

Mientras que el padre estaba hablando con la encargada del lugar respecto a los aspectos que quería para la apartada de su hijo, el chico se escabullo de su padre hacia ese aroma buscando la causa de su calma , miro a una bella niña, a nuestra bella niña sentada en ese jardín con la mirada triste y algo perdida entra las flores. Mientras miraba las flores y cantaba aquella canción de cuna que tanta nostalgia y felicidad le traía por los recuerdos que almacenaba  en sis letras

La señora Luna le pidió al naranjo un vestido verde y un velillo blanco- cantaba ella con los ojos húmedos y la vos algo rota , el se acerco a la niña deleitándose con la dulce vos de ella y admirando la gran belleza que poseía  esta- La señora Luna se quiere casar con un pajecito de la casa real...- seguía la pequeña sin percatarse de la presencia del joven cerca de   ella

Cantas hermoso- le dijo el a ella sacándole de   su pequeña ensoñación, la  niña lo vio y le sonrió de manera dulce mientras intentaba limpiar sus ojos de las lágrimas acumuladas en estos, el aroma que le llegaba al joven niño le encantaba y estaba  totalmente seguro que el aroma provenía de ella

Gracias - dijo ella sonriendole con ternura a el, esa sonrisa a el le dio un vuelco en su corazón y una  calidez inexplicable a la ves, se agacho a la altura de la niña y la observo con detenimiento como si el rostro de la pequeña fuera la obra de arte mejor tallada   por cualquier ente perteneciente al campo de los Olimpos

Me llamo Oshin-   se presentó el a ella con cierta emoción, dulsura y felicidad-, ¿y tu pequeña?- le dijo el de manera dulce

Fumiko- le respondió ella mirandolo - ¿vienes a traer a alguien?- le dijo la niña dulcemente a el-  eres muy grande para que vengas a quedarte en este lugar - siguió con curiosidad ladrando la cabeza