Si bien Alaric y la familia de Garlan habían estado muy preocupados por la actitud de este después de la visita de Gema, e incluso Alaric había estado hostigando a Armel para que hiciese algo por su amigo, aunque Philip opinaba que no se podía hacer nada por aquella cabeza, cuando finalmente Alaric había arrastrado a Armel a ver a Garlan, se encontraron con los parientes de éste en estado de angustia.
No obstante, no se quedó a esperar por una respuesta, de modo que Armel se disculpó con los McEwan y también se marchó.
Alaric inició una loca carrera por las propiedades de Garlan, pero como no lo encontró en ninguna de ellas, regresó a Arx con la intención de pedir a Iván que organizase un equipo de búsqueda, pero para su sorpresa, Garlan estaba en el patio haciéndoles la vida miserable a unos krigers.
Alaric era normalmente ecuánime y ciertamente no era de la clase que iba por ahí perdiendo la perspectiva por cualquier cosa, de modo que intentó tranquilizarse antes de intentarlo de otra manera.
Alaric lo vio alejarse y por algún extraño motivo se sintió… ¿desplazado? Philip y Armel que habían estado observando a cierta distancia, se acercaron en cuanto Garlan se alejó.
Dijeran lo que dijeran aquellos dos, Alaric no estaba para nada convencido y seguiría muy preocupado. Tal y como había dicho Philip, ellos habían conocido a Garlan casi toda la vida, pero en su caso, desde los siete años, Alaric casi no podía recordar un solo momento en el que no estuviesen juntos, porque incluso durante las vacaciones escolares y exceptuando la primera, todas las demás o bien Alaric iba a Blairhall, o Garlan a Baradwyss, y cuando Ysandar había pedido a Ysberyr que enviase a su nieto en unas vacaciones, el muchachito se había negado si no podía llevar a su amigo. Más adelante y cuando ingresaron a la Orden, ambos estuvieron a punto de morir siendo krigers, porque no se suponía que se metiesen en los líos que se metían atacando a los hombres de Nurión, y si bien no hicieron tanto ruido como los Cornwall, los Natchzhrer, Amy y Dan, fue más porque Nurión no los perseguía a ellos, pero no por no haber participado activamente en fastidiarle las cosas, lo que al final les valió su rapidísimo ascenso a arzhaelíes, algo que a Armel y a Philip les tomaría alrededor de cinco años más. Sin embargo, Eowaz al final había terminado por encerrarlos en Arx al igual que a Vladimir, pues estaba seguro que iban a perder sus alocadas cabezas quién sabía en qué desquiciada y no autorizada misión y no solo ellos, porque siempre terminaban por arrastrar al bueno de Armel y al despistado Philip.
Alaric había hecho este apresurado repaso que lógicamente incluía la alocada vida amorosa de Garlan. Si bien a Alaric le gustaban todas, se había sentido más atraído por algunas chicas más que por otras, así que en esas ocasiones, Garlan le hacía la vida miserable; fastidió a Armel tanto como pudo debido a que su formal amigo, solo había tenido dos relaciones serias durante todo su período escolar, y en el caso de Philip había sido aún peor, porque Philip era perseguido por las chicas que Garlan llamaba cursimente románticas, pero como Philip era distraído, siempre demoraba un poco en notarlo, de manera que Garlan lo molestaba hasta el agotamiento por ello, pero cuando Philip se enamoró de Denisse el asunto empeoró muchísimo, pues Garlan le hizo la vida simplemente miserable, y aunque Denisse odiaba a los gemelos Cornwall por lo sucedido el día de la despedida de soltero, Garlan sin duda estaba en aquella lista y nunca pudo ni siquiera entrar a la casa de su amigo una vez que este se casó, pues la única vez que lo intentó con motivo del cumpleaños de Philip, Denisse le lanzó tantos conjuros como recordó y de no haber sido por la velocidad tanto de Alaric como del mismo Garlan, lo habría enviado al hospital. De modo que no había nadie en la Orden que no supiese lo que Garlan opinaba de aquella clase de amor. Todo este repaso llevó a Alaric a cuestionarse si no estaría terriblemente equivocado con relación a lo que pensaba, y si Garlan en realidad solo quería a Gema como siempre habían pensado, es decir, como a una hija, pero pronto iba a cambiar de opinión.
Editado: 16.11.2024