03 de febrero del 2023
Aún me aferró a la idea de que esto pueda funcionar, tan mal me encuentro pensándolo que no te quiero soltar, sé que es necesario, sé que es un bien para los dos.
Supongamos que te lo digo con las siguientes palabras:
— "Gracias, por todos los momentos, aunque no lo creas se volvieron felices; pero a decir verdad fuiste el mejor libro que me leí, pero lastimosamente la lectura llegó a su fin"—.
O también te puedo decir:
— "Me duele hacerlo, sé que creerás que no es así, pero es cierto. No quiero que te preocupes por alguien que todos los días tiene ganas de morir, no quiero que si un día de estos lo haga te eches la culpa por mi sentir."—
Quiero ser directa pero que no duela... Aunque una vez alguien me dijo: aunque no quieras que duela es inevitable hacer que no lo haga.
Y ajá, ¿Continuo como si nunca hubieras existido?
Tan solo el imaginarlo me genera un llanto, pero es una decisión en la que ya no debería haber vuelta atrás.