Capítulo 1 "¿Apuestas?"

¿Apuestas?

1.-¿Qué es el amor?

Según he oído es el motor que te da la fuerza para hacerlo todo, el que te tontea y te obliga a hacer locuras de las que luego te reirás avergonzada o divertida.

Seguro la segundo opción era la más probable de pasar...

2.-¿Qué se siente que te amen?

¿Qué me amen?-Suelto una risa al leer esto.

La pregunta correcta sería ¿Alguien me ama? Es decir ni mis padres me...

Cuando voy a ironizar eso, a mi mente vienen aquel par de idiotas que han crecido conmigo y bajo mi dedo.

Ellos me aman...así que...supongo que se siente...bien.

Ruedo los ojos por eso. ¡Siguiente pregunta!

3.-¿Te has enamorado?

¿Yo? ¿Enamorarme? ¡Puff! La perra de Verónica por supuesto que nunca...sí. Desgraciadamente sí.

También tengo corazón ¿vale?

Y vergonzosamente tuve un flechazo por Gregory en la escuela. De solo recordarlo quiero golpearme. 

4.- ¿Tienes enamorado?

¿Alguien serio? ¿Alguien pasajero? ¿O qué? Para responder eso primero tendrían que definirme “tener” y ¨enamorado”

¡Si todas tus respuestas fueron sí-o al menos la mayoría-¿Qué esperas para hacer que el sentimiento de amor crezca? ¿Crees tener cualidades para ser bueno aconsejando? ¿Alguna vez lo has hecho?

Si es así ¡Te esperamos en “Creciendo el amor”!

Un pequeño lugar para dar tips o datos de amor.

Para cualquier duda o querer participar, preguntar de manera directa a la revista estudiantil.

P.D. Si tienes un amigo también eres bienvenido.

¿Esto...era una broma verdad?

Alzo una ceja ante lo último y río divertida arrojando la hoja de preguntas al basurero. ¿Así que si no tengo ni un perro que me ladre no puedo aconsejar? ¿Qué clase de estupidez es esa?

¿Dónde nos dejan a los que huyen de las relaciones?

¿Dónde quedo yo?

Bueno, que no encajara con ninguna de esas preguntas tenía sentido. Después de todo habían sido escritas por la peste, a quién no le agradaba. Aunque...a casi nadie le agrado.

¡Pero esa hoja tenía un gran golpe indirecto escrito especialmente para mí!

¡Agh! No me desagrada Pamela y tampoco su idea de crear una nueva sección en la revista para dar consejos amorosos. Ella nunca escribiría algo tan estúpido como esto. Lo que me desagrada es como han dañado tan buena idea.

Ese horrible volante es un penoso resultado de Penélope, alias la “peste”-sí, yo misma le di ese apodo-Es mejor decirle de esa manera que chismosa y metida.

Ella es parte del grupo que critica todo de mí, hasta como respiro. Es fastidioso pero inevitable, son tan sensibles que si les miro por el rabillo del ojo se ofenden y crean rumores.

Generación de cristal...cof...cof...

La otra parte se deja manipular por mí-quienes arrojan testosterona-Y a la restante solo les parezco linda y otros-que son la minoría-les importo poco.

Aunque no lo crean, esas personas son las que mejor me caen.

Por qué no se fijan en mi vida. Digo ¿a quién le importa que haya terminado con Cooper? ¿Qué tengas citas? Estoy soltera ¿no?

¿Qué esperan de mí? ¿Celibato?-ruedo los ojos-Por favor, solo estoy algo ansiosa por sentir algo de nuevo.

Lo que sentía cuando era niña. Ese sentimiento de ilusión.

Quiero...volver a tenerlo.

Y para mi desgracia ninguna de mis citas me hizo sentir algo. Es más, su mirada era fea. Siempre en mis atributos. ¿Qué más da que tenga un buen culo o una cintura delgada?

¿No deberían ver mi personalidad? Sí, desearía que alguien me viera a los ojos en lugar de los pechos cuando hablamos.

Sí, una cita normal sería bonita. Con alguien decente y no mr tentáculos de pulpo.

Mientras tengo divagues siento una mirada en mí y mi cuerpo se tensa. Identifico al cretino y hago una mueca de asco cuando el muy baboso me queda viendo el busto. Que repulsivo. Aprieto mi mano aguantando las ganas de estrellarle mi puño en su boca que por poco esta por babear.

¿Te consigo un trapeador? ¿Un vaso? ¿Un lindo puñete?-estoy tentada a preguntarle.

Soy guapa ¿y qué? Yo no busque tener buenos genes. Por lo tanto no busque sus miradas asquerosas sobre mi cuerpo.

Es desagradable. No me siento deseada, al contrario, me ofende y enoja.

¡Tengo ojos puñetas!-quiero gritar cuando paso a su lado.

Deja de verme los pechos para luego enfocarse en mi trasero. ¡Señor, dame un respiro! Mis ojos se abren cuando veo que su mano se acerca.

No...¿Él no se atrevería verdad?

Su mano va a tocar mi trasero pero rápidamente la tomo con mis manos y niego con una sonrisa tensa. ¿De verdad quieres perder tus descendientes? Él me ve sonriente, como si le divirtiera mi actitud y me pienso si de verdad no le importa su legado.

Basura repugnante... ¿quién te dijo que podías tocarme?

Suelto su mano con asco y me alejo lo más rápido que puedo pero disimulando mi rabia. No podía hacer un drama por esto. Sería la burla de todos.

Ella se lo buscó...

Joder, oír eso me molestó cuando grite pervertido a un tipo que me dio una nalgada. Ardía en rabia y le di una buena bofetada pero él solo se río y el resto me llamó dramática.

Fue insultante como las mismas chicas me miraron con desprecio.

Así que aprendí a lidiar con ello por mí misma. Las mujeres a veces solían ser serpientes disfrazadas de conejos pero cuando crees que eres una de ellas...te muerden.