이러한 메시지

Si te lo dijera... ¿Me creerías? Porque si fuera tu... Tus palabras me dolerían demasiado, por el engaño que tenía ante mis ojos y no supe verlo a tiempo.
 

Capítulo XVII:

 

  제 17 장:

Recordatorio/info:
(«») Esos signos aparecerán cuando Yoongi tenga un recuerdo, pueden haber muchos entre uno y el otro. 
 

Camino a duras penas por las copas de alcohol que esta en mi sangre, realmente bebí mucho, veo a los chicos de lejos y me acerco a ellos despacio... Creó.—¡Escuchen! Siento la mitad de mis piernas dormidas pero aún así camino para pasarla bien con mis amigos... Aunque... ¡Si hay que pasarla bien¡—Escucho sus gritos y risas, consigo sentarme en un sofa cercano y echo mi cabeza hacia atrás, cierro los ojos y me da todo vueltas, ¡no! Mis ojitos tienen que estar abiertos... Oh, Jimin.—¡JIMINIE¡, ¡VEN, APRESURATE!—Observó cómo camina hacia mí sonriente y apuntó el lugar que está desocupado al lado mío para que se siente y gratamente lo hace.—Jiminie... Te quiero muchísimo, ¿lo sabes? Porque yo acabo de darme cuenta... ¿O no? Lo importante es que te quiero demasiado, ¿puedes creerlo?—Siento su mano acariciar mi mejilla y guardo silencio inmediatamente para poder verlo, su mirada fija en mi rostro, buscando algo y yo sólo puedo ver esos ojos que tanto me atraen, sus pequeñitos ojos tan adorables.

—Yo también te quiero Suga.—Eh... No fue respetuoso, que mal educado... ¿Dijo que me quería?

—¿Disculpa qué fue lo que dijiste?—Escucho su risa y vuelve a sonreír.

—Que te quiero Suga.—Me quiere... Me quiere el mocoso mal educado... Y yo lo quiero a él.

—Jiminie... ¿Me prestarías tu celular para poder encontrar el mío? Debió de haberse caído.—Asiente y me entrega el suyo.

—Oh, pero hay mucha música, ¿cómo lo vas a encontrar?

—Tranquilo... Un músico sabe la diferencia musical, y sus tonos... Y esas cosas de la música.—Como puedo voy a los contactos, ah, cierto... Aún no le he dado mi número... Comienzo a marcar los dígitos de mi número y comienza a mostrarse completo... ¿Cómo es que ya sale en contacto?

—Ah espera, ese no es mi móvil... El que uso siempre es este.—Miro el que esta en sus manos, y vuelvo mi mirada al celular que tengo en mis manos... ¿Por qué tiene dos celulares?—¿Puede devolvermelo?—Quiero hacerlo... Pero mis manos no me permiten entregárselo, al ver esto miles de preguntas pasan por mi mente, no hay ningún registro de llamadas a este número, rápidamente me dirigió a los mensajes y si los tiene... Justo a las 03:30am... Leo cada palabra, recordando los que están en mi celular.

Querido August D.
Sé que debería de decírtelo en persona, y no escribirlo... Te pediré mil veces perdón si es necesario, pero sólo permíteme explicarlo. No quiero hacerte daño otra vez, por favor, cuando leas esto, espero tener en frente y poder abrazarte aunque me apartes pero sentirte entre mis brazos, sabiendo que sabes quién soy.
 

Mensaje sin enviar. ×
 

Bloqueo el teléfono y se lo entrego, de repente siento que todo el alcohol que tenía se desvaneció y ahora puedo mirar claramente.
 

—Hyung, déjeme explicarle, ¿sí? Por favor... 
 

—Tú eras él... Y me conocías desde antes...
 

—Es algo difícil de entender en este momento pero si me permite ir a otro lugar y explicárselo mejor... Suga...—Siento su mano agarrar la mía, y sin darme cuenta yo estaba tirando de ella para soltarme.—Por favor...—Veo la angustia en sus ojos, volteo a ver a Hoseok, que al conectar nuestras miradas paso de sonriente a un rostro de preocupación, acercándose como puede entre tanta gente hacia nosotros.
 

—Hoseok... ¿lo sabía?
 

—Él no hizo nada, yo tengo la culpa...
 

—¿Él lo sabe?—Vuelvo mi mirada a Jimin, que asiente lentamente he incluso al enterarme de los mensajes en el celular de Jimin, causó desconcierto en mi pero no una punzada en mi pecho que hacía que no pudiese respirar al enterarme que todo esté tiempo mi mejor amigo, sabía todo lo que estaba ocurriendo y yo siendo un estúpido... Observando todo.—Sueltame...—Comienzo a respirar hondo y botando el aire despacio, tratando de calmarme, pero siento mi cuerpo temblar y sobre todo mi mano, al sentirla más fría y temblando sin poder controlarlo. 
 

—H-hyung su mano... Mierda, Suga tienes que calmarte... Por favor.—Vuelvo a tirar pero su agarre se vuelve más fuerte. Realmente no quiero gritarle.
 

—Sueltame Jimin, no puedo respirar... Déjame irme.—Veo sus ojos que se llenan de lágrimas y su agarre se vuelve más devil logrando poder salir de su agarre, rápidamente salgo del recinto y tomó bocanadas de aire, cierro mis ojos, aún sintiendo los temblores en mi cuerpo, me siento en el frío suelo y sostengo mis piernas entre mis brazos, abrazándome, tratando con todas mis fuerzas calmarme de algo que ni siquiera sé qué es.
 

«—Podría verte todos los días aquí, destrozandote a ti mismo, observa el espejo delante de ti... Suga, estás matandote de a poco, ¿eso le gustaría a mamá?
 

—¿Cómo te atreves hablar de ella, como si la conocieras perfectamente? Fuiste un miserable con ella, lo único que hiciste era empeorar su estado anímico hasta que murió... Tu y mi padre le hicieron la vida imposible. ¡¿Por qué mierda sigues aquí?!, ¡Vete! Me causas repugnancia.—Vuelvo a acercarme más a la esquina de esas cuatro paredes y miro hacia el espejo, escuchando sus pasos acercarse y volver a verlo al frente de mi.