Aprendiendo amarte.

CAPÍTULO 4

Cuando llegue a mi casa seguía desconcertada por lo sucedido en la última clase, la manera en que me abrazo era muy rara, una voz me saco de mis pensamientos y cuando volví a la realidad vi que era mi mamá que quien sabe desde que tiempo me llamaba y yo ni en cuenta de su presencia, me queda mirando de una manera extraña por unos segundos, luego de eso me habla.

Mamá -En que estabas pensando que ni cuenta de mi presencia te diste- Su expresión era de desconcierto total.

Yo -Estem… nada ma, cosas de la escuela- Obviamente no le iba a decir lo que había sucedido en la escuela, me llenaría de preguntas y como que eso no checa.

Mamá -Segura que es eso y no otra cosa- Algo no me daba buena espina, pero mi expresión era serena y no tendría por qué dudar al menos no por ahora.

Yo -Claro que no- Ruedo los ojos -Son cosas de mis tareas y así, tú no te preocupes que todo está bien, ¿Ok? – La convencí estoy casi segura que ya no va a preguntar.

Mamá -Esta bien pues- Si, ya no me preguntaría más, entonces me levanto para ir a mi cuarto a quitarme el uniforme, pero ella me detiene -Espera un momento- Me dice

Yo - ¿Qué paso? -Le pregunto desconcertada.

Mamá -No se te olvide que hoy tienes que ir a jugar a la 5:00 p.m.- Me lo dice, bueno más bien me lo recuerda.

Yo -Si es cierto- Se me había olvidado, con tantas cosas que tengo en la cabeza se me olvido el partido.

Mamá -Se nota que no te acordabas, ¿verdad? – Me lo dice con una cara que ni se cómo explicar.

Yo -Estem… la verdad es que no me acordaba- Se lo digo sinceramente.

Mamá -Si lo note, pero está bien, ahora ya sabes y estate lista antes de la 4:30 para que te lleve- Me dice, aunque bueno, sonó más como aviso, pero está bien.

Yo -Claro que sí, ten por seguro que lo estaré- Le digo sin nada más.

Mientras me quitaba el uniforme me dispuse a recordar que tareas tenía pendientes de las asignaturas, pero como no estaba segura del todo una vez cambiada de ropa saque todos mis libros y libretas para checar en si cuales tareas tenía para empezar a hacerlas, después de aproximadamente unos 10 minutos pude comprobar que tenía dos y eso era bueno, porque tendría tiempo para alistarme antes de ir a jugar, después de casi una hora, acabe mis actividades y mi madre me llamo para comer.

Yo -Ya voy enseguida- Le grito desde mi habitación.

Mamá -Apúrate que se enfría- Me devuelve el grito.

Cuando bajo las escaleras ya todos están sentados y yo me dispongo a tomar asiento. Mientras comemos mi madre se pone a hablar con mi padre de asuntos a acerca de su trabajo mientras que yo me pongo a conversar con mi hermano él es dos años mayor que yo y lo que a veces me cuenta me da risa, la manera en que dice las cosas es muy chistosa aunque a veces me da consejos acerca que me debo de dar a respetar y así, eso ya lo sé, solo que él es un poco celoso si ve que un chavo se me acerca, pero ni modos así quiero a mi hermano.

Mientras terminamos de comer me doy cuenta de que ya van a dar las cuatro, que rápido pasan las horas y termino mi comida, lavo mi plato y me dispongo a buscar mi uniforme, ya teniendo listo lo que me voy a poner me doy una rica y refrescante ducha, después de unos minutos me dispongo a arreglarme, me peino, me pongo el uniforme y ya estoy lista. Bajo las escaleras gritando.

Yo -Maaaaaaa, ya estoy lista- Me siento en el sillón.

Mamá -Esta bien, en unos minutos bajo- Me dice.

Mientras la espero sentada en el sillón me pongo a jugar con mi celular mientras termina de arreglarse, después de unos minutos ella baja y me dice que ya está lista, entonces agarro mi mochila y meto mi celular, y salimos de la casa para entrar al auto de mi papa ya que él nos iba a llevar, una vez dentro del auto nos lleva al campo y en menos de10 minutos ya estábamos hay, me baje seguido por ellos caminamos a las gradas a esperar a que terminara el otro partido y llegaran las demás jugadoras, total todavía eran las 4:45, ósea que tenían 15 minutos para llegar todavía.

Pasaron diez minutos y el entrenador ya estaba del otro lado de la cancha con las demás jugadoras incluyendo a su hija que era un año mayor que yo, entonces me despido de mis papas y me voy con mis compañeras, de camino me encuentro a él, el chavo que me llamaba la atención, pero como soy tan mensa solo paso de largo al igual que él…

Bueno empieza el partido y yo estoy de defensa central, mis compañeras suben en busca del balón mientras yo me quedo abajo con otras dos más…

Pasan los minutos y ya es medio tiempo y vamos 1-0 a nuestro favor, nos encontramos sentadas descansando mientras reanudan el partido, después de unos minutos el árbitro silba para reanudar el segundo tiempo y todas nos acomodamos en nuestra posición, comenzamos el juego y nosotras tenemos el balón, la media me da el balón y yo lo conduzco para después pasárselo a la delantera quien va corriendo con él a punto de gol, pero al momento de disparar la portera lo tapa desviándolo por un lado dando un tiro de esquina. La media llamada Carmen, una chica no tan delgada de unos 14 años es quien va a cobrar el tiro, cuando el árbitro silba ella dispara, pero el balón cae a la hija del entrenador Penélope se llamaba, estaba a punto de disparar cuando una jugadora del equipo contrario la golpea en la pierna cayendo ella al suelo, el árbitro silba haciendo que todas miremos a Penélope que se está retorciendo del dolor de su pierna derecha, el entrenador sale corriendo a ver lo que le había sucedido a su jugadora (aunque parecía mas un padre preocupado, ya que era su hija) y al parecer no tenia ninguna fractura y solo es el dolor que no la deja seguir, así que la llevan cargando hasta donde están las demás jugadoras y el árbitro reanuda el partido, pero antes habla con nuestro entrenador para saber quien va a tirar el penal.




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