Jeanette
Okey.
Liam. Cocina. Desayuno. Mala combinación si consideramos que Liam se trasnochó estudiando para un examen que tenían hoy.
Y para agregarle algo más a un día que va de mal en peor a cada segundo que pasa, no encuentro el libro de sociales que debo llevar hoy.
Entre otros asuntos, hoy no se como conseguí despertarme temprano, gracias a los gritos desesperados de Liam intentando no quemarse más de lo que ya había hecho, pero me desperté, es un logro para mi.
Me dio tiempo de arreglar todo lo que tenía que llevar ese día al cole, excepto encontrar el puñetero libro de sociales.
Ya a las siete menos cinco estaba lista para un nuevo día, hasta que me di cuenta que en el torpe intento de "hacer el desayuno" Liam tumbó el frasco de café instantáneo y ya no quedaba nada. No se si lo había mencionado antes pero en el caso de que no, yo no funciono sin cafeína en mi sistema.
Así que, no me tocó de otra que aguantarme un día sin café, desde ya les digo que lo más probable es que ande como zombie el resto del día. ¿Ven? Por eso no hay que dejar a Liam solo en una cocina.
Cuando todos ya estábamos más que listos, salimos del apartamento cada quien en lo suyo.
Después de dejarnos en el colegio el día transcurrido de lo más normal hasta que...
—Hola ¿eres Jeanette? —un chico de como la misma edad, pero el doble de alto que yo se acerco y empieza a caminar a mi lado por todo el pasillo, entonces me quito mis auriculares y lo miro mejor.
Como dije antes, es altísimo, de tez blanca y cabello negro bien peinado, sus ojos marrones son achinados y lleva el mismo uniforme que yo, claramente, solo que sin nada más que un libro de sociales en mano, mira que casualidad.
—Si —respondí con un poco de duda.
—Bien, pues voy directo al grano... Soy amigo de Graham, seguro sabes quien es ¿no? —asiento con la cabeza —Bueno, el no vino hoy a clases y me ha pedido que te dé esto, dice que te lo has dejado en su casa la otra vez —Así que ahí estaba, uff menos mal me lo ha mandado porque de lo contrario no habría podido hacer los apuntes de la clase de hoy —Ah, otra cosa, y espero no te moleste, pues mi otro amigo —lo señala, un chico un poco más bajo de tez oscura y cabello oscuro también me saluda con una mano —Queremos hablar contigo sobre él, repito, si no te molesta.
—Ahm, si díganme.
—Ven.
Lo sigo hasta donde está el otro chico y ambos se presentaron como Will es el chico que me había entregado el libro y el chico más bajo como Anthony.
—Lo que queremos hablar contigo tienes que quedar entre los tres, Graham no debe saber nada.
—¿Okey? Hablen rápido que tengo una clase en nada.
[...]
Lo único bueno de este día fue que Soph me llevó un café helado de Starbucks para disculparse por ser tan intensa sobre Graham.
Lo juro por Dios que sin ese café a la hora del descanso me hubiese tirado por la azotea.
Los profesores hoy estaban más insoportables de lo normal y no se si era yo, pero, hoy como que todos mis compañeros se empeñaban en ser más bordes y hablar prácticamente gritando como salvajes.
Lo otro bueno de hoy es que no tengo más tareas que entregar para esta semana así que me puedo tomar el día. Espacio para agradecerle a quien sea que nos tuvo piedad y decidió no dejarnos tareas hoy, gracias quien seas.
Llegue más agotada de lo normal a casa, ni siquiera me quite el uniforme solo me tiré en mi cama y cuando estaba a nada de caer en brazos de Morfeo mi tono de llamada sonó más alto de lo normal.
Mi madre.
[...]
Después de hablar con mi mamá y mi papa intente dormir de nuevo pero fue misión imposible, solo lograba pensar en la conversación que tuve con los amigos de Graham, específicamente cuando me dijeron...
"—Le gustas Jeanette, de verdad lo haces. Solo queríamos saber si lo correspondes porque lo que menos queremos es que salga lastimado como con... ejem... tu ya sabes quien."
Mi cabeza estaba hecha un lío, no porque estuviese confundida por mis sentimientos porque estaba más que clara en que solo quería una amistad con él, sino por el hecho de que solo tengo unos pocos meses acá todos parecen estar empeñados en juntarnos a los dos. Realmente no se porqué sea, pero ya me tiene un poco cansada ala verdad.
Tenia hambre, al fin y al cabo no había comido gran cosa durante el día.
Me dirigí a la cocina, ahí no encontré a nadie como era de esperar, y revise que había para hacer algo, al menos había bastante más que en cualquier otra situación. Tome el frasco de salsa para pasta y lo vertí en una olla pequeña que encontré, la puse a calentar mientras también ponía a hervir el agua para la pasta.
Espere sentada en el mesón revisando mi teléfono, me metí en las conversaciones y me encontré con un contacto que me llamó la atención sobre todos; Señor Chismoso, creo que ya todos sabemos quién es, y no pude evitar pensar en el.
No había visto a Carson desde hace unos días, Liam me dijo que están muy ocupados con los exámenes de la universidad, Liam también había estado todo el día fuera y mi hermano, bueno el estaba encerrado en su habitación, como siempre.
El apartamento se sentía bastante solo sin ellos fastidiando.
La pasta estuvo, me serví una porción en un plato, le eché la salsa y un poco de queso parmesano. Estoy comiendo la gloria ¿Okey?
Si así me reciben en el cielo yo quiero ir ya.
Por primera vez, estoy de acuerdo con mi conciencia.
Ya estaba terminándome mi plato cuando recibo una llamada.
Lo llamaste con el pensamiento.