Capítulo 14. Un extraño presentimiento.

Jimin.

–¡Jimin! –escuchó a Meredith, girando a verla, ya que ella nunca grita.

–¡Minnie! –grita Rosie al mismo tiempo, abrazándola con fuerza.

–Hola, preciosa. ¿Cómo estás?

–Muy bien, estaba pasando tiempo con mi hermana y decidimos venir aquí –mira a su alrededor –. ¿Y los demás?

–Yoongi está en su estudio, los demás salieron a hacer sus cosas, soy el único en casa.

–Ah, ya veo –mueve su cabeza de arriba a abajo –. Voy a buscar a Bigotes.

–Debe estar con Yoongi, sólo no olvides tocar antes.

–¡Si! –la vemos alejarse, dando mi atención a Meredith, que se veía acelerada.

–Jimin, ¿podrías hacerme un gran favor?

–Por supuesto.

–Debo ir rápidamente a la empresa a revisar un trabajo que debe entregarse, pero no lo encuentran y tenemos el tiempo contado. ¿Podrías cuidar a Rosie mientras tanto?

–Claro que sí, nunca dudes en pedirme eso, amo cuidar a mi niña.

–Muchas gracias. Cualquier cosa que suceda, no dudes en llamarme, no tardó.

–Ve con calma, yo la cuido.

Meredith sonríe, corriendo a la salida. Estoy seguro que es una situación de emergencia, porque cuando tiene su día de visita con Rosie, despeja su agenda para pasar todo el tiempo con ella. Me estiro, soltando un suspiro de satisfacción, poniéndome de pie para ir a buscar a Rosie.

Voy hacia el estudio de Yoongi, escuchando la risa de la pequeña, viendo la puerta entreabierta, empujándola, viendo a Rosie acariciando a Bigotes, quien estaba muy cómodo en el regazo de mi compañero, que veía con una pequeña sonrisa a la niña.

–¿Contenta de haber encontrado a Bigotes? –preguntó, entrando y acariciando su cabecita.

–Sí, su pelaje es tan suave –suspira –. Quiero jugar con él.

–Juega con él, ahora está muy activo, más tarde es su siesta, y ahí si, no podrás jugar con él –le sugiere Yoongi.

–¡Si! –exclama emocionada, tomándolo con cuidado de las manos de él –. Lo voy a cuidar mucho.

–Lo sé. Diviértanse.

Rosie asiente, saliendo de la habitación con Bigotes, escuchando su leve risa.

–Es una niña tan adorable.

–Lo es. ¿No quieres pasar tiempo con nosotros?

–Más tarde, tengo unas melodías que terminar, están dando vueltas en mi cabeza.

–¿Y ya desayunaste? –lo confrontó.

–Lo haré más tarde.

–Te traeré un batido, no debes pasar hambre.

–No pasó hambre, a veces olvido comer.

–Ya lo sé, por eso tengo que estar vigilando que comas –él se ríe.

No es que tenga problemas para comer, pero cuando se enfoca en algo, es difícil sacarlo de ahí, sobre todo con la música.

–Tomaré ese batido, para que estés tranquilo.

–Lo traigo enseguida.

Asiente levemente, enfocado de nuevo en su computadora, así que cierro la puerta, yendo a la cocina, viendo a Rosie jugar con Bigotes en la sala. Como el concepto abierto me ayuda a vigilar, empiezo a hacerle un batido a Yoongi, para que tomé algo.

–Rosie, ¿ya tienes hambre?

–Un poquito.

–¿Te gustaría comer unos dumplings?

–¿Qué es eso? –me mira curiosa, ladeando la cabeza.

–Te van a encantar. Deja le llevó su jugo a Yoongi y comemos juntos.

Rosie asiente, por lo que voy rápido a darle su batido a Yoongi, para ir al refrigerador a sacar una pequeña charola de dumplings de carne y verduras. La pongo a cocinar en la freidora de aire, llevando a Rosie a que se lave las manos, sentándose en su silla, para que podamos comer.

Llevo dos platos a la mesa, inhalando el delicioso aroma. Me gustan mucho los dumplings, son suaves y muy deliciosos.Con los palillos, tomó uno de verduras, soplandole para que no esté tan caliente, dandole de comer a Rosie.

–Abre la boca, y ten cuidado, está un poco caliente.

Rosie abre la boca, dándole un pequeño mordisco. Lo saborea, abriendo más los ojos y pasando su pequeña lengua por sus labios.

–¡Está delicioso! –exclama emocionada, haciéndome reír por su emoción.

–Que bueno que te guste. ¿Quieres más?

–¡Si! Es muy suave y esponjoso.

–Come despacio, aún hay más –le limpio su pequeña boca con una servilleta, dándole de comer.

–¿Crees que mi hermana va a tardar en volver?

–Va a ser poquito tiempo, no dudes en que vendrá a pasar tiempo contigo.

–Es que la extraño mucho, no me gusta estar lejos de ella –hace un puchero –. ¿Cuándo podré estar de nuevo con mi hermana?

–Va a ser pronto, estamos esforzándonos mucho en que sea pronto.

–¿Lo prometes? –me mira con sus bonitos y redondos ojos negros, enredando su menique con el mío.

–Lo prometo, pero no debes estar triste, estás viviendo con tus tíos, y ellos te tratan bien.

–Uhm, son bastante amables, sobre todo mi tía, me consiente mucho y siempre me da dulces, pero a veces no me los como porque son muchos –hace una mueca, frunciendo el ceño.

»Es lindo vivir con ellos, pero mi tía suele decir cosas raras, y eso no me gusta.

–¿Cosas raras? –pregunto confundido.

–Sí, habla de pasar más tiempo juntas en un lugar con un nombre raro, no lo entiendo es un nombre muy raro. ¿Crees que es parte de un juego?

No le dije nada, tuve un raro presentimiento acerca de eso. No sé si tomarlo como una exageración de mi parte, o como algo a lo que debemos prestar atención. Rosie lo dijo de una manera, que me hace sentir que debo hacer algo, pero no sé qué.

Quiero seguir haciendo preguntas, pero Namjoon entra al comedor, llamando la atención de Rosie, que lo saluda alegremente.

–¡Jonnie!

–Mi Pequeña Hada está aquí –sonríe, agachándose para darle varios besos, haciéndola reír –¿Cómo estás?

–Muy bien, estoy comiendo dumplings, son deliciosos y esponjosos. ¿Quieres uno?

–Me encantaría, sólo le doy unos papeles a Jimin.

–Bueno –asiente, jugando con un rompecabezas sin completar al lado, entreteniéndose con eso.

–Toma, aquí está el itinerario del mes, para que puedas organizar los ensayos de tus presentaciones.