—Entonces a ver si te entendí ¿Me estás diciendo que prefieres quedarte en casa leyendo o viendo unas películas más viejas que todos nosotros juntos en vez de salir con nosotros a una reunión donde probablemente haya chicos de tu edad para interactuar?
—¡Ding, ding, ding hay un ganador! —afirmo para Carson señalando su cabeza. —A veces me sorprende lo mucho que me conoces —ironizo.
—Vamos Jeanette, no creo que quedarse aquí solita sea muy divertido que digamos —repite de nuevo el pelicastaño —Hasta Jared con lo asocial que es va porque sabe que es mejor que quedarse aquí.
—En serio ¿Va a ir Jared? —le pregunto fingiendo sorpresa. —No se diga más. Si antes podía pensármelo el ir o no, ahora si es verdad que mi respuesta es definitiva, no pienso ir.
—Esta bieeen, pero que conste que te lo advertí, aquí sola te vas a aburrir. —hizo un gesto exagerado y se tiró de nuevo en mi cama para seguir, como siempre, viendo televisión en mi habitación.
Déjenme y los actualizo un poco de qué va esto. Ya tengo un tiempo acá y no está mal, digo, tengo que aguantarme al chismoso de Carson todos los días a pesar de no vivir aquí pero ya me voy acostumbrando a tenerlo en mi cuarto como todo un parásito. Creo que ustedes no tienen mucha idea de cómo cómo es convivir con ellos así que a qui les va.
Liam mi primo fastidioso —no se lo digan porque hace un show de drama que no me quiero aguantar —es alto, solo me saca una cabeza así que bueno, tampoco lo es tanto pero de igual forma saca partido de eso, un día estando en uno de las cadenas de supermercados más grande y la ciudad empezó a caminar más rápido que yo dejándome atrás y de paso sin idea de dónde iba, el rubio oscuro gracias a su padre se pasa en cuanto a sus bromas, siempre va por el apartamento asustándonos cosa que ya me tiene un poco harta.
Otra de las cosas que me tiene harta es su espíritu ligador, aprovecha al máximo porciento sus ojos avellana, herencia de nuestra familia materna, su piel pálida y aspecto de fuckboy para salirse con la suya en cuanto a las chicas.
Cualquiera creería que ir a la universidad le daría un poco de madurez, pero la verdad es que de sigue comportando como niño pequeño en ocasiones.
Ahora Jared, mi hermano de 16 años es casi tan alto como yo—también aprovecha eso para fastidiarme— tiene el pelo negro azabache, cara pecosa y los ojos color verde claro cosa que le favorece mucho en cuanto a las chicas, aunque no se dé cuenta porque va perdido en su propio mundo es casi tan pálido como Liam. Vivir con él es apenas frustrante, caso no sale de su habitación, se mantiene callado la mayor parte de tiempo y cuando habla es para discutir con Liam o Carson sobre algo, eso es básicamente todo. Es un poco borde, terco, amargado y antipático —que digo poco, es demasiado— así que bueno si llego a tener cuñada, dios me la bendiga y la ampare porque yo no quisiera estar en su lugar.
Y por último pero no menos importante Carson Alexander Lane mejor conocido como el mejor amigo chismoso de mi primo. Carson, tiene 20 años recién cumpliditos, es buena gente, sabe cocinar y hace caso ¡SE VENDE!
Bueno tampoco así, lo necesito para que me ayude con las tareas.
Continuando el sí que es alto, mucho de hecho, pero a diferencia de los demás no intenta dejarme atrás todo el tipo cuando estamos en el centro comercial, tiene el cabello y ojos castaños, él si es gente decente y sabe cocinar. Creo que no lo había dicho antes, pero, estudia psicología al igual que Liam, así que pronto tendré dos psicólogos que traten mi locura y mejor aún, gratis.
En fin, él es muy agradable y aunque a veces sea insoportable de verdad que aprecio su compañía si fuera por mi hermano y primo me quedaría sola hasta que empiece lo que muchos llama escuela pero yo llamo, infierno.
[...]
Ya han pasado como dos horas desde que por fin se fueron para la reunión esa que tenían y me dejaran en paz, solita y puede, solo tal vez, que me este arrepintiendo un poco.
¿Solo un poco, querida?
Me puse a leer, vi una película y ya no sé qué hacer así que de entre la corta lista de cosas que puedo hacer elijo video llamar a mi mejor amiga Valerie White, mi confidente, mi ancla y diario andante, mi psicóloga personal, el ying de mi yang y bueno, qué más puedo decir, es casi como una hermana para mí.
Lamentablemente ella al igual que yo tuvo que mudarse, sus padres... Se están divorciando y ella se quedó con su madre.
—Holaa holaaa pero mira quién se dignó a llamarme, por fin —dice de inmediato desde el otro lado de la pantalla mi mejor amiga que al parecer está un poco ocupada.
—Ja Ja Ja, te llamé antes de ayer estúpida.
—Ya ni me dejas hacer drama. Me estas perdiendo...
—Lo siento drama queen ¿Estás ocupada?
—Nah solo hacía unas cosas, pero ya está.
—Buenooo.
—¿Y a qué debo el placer de tu llamada?
—¿Ahora no puedo llamar a mejor amiga?
—Vamos Jeanny, te conozco desde que tenemos 7 años.
—Bueno tal vez esté un poco aburrida y no tenga nada que hacer.
—Es un viernes por la noche Jeanette y tú no tienes nada que hacer, apuesto que Liam se fué de fiesta ¿O me equivoco? —negué —¿Por qué no fuiste con él?
—Primero no me llames así, segundo puede que haya preferido quedarme leyendo Irresistible Propuesta por décima vez echada en mi precioso puff en vez de ir con los chicos a la reunión.
—Qué raro tu quedándote de antisocial leyendo con tu camisón negro de Zeppelin.
—Bueno, no me regañes.
—Bien ya está ¿Qué me cuentas?
—No mucho la verdad, llevo ya unas semanas aquí y lo único que he hecho es tirarme a ver películas con Liam y Carson, pelear, comer, dormir, leer, comer ah y hacer de mis necesidades e ir al taller de pintura —digo enumerando las actividades de mi vida cotidiana y me rio al ver la cara de Vale.