Aprendices de Politicos

Capítulo 9: Involucrando a terceros

 

Después de esa salida dramática de Yoselin, la vida se me fue. Perdí a mi amada novia y futura madre de mis hijos. Ella vale mucho para mí, pero por el momento es mejor dejarla sola para que digiera todo este suceso. 

 

—Vaya, esa es la forma más cruel de romper una relación — dice Lazaro mientras se compadece de mí.

—Estará bien — respondo.

 

Seguimos con nuestro proceso y rendición de cuentas. Zarceño está a punto de cortarme la cabeza, así que lo mejor es optar por un fraude mucho mayor. Necesito hacer inversión y movimiento del dinero y lo mejor de esto sería invertir una gran parte en Etherum, el movimiento del mercado bursátil nos dará un poco de seguridad, además de ser una de las cryptomonedas populares. 

 

También crearé empresas fantasmas para simular compras y también falsificaciones tributarias. Estoy seguro que Zarceño tiene los contactos necesarios para mantener el dinero a salvo de los impuestos, además de que puede sobornar voluntades.

 

Dejo mi oficina cuando recibo una llamada teléfonica poco usual.

 

—Hola, hablo con Jacobo.

—Sí, ¿quién lo busca?

—Soy, Gladys Cordoba, te llamo debido a una aplicación a nuestra plaza de asistente administrativo. 

—Sí, señorita, yo tengo un trabajo — digo.

—Me gustaría hacerle una entrevista debido a que mi jefe está familiarizado con su trabajo — dice Gladys.

—Vaya, es halagador. Sabe, puedo hablar con su jefe.

—Sí, puede venir hoy — dice Glady.

—Llegaré en treinta minutos o el tiempo que tarde en llegar a la empresa — digo.

—Es cerca del área comercial, si puede venir cuanto antes mejor — dice Gladys.

—Saldré en estos momentos — digo.

 

Llego a la brevedad del tiempo, la recepcionista me atiende amablemente y me lleva con la persona que se interesa en mis servicios y conocimientos administrativos, me siento muy halagado y a la vez nervioso.

 

—Hola, el señor de los milagros. Jacobo es un placer verte — dice el gerente general.

—Eres, Humberto Gonza, el mejor y más grande administrador. El rescatista de emergencias para las empresas— digo impactado.

—El mismo— dice.

 

El guru de la administración, el hombre que logro rescatar a varias empresas que tenían un capital menor de mil dólares, está admirado por mi trabajo. Este es uno de los mejores días de mi vida.

 

—Dime, El negocio de las asesorías, es lucrativo — dice Gonza.

—No me quejo— digo riendo con él.

—Mira, tuve una recomendación directa de una persona que te quiere — dice.

 

Vaya, esto sí es inesperado.

 

—De Yoselin— dice.

—¡Ella!

—Me hablo acerca de tu pasión, de como estabas pudriéndote en un lugar en donde te trataban como el culo y aun así tuviste el valor de salir de allí para luego poner tu consultoría. Madre mía, admiro a los hombres con huevos y espero no las dejes ir, esa mujer vale la pena y si te la quitan jamás te lo perdonarás — dice Humberto.

 

Creo que le he fallado a mi ídolo.

—Dime, ¿Por qué estás interesado en mí?

—Amigo, veo tu potencial y agallas para enfrentar la vida, es momento de que tengas un reto aquí en mi empresa con el mejor salario que te imagines—.

 

Esto es increíble, esto es para mí el mes se abren y lo tomaré, Lazaro se encargará de todo y necesitaré de un mafioso gánster contador para cuidar las finanzas de mis patrones del mal.

 

—Aceptó — digo con felicidad y aprieto su mano.

 

Al subirme al carro después de la entrevista comienzo a pensar en Yoselin, quizás fue a la empresa para que yo pudiera tener una oportunidad y lo mejor por ahora es que tengo que resolver esto.

 

La espero en la entrada principal de su empresa para  tonto y arriesgado hacerlo después de lo que vio. 

 

—Amor —digo mientras sale caminando rápido.

—Acabaste de jugar al lavandero con el dinero — dice ofensiva.

—Fui con Humberto— digo.

—Espero que en tu curriculum pongas que trabajas con narcos y políticos corruptos y como administrador de ilícitos — dice molesta.

Doy un paso enfrente de ella para que me hable directo a los ojos.

 

—No tuve elección, me amenazaron y me pusieron una pistola. Dejaron el dinero y al final tuve que aceptar o mi idiotez o morir porque no tuve otra elección una idiotez o morir porque no tuve otra elección— digo.

—No es por eso que estoy molesta — dice.

—Explica.

—Me enoja que no me hayas involucrado en tu plan—.

 

Porque me siento impactado por esta noticia. Escuche bien, mi novia quiere implicarse en problemas legales.




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