Aprendiendo a quererte

Capitulo 24

Así que… ¿esta es la familia de Mariana?

Son… diferentes, en el buen sentido, claro

-¡Xander! ¿Podrías ayudarnos a subir esto?

-claro, ya voy- camino en dirección a algunos de los primos de Mariana que intentan cargar las piezas de una cama

No estoy seguro de sus nombres, en menos de una hora me presentó a más personas de las que he conocido en un año

-¿Dónde conociste a Mariana?-pregunta uno de los hombres de repente

-¿ella no les contó?

-ella no nos dice muchas cosas

-sí, de la familia ella es la más reservada, ve que te tenia bien guardado

-nos conocimos por cuestiones de trabajo- disfrazo un poco la verdad

-¿trabajan juntos?

-algo así

-¿y hace cuánto salen?

-hace casi un mes…- recuerdo la boda de Carlos, ¿ya casi ha pasado un mes?

Ahora que recuerdo, ese día luego del beso Mariana no me volvió a hablar el resto de la noche

Estuvo ignorándome hasta que se quedó dormida y tuve que subirla a una de las habitaciones del hotel para que descansara mejor

Se veía tan tranquila y hermosa

-entonces es algo reciente

-si- no decimos más y dejamos las piezas en una habitación donde están otras personas esperando por ellas

 

Luego de subir el resto de las piezas busco a Mariana, no me gusta estar solo donde no conozco a nadie

Para mi suerte, la encuentro sentada en uno de los muebles hablando con su prima, Jazmín, de todos los nombres que me han dicho hoy, ese es uno de los pocos que recuerdo

Camino hasta dónde están y me siento junto a Mariana

-¿Dónde estabas Xander?

-ayudando a tus primos- me recuesto de ella ya que es muy pequeña como para reposar mi cabeza en su hombro, estaría incomodo- ¿me merezco una recompensa?- la miro de reojo mientras sonrió con superioridad

Creo que es un buen momento para intentar hacerla sonrojar, o por lo menos, ponerla incomoda. Es mucho más adorable cuando está nerviosa

-¿eso crees?- se levanta y se para frente a mí- dime, ¿Qué quieres? Amor- toma con delicadeza mi mentón y se inclina acercando su rostro al mío

Okey… esta no era la reacción que esperaba de ella, sin embargo, creo que me gusta mucho mas esta

-¿Qué me ofreces?- agarro su cintura

Mariana sonríe mientras el tono carmín que tanto me gusta se apodera de su rostro

Ella termina de acortar la distancia y me besa

¡Dios! aquí esta esa mujer que tenía tiempo sin ver

-¿ya? ¿Te basta?- me pregunta una vez que se separa

-por ahora supongo que si- le respondo mientras le dejo pequeños besos

-ay, cuanto amor, pero ya deténganse, si van a tener sexo arriba deben haber un par de habitaciones desocupadas- dice Jazmín

-no suena tan mala la idea- le digo a Mariana

-aquí no, amor- dice con una sonrisa

¿Lo dice enserio?

Dios, por favor dime que no me estas engañando, que esto no es un sueño

¿Lo dice solo por compromiso o por gusto?

-Dragoncita…- no me deja hablar y me interrumpe dándome otro beso corto

-voy a ir a ayudar a mi madre, ya regreso

Se va y me deja solo con su prima

-¿Xander?...

-¿sí?- volteo a ver a Jazmín

-oh nada, solo pensaba… ¿sabes? Tu nombre se me hace muy conocido… al igual que tu rostro

-¿ah sí? Quizás estas confundida- digo nervioso

-no… no lo creo…- achica sus ojos sin dejar de verme- dime… ¿tu apellido si es Gutiérrez, verdad?

-si…

-bien, en cuanto logre recordarme porque te me haces tan conocido te estaré avisando- espero que no por favor

-claro- doy mi mejor sonrisa de labios cerrados

Si alguien se llega a enterar que soy el jefe de Mariana puede ser que ella termine molestándose conmigo, y ya hemos avanzado bastante como para que se enoje por algo así

-¿hermano? ¿¡Xander donde estas!?- escucho a Alicia gritar-oh olvídalo, ya te encontré- volteo a verla, sé que es mi hermana pero ¿estará bien? ¿No puede ser un poco más normal?- hermano, hermano, adivina que tengo atrás en mi espalda escondido

-¿tus manos?- bromeo con ella y me saca la lengua

-ja ja muy chistoso, pero no, en realidad es… esta adorable bolita de pelos- deja de esconder la pequeña criatura y la enseña como mucho orgullo

-Alicia, lleva eso a donde lo encontraste, sus padres deben estar buscándolo

-pero hermano, ya buscamos Santiago y yo por el bosque a la familia de este conejito y no la encontramos, solo encontramos una madriguera vacía y solitaria

-igual, ellos viven afuera

-pero cuando lo encontramos estaba llorando, tiene una de sus patitas lastimadas, si lo dejamos ahí afuera morirá- dice triste

-¿y qué piensas hacer?- después de meditarlo un par de segundos me muestra una sonrisa de oreja a oreja

-lo llevaré a casa conmigo, lo cuidaré, sanaré y alimentaré

-no te vas a llevar eso- señalo al conejo que carga como si fuese un bebé

-¿Por qué no?

-porque una mascota es una responsabilidad Alicia

-la universidad también es una responsabilidad y lo hago bien

-una mascota es otro nivel de responsabilidad

-pero puedo con ella, te lo prometo… además, tú no vives conmigo, ¿Por qué te pido permiso a ti? Se lo voy a decir a mamá, sostén a Ikky por favor- coloca el conejo sobra mis piernas y saca su teléfono de su bolsillo

-¿Ikky? ¿Me estas jodiendo verdad? No le pongas nombre porque no te lo vas a quedar

-eso ya lo veremos…, mami ¿Cómo estás?...- se aleja y me deja esta bola de pelos

-¿te gustaría quedártelo?- le pregunto a Jazmín- creo que a tu niña le gustaría mucho

-¿Qué? No, no, no, ni se te ocurra, ya tiene dos cachorros y un gato, con eso es más que suficiente

-sí, pero no tiene un conejo ¿verdad?

-no, y tampoco lo tendrá, solo deja que tu hermana se lo quede

-y por supuesto que lo haré, mi mamá me dijo que si podía quedármelo




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.