Capítulo 34 "La verdad tras el artículo (parte 1)"

La verdad tras el artículo (parte 1)  

-De verdad tienes algo con estar sobre mí ¿no?-murmura y siento que me sonrojo.

O sea sí, pero no de este modo.

-¡Lo siento!-grito y trato de levantarme lo más rápido pero solo consigo alejarme y hacerlo quejar, porque aplasto sus costillas.

-Creo que me has roto toda la caja torácica.

-Ni de broma digas eso ¿si no cómo salgo de aquí? Arrastrarme no es una opción.

Enmarca una ceja y río. Lo que dije era mitad real y mitad broma.

De verdad no sabría cómo salir y peor arrastrar a un medio muerto.

Se sienta y sacude sus cabellos despeinándose un poco, un mechón se queda levantado y río estirando mi mano. Cuando bajo el cabello sonrío, sus ojos dan con los míos y en un acto de nerviosismo le tapo los ojos.

-Se parpadea McFly.

Suelta un bufido sonriendo antes de levantarse y extenderme una mano. La tomo y soy sincera, no me levanto por méritos propios, es él quien hace fuerza para alzarme. Porque incluso algo levantada mi instinto es aferrarme a él. 

Alzo la cabeza cuando estoy estable y mi nariz roza levemente con la suya por accidente. Arrugo la nariz por la sensación de cosquillas y él ríe. Una música empieza a sonar y veo que ya ha sido veinticinco de diciembre.  

Supongo que más de la una, pero eso poco importa ya que las personas empiezan a patinar en parejas mientras bailan. Claro, solo las que saben, las que no solo se quedan sonriendo viendo.

Yo por ejemplo.

-Se ve hermoso-murmuro al ver a una chica dando la vuelta y como su pareja rodea su cintura al acabar.

Yo hacía eso y en media vuelta me enredaba y caía como costal de papas al suelo. Mínimo estiraba la pata.

McFly sigue mi mirada y siento como empieza a patinar. Le regreso a ver asustada. ¿Quiere que lo taclee de nuevo?

-¿Qué haces?

-Vamos a salir, respira Bowen-asiento aliviada-Creo que te he dejado traumada.

-¿Tú crees?

Sonríe pretendiendo ser inocente.

Con pasos lentos salimos de la pista de hielo y cuando estamos fuera, camino con tal seguridad porque es como andar con tacos y me siento en las gradas. McFly empieza a quitarse los patines mientras yo muevo la cabeza al ritmo de la canción y veo a las parejas patinar.

Un click me hace bajar la vista y me congelo incrédula ante la escena de McFly quitándome los patines.

-No sabía que tenías complejo de príncipe-bromeo.

-Ni yo que se te diera de princesa.

Sonrío levemente y dejo que me los saque pero yo me pongo las zapatillas.

-Iré a entregar los patines-me informa y asiento.

Acabo de amarrar los cordones y me levanto. Decido arrimarme al barandal y tararear la canción mientras esperaba por él.

Estaba tan embobada viendo que me toma por sorpresa cuando se arrima a mi lado.

-¿Tanto te fascinó verlos?

-¡Claro! Bailar es mágico, sea solo, acompañado o con Felix-río-La música es la manera más bella de conocerse y reír. Incluso si tropiezas y alguien te atrapa, o si simplemente caes al suelo, puedes improvisar y seguir bailando. Tal vez primero te veas como una lombriz mientras te retuerces del dolor pero luego que pase, la misma música te adormece los sentidos, de alguna manera te consuela y te da fuerza.

>>Siempre he visto la música de esa manera, como una forma de perderte sin necesidad de dañarte.

No dice nada pero claramente lo he sorprendido. Aprovecho mi momento de valentía y extiendo mi mano hacia él.

-¿Bailas?-le pregunto tomándolo por sorpresa-Puede que en el hielo sea un asco pero afuera podemos bailar.

Me aguanto la vergüenza que quiere salir y tomo su mano acercándome hacia él. Esta mudo, algo bueno porque es un mudo obediente que me sigue la locura de bailar afuera. Lo mágico e irónico es que luego de nosotros más personas se unen y nos imitan.

Supongo que todos son personas que como yo, tampoco saben patinar.

***

Si alguien me dijera que hoy era mi último día de vida, moriría en paz.

Porque si alguna vez pensé en que podría salir con Gregory-y creía que estaba loca por ello-jamás se me cruzó que estaría en su habitación y en su cama.

No lo malinterpreten.

Si bien estaba sobre su cama y con la ropa de Jade, no significaba que fuéramos a dormir juntos. O sea sí, pero no de la manera pervertida que incluya...

Mis mejillas se sonrojan y niego.

No, Cris, no, solo van dormir, no vas a hacer un drama por eso ¿verdad?

¿Cómo llegué aquí? Bueno, yo tenía la intención de volver a mi casa cuando Jade me intercepto y se negó a ello, alegando que era muy peligroso-mi hogar era más protegido que castillo-pero no me queje.

Me dio ropa y me lanzó prácticamente al cuarto de su hijo.

Fin de la historia.

Ahora estaba por morderme las uñas y una posible taquicardia por mis latidos que no querían ser normales. Es más, estos se aceleran de manera increíble cuando la puerta es abierta.

Joder...ni que me fuera a desflorar.

¿Algo irónico?

Meterme a la cama esperando por él pero consigo el sentimiento de vergüenza cuando solo se acerca para tomar una almohada y cobija para irse al sofá.

Uh, vale.

-Soy una tonta-susurro y entierro la cara contra la almohada.

La luz se apaga y oigo como camina hacia el sofá. Como sigo con la cabeza dentro de la almohada me toca virar para hablar.

-Siento haberte robado tu cama.

No dice nada.  

>>Puedes...-siento mis mejillas calentarse-puedes dormir conmigo, no me incomodaría.

Se forma un silencio y me maldigo por decir algo tan bochornoso como eso. Entierro de nuevo la cara en la almohada y me planteo dormir.

No es muy difícil pues a pesar de la vergüenza pasada, mis ojos se empiezan a cerrar. Y cuando voy a caer dormida un sonido me hace parpadear.