No sabes cuento me encantaría poder volver a besar tus labios, o volver a escuchar esos chistes tan amargos y sarcásticos pero aún así daban risa...
03:30am.
Capítulo XIII:
제 13 장:
Al despertar encontrarme con aquellos mensajes en mi móvil, provoca algo en mi corazón... Nerviosismo, añoranza... No lo sé, y tampoco sé si es buena idea escribirle... Pero mis dedos ya se encuentras escribiendo.
¿Así que me conoces?
10:25am.
Ordené mi habitación, me duche, me lave los dientes y mientras secaba mi pelo restregando una toalla en este veía el móvil que se encontraba en mi cama... Esperando algún sonido o que simplemente se prendiera la pantalla anunciando un mensaje del desconocido o mejor dicho del que no duerme. Oigo que tocan la puerta y me acerco a esta para abrirla, observando sorprendido por la visita.—Tan temprano que vienes a visitarme Jiminie.
—Si, eh... Quería pedirte disculpas por mis preguntas... Y lo ocurrido o lo que iba a ocurrir... Sólo quiero que sepas que no podría ser por...—Y en el momento que dijo no podría ser deje de prestarle atención a lo que estaba diciendo y sólo me acerque a él. Viéndolo otra vez nervioso haciendo que se sentará en la cama y yo parado frente a él, sólo observándolo sin entender el por qué se puso de esa forma y también sin poder comprender su "no puede ser" si ni siquiera a comenzado nada y ni sé si comenzaría.—Y-yoongi hyung...—Veo como su mirada estaba fija en mis ojos pero ahora tuvo otros intereses, bajo su mirada a mi pecho y siguió bajando pero al instante miró hacia otro lado.
—Oh, ¿ya te diste cuenta que sólo llevo toalla en mi cintura? Yo también acabo de darme cuenta de ello... Es que acabe de salir de la ducha.
—P-puede alejarse, por favor.—Pongo mi mano en su pecho haciendo que su cuerpo esté recostado en mi cama y su cara de entre asustado y nervioso se hacía presente, mi pierna izquierda terminó al medio de las suyas y me acerque más a él.—Y-yoongi...—Y mi mente hizo presente un pequeño recuerdo... De mi estando más o menos igual con alguien más, pero sus labios gruesos sonreían no como los que veo ahora.
—¿Cómo vienes a verme y decirme que no puede ser, si no a empezado y ni siquiera sabes o sé si podría comenzar? Pero quiero ver algo...—Comencé acercarme a su cuello, para sólo dejar un suave beso en el pero sin aún tocarlo este dio un leve gemido y eso fue todo para poder separarme de él.—Bien. Esperame un poco, iré a ponerme ropa.—Elegí la ropa que utilizaría de mi armario y fui al baño a cambiar, al estar listo, salí y lo vi sentado en la orilla de la cama.—Tranquilo, no te haría nada sin tu permiso.
—H-hyung... ¿Por qué se acercó así?
—... Pues... Quería ver...—Veo como lágrimas comienzan a caer, su cabeza agachada. Mierda, ¿hice algo malo?—Mierda Jimin, ¿hice algo malo? ¿Tienes alguna experiencia mala o trauma? Mierda, perdón... Sólo... No sé qué fue lo que ocurrió, ¿Jiminie?—El momento que me abrazo sin darme tiempo a entender bien lo que sucede... ¿No la cague?—¿Qué...
—Sé que no debería... Y me duele tener que restringirme para que este todo bien...
—¿Tienes novio o algo por el...
—Hyung... No puedo permitirme tener algo, es sólo eso.—Intente separarlo de mi para verlo a los ojos pero este apretó más su abrazo... ¿Le ocurrió algo antes?—No quiero que me vea llorar.
—Jimin, ¿tu familia no quiere verte con un hombre o tu no quieres verte así?—Al escuchar su risa quebrada, no sé por qué pero sentí como me enterraban algo filoso en mi pecho.
Para nada hyung...
—¿Entonces?
—Sólo quédese conmigo ahora un momento en silencio, ¿me lo permitiría hyung?—No dije nada, sólo guarde silencio como él pidió, y comencé a acaricias sus cabellos azules con mi mano mientras lo abrazaba como un niño pequeño que acababa de caerse y por eso lloraba... Sólo que ahora mismo no quiero que se levante solo y quiero que llore todo lo que tenga que llorar en mis brazos.