Restaurante Francés

El ambiente era totalmente de inicio de cursos, nuevos alumnos y nuevos amigos, parecía carnaval o concurso de disfraces, llegaban unos totalmente aplastados, otros totalmente calcinados, otros con la cabeza en sus manos, otros sin cabeza pues no la encontraron, otros muy pálidos con jeringas incertadas en las venas muertos por sobredosis, otros acuchillados con el cuchillo todavía en la espalda, otros con la cabeza de lado y su cuello largo muertos por ahorcamiento, en fin muchos tipos de muerte, Liborio al ver tanta variedad pensó, ¿y yo como me veo?.

--- ¿muerte tienes un espejo?, tiene mucho tiempo que no me veo, necesito saber mis debilidades y mis fortalezas, la competencia va a estar dura, dijo Liborio preocupado.

--- no te preocupes Liborio, tienes lo tuyo, te ves muy pálido, estás feito, tienes muy sumidos los ojos, una ojeras muy largas, te ves exageradamente flaco, shirgo y muy desnutrido, con unos toques de maquillaje y un poco se sangre en tu rostro te verías fenomenal, además piensa que lo que hace a un fantasma famoso es que tantos trucos sabe hacer, ¡eso hace la diferencia!, dijo la muerte muy convencida.

--- ok, quiero que me enseñes todos los trucos que te sepas, van a conocer quien es ¡Liborio el mortuorio!, ¡Aaaaaarrrrr! comentó exaltado Liborio.

--- jajajaja, está chido el nombre, dijo la muerte, imaginandose ya en la cima, siendo el representante de "Liborio el mortuorio", firmando autógrafos y en eventos privados, gozando de todos los lujos y excentricidades.

--- ¡Despiertaaaa, te estoy hablando!, Le gritó Liborio a la muerte que estaba soñando con un éxito rotundo; vámonos a nuestros aposentos que chiquilín no tarda en pasar por nosotros para darnos el  Tour.

Los dos amigos se dirigieron a su habitación, la 301 A, el interior del colegio era enorme y se sentía lo antigüo, se respiraba un ambiente húmedo y frío, con temperaturas bajo cero, pero lujoso, preguntaron en recepción por su habitación para no perderse, por lo que el señor Eliot de recepción les dió un pequeño mapa, el pasillo era largisimo, lo mas  sorprendente es que había  neblina en todos los pasillos, el colegio estaba alfombrado de color rojo sangre, las paredes blancas con figuras y filos en chapa de oro, cuadros enormes de algunos fantasmas famosos de nivel internacional, como el hombre sin cabeza, la llorona, el hombre lobo, Drácula, las brujas de Salem, la momia, el fantasma de Carterville, el fantasmas de la ópera, entre otros; el lugar tenía candiles enormes con cristal cortado, todo reluciente y limpio ya que había almas en pena limpiando todo, pagando sus pecados por toda la eternidad.

Por fin llegaron a su habitación, al entrar se sorprendieron de la comodidad de la que gozarían, alfombrado, un olor muy suave a incienso en todo el colegio, dos clóset amplios con madera de cedro, habitación muy  cómoda con una litera, una mesita, dos sillas, una lámpara, un baño, wi-fi, servicio al cuarto y una vista espectacular al lago, donde se podia ver a la perfección a su amigo Karonte.

Poco tenían de haberse instalado cuando paso el chiquilín, ¿están listos para el Tour?, ¡claro que sí!... contestaron en coro los dos amigos.

El chiquilín les mostró los salones de clases y como llegar rápido al salón 56, les enseño los atajos, las puertas secretas, los laboratorios, los sanitarios, el salón de  Baile, el restaurante, la cafetería, las catacumbas y el panteón de celebridades, prácticamente les mostró todos los secretos del colegio.

--- Hace hambre, dijo Liborio sobándose el estómago.

--- vamos al restaurante, hacen un caracoles de panteón riquísimos, dijo chiquilín.

El Tour les llevo casi medio el día, ya eran las cinco de la tarde y eso de caminar les provocó hambre, estaban fascinados, la muerte estaba disfrutando más que cualquiera, eran como vacaciones para ella.

Llegaron al restaurante y estaban haciendo fila alumnos de nuevo ingreso, algunos fantasmas conocidos que no dejaban de tomarse selfies con ellos y algunos profesores, se creían lo máximo, se daban su importancia, el restaurante estaba lleno, pero era normal, así era todos los días, pero ese restaurante es caro, solo para políticos, nacos, abogados rateros y famosos.

--- ¡por fin nos tocó! dijo chiquilín, siéntense, el olor del restaurante abría más el apetito.

--- bonjour bienvenue,
je serai ton serveur,
¿que voulez-vous manger?

--- lo siento no puedo hacer nada, ya siglos trabajando aquí y tienen prohibido hablar español, que según le da más clase al colegio, por eso solo pido caracoles de panteón, dijo chiquilín.

--- ahhh bueno y como se piden, dijo Libo viendo nervioso al camarero que estaba listo para anotar, con su cara pálida y levantando sus cejas como gordolfo gelatino, ¡Ahí madre!.

--- no sé cómo se dice y no veo que los demás hayan pedido, ese día solo señale y levanté mi dedo diciendo uno para mi también.

--- jajajaja y ahora dijo Liborio.

--- pouvez-vous m'apporter la lettre, s'il vous plait

--- Bien sûr, monsieur

--- ¡Hablas francés muerte!, ¿que le dijiste?, Preguntó Liborio.

--- Claro, soy internacional, se varios idiomas, soy políglota ¡Pende..!, ahorita le pedí la carta, a lo que respondío: si, señor.