Arzhvael (libro 11. La ira de los Dioses)

Cap. 31 Aliados y enemigos

 

Nominalmente, Garlan McEwan era el comandante en jefe del grupo especializado de arzhaelíes que se ocupaba de la investigación de la secta de los locos peligrosos que perseguían a Samantha, pero era Kenneth McKenzie quien se mantenía en estrecho contacto con el informante. Frieg Lery.

En algún momento, Frieg había comprendido el error en el que había incurrido tanto su padre como los que pensaban como él, pero entenderlo no hacía posible que se desligase de ellos, algo que ya había probado con estrepitoso fracaso, pues cuando lo intentó, su propio padre lo encerró y estuvo torturándolo hasta casi hacerlo tomar la decisión de abandonar su materia; y al final, después de amenazarlo con que si aquello  se repetía, quien estaría en aquella situación sería Eved, y de asegurarse que había comprendido el mensaje, aun lo mantuvo encerrado un buen tiempo más antes de dejarlo salir.

Aquella traumática experiencia sumada al convencimiento del error en el que estaban aquellos sujetos, llevó a Frieg a tomar una decisión basada en dos clases diferentes de amor; uno era el amor que le profesaba a su hijo, y el otro, el que tanto le había costado reconocer que sentía por Samantha, de modo que, si bien sabía que nunca podría tenerla, empeñaría su vida en proteger la suya.

Así era como había establecido contacto con Kenny, y luego de esporádicos, pero verídicos informes, éste había comenzado a confiar en él, y finalmente le habían ofrecido protección para que abandonase aquel mundo, pero sabiendo mejor que ellos no solo lo difícil, sino casi imposible de hacer aquello sin poner en peligro la vida de su hijo, declinó la oferta, pero les propuso otra, trabajar para ellos de forma encubierta.

Aunque Giulian no podía quererlo menos, por razones obvias, seguía siendo un hombre honesto y cumplió con advertirle el enorme peligro al que se exponía, porque si lo descubrían, iban a matarlo y ellos no tendrían prácticamente ninguna oportunidad para evitarlo, pero, aun así, Frieg insistió y terminaron por aceptar no solo la propuesta, sino las dos condiciones que puso Frieg. La primera, que Samantha no debía enterarse, algo que nadie entendía, pero que a Giulian le parecía excelente; y la segunda, que si a él le sucedía algo bien fuese producto de algún enfrentamiento o por ser descubierto, protegerían a toda costa la vida de Eved, y aunque esto sí lo entendían todos y dieron su palabra en aquel sentido, quien se comprometió de manera personal, fue Kenny.  Después que todo quedó arreglado, había que prepararlo y Frieg recibiría un duro y furtivo entrenamiento, pues dada la naturaleza y las condiciones del trabajo que desempeñaría, poquísimas personas estaban al tanto, aunque esto incluía lógicamente, a los miembros del concejo arzhaelí. Aquello era todo lo que podían hacer en beneficio de su seguridad, pero Frieg casi se arrepiente de haber aceptado, porque si en los entrenamientos con Giulian y Dan, pensó que aquel par estaba tan loco como todos decían, cuando le tocó con Garlan, pensó que el muy cretino les ahorraría el trabajo a los desquiciados a los que iba a espiar, pues se convenció que quería matarlo, pero cuando escuchó a Jonathan burlarse y comentar lo que aquel infeliz le había hecho a Samantha, quien intentó matar a Garlan fue él y casi termina muerto lo mismo, porque Garlan estaba a años luz de él en habilidad e instinto, pues era un arzhaelí mientras que Frieg no.

De aquel modo habían llegado a la presente fecha, con Lery arriesgando el cuello para espiar a los miembros de la secta y hacerles llegar la información a los arzhaelíes, pero aquel día cuando regresaron de Lev, se encontraron a Delos y a Waleska muy alterados, pues como Frieg no había podido contactar a Kenny, se había puesto en comunicación con Zimmerman que lo había hecho a su vez con Delos, pero no era el mensaje de Frieg lo que los tenía tan alterados, sino el mensaje que recibió Waleska y del que se enterarían un poco después.

  • Bien, ya estamos casi todos – dijo Iván, pues faltaba Mael
  • Lery nos advierte que estos indeseables planean algo realmente grande para Valborgsaften, algo no muy novedoso, la peligrosa novedad es que lo están incluyendo en ello, de modo que si me preguntan, es hora de que lo saquemos de allí tanto si quiere como si no
  • No es que en algún momento haya estado en la mejor posición desde que todo esto comenzó, pero a qué obedece tu énfasis –  intervino Alaric
  • A que en esta ocasión sí van a matarlo, porque también le dijo a Zimmerman que planean, y como es habitual, varios rituales en distintos puntos, pero eso solo es distracción, porque saben que los estamos vigilando y que acudiremos a todos, pero en esta oportunidad el objetivo es que tengamos nuestras fuerzas divididas para ellos ir por Samantha, y antes de que digas – advirtió mirando a Giulian – que no pueden saber a qué punto acudirá ella, tendrán a alguien en cada grupo, cuya única misión es estar atento a su aparición para hacerse cargo

Como cabría esperar, las reacciones de Giulian, Garlan y los Douglas no se hicieron esperar, así que luego de calmarlos, fue Philip quien se dirigió a Delos.

  • ¿Qué tiene que ver eso con la inminente muerte de Lery?
  • Es necio que lo preguntes, Dubois – dijo Dan en tono ácido pues aún estaba furioso – Todos sabemos que Lery suspira por los huesos de mi hija y se hará matar antes de permitir que alguno de esos desgraciados se le acerque




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