EL INICIO DE TODO
Toda historia tiene un comienzo y un final, pero no todas se desarrollan de la misma manera. Algunas están marcadas por la gloria y otras, como la nuestra, por la desesperación. Lo que estás a punto de leer no es simplemente una crónica de eventos, sino un testimonio del colapso de la civilización, un relato sobre cómo el mundo que conocemos fue devorado por el caos y la oscuridad.
Nuestro escenario es la ciudad de San Francisco, Estados Unidos, un lugar que alguna vez fue sinónimo de progreso, tecnología y diversidad. Era el año 2042, el mes de enero, más de veinte años después del estallido de la Tercera Guerra Mundial, una guerra devastadora que dejó cicatrices profundas en el planeta, pero que, afortunadamente, mantuvo sus conflictos más sangrientos fuera de suelo estadounidense. Cuatro años habían pasado desde el armisticio que puso fin a los combates, y el mundo apenas comenzaba a sanar. O al menos, eso creíamos.
Las secuelas de la guerra fueron más que materiales. Aunque Estados Unidos no sufrió el mismo nivel de destrucción que otras naciones, su gente estaba herida, desconfiada, y las tensiones internas empezaban a hervir bajo la superficie. Había algo en el aire, un sentimiento inquietante de que la verdadera batalla aún no había comenzado.
Los barrios más alejados del centro de la ciudad, aquellos que durante años fueron olvidados por las autoridades y la elite, comenzaron a cambiar de forma sutil, pero inquietante. Las noticias hablaban de desapariciones, de comportamientos extraños entre los habitantes, de animales muertos en las calles sin explicación aparente. Al principio, fueron solo rumores, historias susurradas por los vecinos en las esquinas, en los bares oscuros, en las redes sociales que tanto adoraban. Pero pronto, las anomalías se volvieron imposibles de ignorar.
Algo se estaba gestando en las sombras de San Francisco, algo que desafiaba la razón y que amenazaba con cambiar el rumbo de la humanidad para siempre. Lo que comenzó como un simple susurro se transformaría en un grito ensordecedor, en un llamado a la supervivencia que nadie había anticipado. Nadie estaba preparado para lo que vendría.
Este es el comienzo de nuestra historia. El inicio de un fin que muchos nunca vieron venir, pero que cambiaría para siempre la historia del mundo. Lo que una vez fue civilización, orden y progreso, se desmoronaría bajo el peso de una amenaza que nadie, ni siquiera los más poderosos, podrían detener. Y así, en las entrañas de San Francisco, algo oscuro y monstruoso despertó, una fuerza que pronto arrasaría con todo lo que conocíamos y amábamos.