Cap. 10 Clever House
             
Cuando Delos y Dorila llegaron a Clever House, ya todos los Arzhaelíes estaban allí y los esperaban.
	- ¿Qué sucedió? - preguntó Eowaz - ¿Por qué tardaron tanto?
 
	- El secretario del Consejo Escolar insistió en hacer un registro completo de Develieng - contestó Delos - No le entusiasmaba mucho la idea de presentarse ante sus jefes sin los niños.
 
	- ¿Y ustedes? - preguntó Dorila - ¿Qué fue lo que sucedió?
 
Les hicieron un resumen de lo acontecido en la reunión con el Consejo de Estado incluido el violento desenlace.
	- ¿Crees que Agnan sea uno de los suyos? - preguntó Delos
 
	- No, por el momento me inclino a pensar que actúa convencido del asunto.
 
	- Estúpido infeliz, pero no se podía esperar mucho, nunca fue muy brillante en realidad.
 
	- ¿Qué sucederá ahora? - preguntó Dorila
 
	- En breve seré declarado oficialmente un fugitivo de la justicia - dijo Iván
 
	- Pero eso sería…
 
	- Eso es justamente lo que va a suceder - la interrumpió Leomer - porque el no presentarse a la audiencia es un desacato, de modo que ordenaran su captura.
 
	- La de todos en realidad - agregó Vlad - después del numerito que montamos en la sala del Consejo, no nos querrán mucho más.
 
	- ¿Qué hicieron exactamente? - quiso saber Dorila
 
	- Aparte de atacar a los nuevos guardianes… - comenzó Peter
 
	- … ocasionar un violento temblor… - continuó Eve
 
	- … hacer que se desprendiera el techo…  - dijo Vlad
 
	- … y desaparecer ante sus narices, no mucho más - finalizó Giulian
 
	- Tienes razón, Cornwall,  no nos querrán mucho más ahora de lo que nos querían antes ¿No podían simplemente desaparecer? – preguntó Delos
 
	- Eso no habría sido divertido – contestó Giulian
 
	- Lo que entiendes por diversión, normalmente resulta peligroso ¿sabías? - dijo Dorila
 
	- Y hay quien lo recuerda muy bien - agregó Delos - Fysisk se puso pesado.
 
	- ¡Ja! Siempre ha sido un pesado - se burló Eve - Nunca le sentó bien que Daniel lo superase en el Vliegend.
 
	- Pues hoy vociferaba que los niños no pueden negar su sangre, y aunque en principio…
 
	- Cierra la boca, Delos - le ordenó Giulian - eso suponiendo que desees conservar el aspecto que tienes.
 
	- Señores por favor, no empiecen - pidió Eowaz que había estado hablando con Leomer
 
	- Por cierto - dijo Dorila - ¿Los chicos llegaron bien?
 
	- Aún no han llegado - informó Leomer
 
	- ¿Qué? - preguntaron Delos y Dorila al mismo tiempo - Pero si salieron hace más de dos horas - finalizó Delos
 
	- Verás genio - dijo Giulian - no es tan fácil salir de Develieng ¿sabías?
 
	- Pero tú dijiste que se podía - dijo Dorila
 
	- Y se puede, solo que toma un poco más de tiempo que viajar por el Dver, porque desplazarse por el bosque del lado Oeste es algo no tan…
 
	- ¿El Bosque…? - comenzó Delos, pero como de costumbre se quedaba sin palabras - ¡Estás loco! - logró finalizar
 
	- Esa no es una gran novedad para ti, en cualquier caso siempre has sostenido eso.
 
	- ¿Eowaz? - se volvió Dorila horrorizada
 
	- ¡Seis niños… seis niños y un Arzhaelí en ese lugar! - exclamó Delos - ¡En esta ocasión te has superado a ti mismo, infeliz! - y volviéndose hacia Vlad - ¿Y tú decías que yo era inadecuado para velar por la seguridad de los niños?
 
	- En realidad lo sigo pensando - aseguró Vlad con toda tranquilidad
 
	- Si serás desvergonzado.
 
Eowaz y Leomer se miraron y menaron la cabeza con resignación, aquellos sujetos eran unos de los mejores Arzhaelíes que había tenido la Orden, pero definitivamente nunca crecerían.
	- Iván  ¿Cómo es posible que estés tan tranquilo? – preguntó –  Este imbécil ha puesto la vida de tu hijo, en peligro.
 
	- Ya tú te preocupas lo suficiente - contestó Iván con fastidio
 
	- Esto es…
 
Pero quedó repentinamente interrumpida cuando todos, ella incluida, sintieron la presencia. Unos segundos después aparecieron Jonathan y los niños y todos se abalanzaron hacia ellos.
	- ¡Bien hecho! - exclamaron los gemelos - ¿Lo ves? - preguntó Giulian mirando a Delos
 
Sin embargo, Eve y Dorila se habían centrado en Mael y en Jonathan al ver al chico todo cubierto de sangre y la evidente herida del Arzhaelí.
	- ¿Estás herido? - preguntó Eve a Mael
 
	- ¿Qué sucedió? – preguntó a su vez Peter al ver el brazo de su hermano
 
	- ¿Por qué tardaron tanto? - quiso saber Dorila
 
	- Esperen, esperen – los detuvo Danny - uno a la vez
 
	- ¿Jonathan? - preguntó Eowaz
 
	- Tuvimos algunos inconvenientes, señor, pero descuiden, Mael no está herido y esto no es grave  --  concluyó señalando su brazo
 
	- De acuerdo - aceptó Eowaz - siéntense y dígannos qué sucedió.