Cap. 77 Lo que no sabía

Como la tradicional cena de año nuevo no había podido efectuarse debido a los acontecimientos recientes, y siendo que todo estaba preparado para la misma, Samantha decidió que igual se llevaría a cabo esa noche, así que después de ver a su hijo y asegurarse que estaba bien, se fue a ver a Erskin quien ya podía levantarse y tenía un mejor aspecto.

• Estoy muy agradecida – le dijo la chica – pero no quiero seguir incomodándolos y creo que ya puedo regresar a mi casa
• No nos incomodas, y aunque entiendo que quieras volver, espero que por lo menos te quedes hasta mañana para que nos acompañes esta noche
• Nadie puede decirle que no a Sam – dijo Nat que estaba en ese momento con Erskin
• Y no lo haré – dijo la elfa, después de lo cual Sam se despidió y se marchó
• ¿En verdad quieres regresar? – le preguntó Nat a la chica una vez que estuvieron solos
• Es lo que corresponde, Nat
• Pero no quieres – insistió él y ella bajó la cabeza – ¡Ey! No tienes por qué sentirte mal, yo te entiendo, porque a pesar de que sigo amando a mi familia, ahora me siento como si…
• Como si no pertenecieras aquí – completó ella
• No exactamente, es solo que es… extraño
• ¿Y cómo le ha ido a Iker? – preguntó ella cambiando de tema para no hacer sentir mal a Nat
• En conjunto no tan mal – y procedió a hacerle un resumen de lo acontecido hasta la pasada madrugada
• Pero está bien ¿no?
• Fuera del tiempo que estuvo inconsciente, puede decirse que está perfectamente. Quien tenía mal aspecto era Izek, pero ya está como si nada hubiese ocurrido
• No entiendo por qué aún está aquí
• Supongo que por alguna clase de lealtad algo extraña
• ¿No has considerado que podría estar espiándolos?
• No
• ¿Por qué?
• No lo sé, pero estoy seguro que no es así

Erskin no insistió y bajaron a desayunar. Cuando Sam bajó, se encontró a Elijah paseándose de un lado a otro y diciendo cualquier cantidad de barbaridades.

• Eli…
• ¿Sabes que papá es sumamente desconsiderado?

Aquello extrañó a Samantha, pero miró a Brendan que le hizo un gesto negativo. Aquello no le decía mucho a Samantha, pero cuando iba a preguntarle a Elijah qué era lo que estaba sucediendo, hizo acto de presencia Lizzy.

• ¡Vaya! Hasta que por fin te dignas aparecer
• Eli
• Ahora no, madre. Esta señorita y yo, tenemos una conversación pendiente
• Al menos déjame saludar y…
• Eso lo puedes hacer después – dijo y siguió tirando de ella
• Elijah Daniel – escucharon y todos se giraron a ver a Mael, pero Elijah hizo un gesto de fastidio – Suéltala
• Padre, puedo entender que mientras estuve tan inconvenientemente dormido, sucedieron ciertas cosas de las que no estoy al tanto, aunque tuve oportunidad de ver alguna de ellas, pero como comprenderás o quizá no, ahora Lizzy me debe algunas explicaciones
• No te debe nada, Elijah, así que vas a soltarla ahora mismo

Era posible que Elijah no hubiese crecido entre los miembros de su raza, pero estaba bastante bien informado, y aunque no hubiese sido así, lo que sí sabía, como lo sabían todos, era lo que significaba el halo dorado alrededor de los ojos de un berserker.

• Esto debe ser una broma – dijo – Es absurdo que pienses cualquier necedad con respecto a nosotros y no lo estás haciendo ¿no?
• Lo único que estoy pensando, es que si no la sueltas ahora mismo…
• Mael – dijo Sam interponiéndose
• A un lado, mamá – dijo Elijah que había soltado a Lizzy y ahora estaba frente a su padre – Por lo que vi, supongo que las cosas entre ustedes se arreglaron y como dijo mamá, sin que yo tuviese que hacer nada, pero quiero suponer que no has olvidado que ella es como mi hermana y que solo quiero hablar con ella, papá

Brendan que conocía bien a Lizzy, en cuanto Elijah la había soltado, la había sujetado él y le tenía la mano en la boca, de modo que Mael desplazó su ira hacia su ahijado.

• ¿Acaso quieres asfixiarla, Brendan Iván?

Si bien todos habían escuchado acerca de lo problemático que era el amor para los berserker, de lo que no habían tenido oportunidad era de verlo, y en vista de los hechos que estaban presenciando, les quedó claro que aquella era una cuestión en verdad problemática.

• Bien, si ahora vas a convertirte en un maniático egoísta que va a impedirle a su propia familia acercársele, no te auguro un futuro muy feliz, padre

Dicho esto, desapareció a toda velocidad y Brendan encontró seguro soltar a Lizzy para irse tras Elijah.

• Mael – dijeron Lizzy y Sam al mismo tiempo