15: No eres lo que pensé.

Jessica                     

– Déjame ver si entendí-ambos asienten-¿Tom y Max son tus hermanos y Gisela, tu madre, es la hermana de tu tía Jazmín?-asiente. Juro que mi cabeza da vueltas en este momento-¿Quieres decir que tu tía te robó y te alejó de tus hermanos, que ni siquiera saben que existes?

– No me robó, solo que sabía que teniéndome a mí, iba a traer problemas a la empresa de mi padre. Nunca lo he visto en persona-suspira-con Max Tom, pensaron que ya era un problema siendo gemelos y conmigo, solo me quedé con mi tía. Ahora está enferma y no sé si podrá recuperarse está vez, como las demás-su voz es triste-he estado con ella toda mi vida, ya que mi madre no quiso que me acerque si quiera a las calles de la ciudad porque teme a que me confundan con Tom-tomo a Jeison del antebrazo y lo saco de ahí.

– ¿Él sabe que Max está muerto?-mi pregunta lo hace mirar para todos lados, menos a mis ojos-Jeison-niega y suelto un suspiro. Puede salir, Max ya no está y pensaran que es él-tienes que decirle y podrá salir de aquí.

– No puedo decirle que su hermano murió y que ahora está Oliver-¿Oliver? ¿Quién es Oliver? Frunzo el ceño-Oliver es el hermano menor de Tom.

– Sé que él está muerto-su voz hace que brinque del susto-pero lo que no sabía era que tenía un hermano menor-sonríe-Jeison ¿Crees que pueda salir de aquí?

– Te has escondido por más de veinte años ¿Y quieres aparecer ahora?-asiente sin dudar-será difícil para ti aparecer de la nada. Pero te apoyaré.

– Yo no quiero ser parte de esto-giro sobre mis pies para salir, pero ambos me toman de los brazos y ambos tienen demasiada fuerza-¿Por qué me meten en estas cosas?-ninguno dice nada-¿Sabas que tu gemelo es mi ex novio? No quiero involucrarme-abre sus ojos como platos y sonríe.

– ¿Por eso me miraste así?-su pregunta hace que desvíe mi mirada hacia cualquier lugar de la habitación menos sus ojos. Esos ojos verdes-Ahora entiendo los gustos de mi hermano-arqueo mis cejas-eres bonita, pero no mi tipo-confiesa. Gracias al cielo-quiero ir a ver a mi madre y a mi padre, pero no quiera dejar sola a Jazmín-desvía su mirada hacia la cama en donde se encuentra recostada.

– Llévala contigo-suelto captando la atención de ambos-¿Qué? Dudo que tu madre no esté contenta de verla-ambos niegan.

– Ella se odian. Cuando Brad tenía 11 años, Jaz  fue con Gisela y ella casi los saca a escobados de su casa. Ambas se odian y es por eso que se tienen que mantener alejadas una de la otra.

– Como sea, no quiero involucrarme en la vida del mundo de las maravillas. Creo que necesito que me lleves a algún hotel, no creo poder ir a tu casa, luego de lo que pasó.

– ¿Está viviendo en tu casa? ¿Trabaja ahí?-las preguntas fluyen de la boca de Brad.

– Es…la novia de Jackson-abro sus ojos sorprendido-lo sé, no debí traerla, pero fue conmigo al cementerio a ver a Lisa. Y me quedaba muy lejos volverla a llevar y al recibir tu llamada no tenía tiempo.

– Esta bien-estar aquí, me incomoda y me aburre. Quiero ir a dormir porque me dormiré aquí en este preciso momento-iré a la ciudad mañana por la mañana-escuchar eso hace que me sorprenda.

– Por cierto ¿No eres adinerado como ellos? Porque, lamento decirlo pero, esta casa no parece de un millonario-observo cada rincón y está hermosa, pero es demasiado pequeña, a diferencia de la de Jeison y Jackson.

– En el sentido de que ellos sean mis padres, no me convierte en un heredero más. Ya han anunciado que Tom es el único heredero de Revolution Company y como nadie me conoce, no soy parte de su familia y esta casa es de mi tía, no es mía, pero tampoco tengo a donde ir.                                 

– ¿Y por qué no vas a la casa de Jeison?-rasca su nuca nervioso.

– Nadie sabe de mi existencia, excepto, tú, Jeison, Jazmín y mi madre. Mi padre, Tom, mi nuevo hermano menor, nadie sabe que existo. Quiero ver, al menos una vez a mi familia.

– Espera-saco mi teléfono y no tengo ni una sola barra de señal, demonios. Lo levanto de modo que llegue algo, pero nada.

– No hay señal aquí, solo funciona el teléfono de la casa, que es con el que llamé a Jeison-señala el teléfono de pared-volviendo al tema, necesito decirle a Gisela que su hermana está enferma y que no sabemos qué pasará, no puedo dejarla así. 

– Haremos esto-mira su costoso reloj que adorna su muñeca-iré por mí auto y te llevaré a ti y a Jazmín a mi casa, trataré de que no los vean, con tu ayuda-se dirige a mí. He dicho que no me quiero involucrar, pero quien me va a escuchar-y buscaré la medicina necesaria para que ella esté bien-no sabía que Jeison tenga corazón, pensé que era una persona fría y egoísta, pero me equivoqué-son las…-vuelve a mirar su reloj-02:34 am-¿Ya? Es por eso que tengo sueño-iré por mi auto, hay que hacer el menor ruido posible. Gabriel hace juntas en casa a mitad de la madrugada, de vez en cuando. Está loco-asiente observando a Jazmín-Jess tienes que acompañarme, necesito tu ayuda allá-no es que no quiera ayudar, solo que no quiero más problemas de los que ya tengo. Ya me estoy involucrando demasiado en la vida de todos y en la que menos pienso es en la mía-Recuerda que, no importa que pase, siempre mantendrás en secreto esto. Pase lo que pase ¿Bien?- No sé lo que significa ese “Pase lo que pase” pero asiento dudando.  

Sin más que decir salimos de ahí, nos subimos a la motocicleta y a toda velocidad comenzamos nuestro camino. Luego de unos minutos, más eternos, llegamos a la casa. Jeison dejó su moto en el garaje y veo dos autos negros que no estaban cuando nos fuimos. Oh no. Tenía razón de que hacia juntas a  mitad de la madrugada.

– Jeison espera-le susurro tomando su antebrazo, él no había visto los dos autos y se los señalo-debieron haber llegado hace unas horas-asiente y es él quien me toma del antebrazo llevándome por la puerta que entra Eva.

Se podría decir que esta casa se divide en partes que, por una puerta entras los dueños de la casa y por otra, entran los trabajadores, que es por donde pasamos sin que nos vean. Pasando la cocina, el sonido de un vaso de vidrio siendo dejado en la mesa hace que nos volteemos bruscamente.