Cap. 37 Búsqueda

En cuanto los arzhaelíes salieron, Iwerd se puso en marcha y ellos lo siguieron. Sin embargo, aquel primer rastro los había conducido a un lugar desértico, y aunque comenzaron a rastrear la zona en busca de construcciones ocultas o subterráneas, no hallaron nada, pero incluso antes de darse por vencidos, Iwerd ya había localizado otro rastro y se lanzaron en pos de él.

En esa situación estuvieron tres días seguidos, al final de los cuales estaban agotados, habían pasado por todos los estados de ánimo, la furia, la frustración y el dolor, y lo que empeoró en forma notable toda la situación fueron dos cosas. La primera, que en dos de los lugares a donde los habían conducido los rastros, habían hallado primero la chaqueta de Kenny y luego la Skik de Sam. Y la segunda, que, entre un lugar y otro, Mael había hecho viajes relámpago a Averdeen para ver a Elijah, pero el niño seguía inconsciente. Al final del segundo día, Mael se había llevado a Daira y después que ella lo examinó, dijo que no había aparente motivo para aquella prolongada pérdida de consciencia, algo que ya Mael sabía, porque estaba seguro que Sam donde quiera que estuviese seguía inconsciente y eso era lo que tenía a su hijo en aquel estado. Daira le colocó una vía para proporcionarle un sustento básico, ya que no se estaba alimentando y volvieron a partir.

Tuvieron algunos encuentros poco agradables con grupos Nemhains, pero los mismos se caracterizaron por la extrema violencia con la que fueron exterminados. Después que apresaban a unos cuantos y Armel, Iván, Danny o Jonathan irrumpían sin ninguna consideración en los pensamientos de los mismos y no encontraban nada útil o que los condujera a Sam, simplemente los mataban a menos que fuesen realmente humanos, en cuyo caso eran enviados a Fangelsi.

Al final del séptimo día, Eowaz les envió un mensaje y todos fueron a la sede, pero apenas llegaron Amy perdió el conocimiento, Elar cayó extenuada, aunque conservó la consciencia, y Daira que parecía la más fuerte de las mayores, estaba pálida y ojerosa. Aderyn apenas si podía tenerse en pie, pero se negaba a detenerse, y Diandra, aunque lucía igual que Daira, tampoco tenía ninguna intención de detenerse.

En el caso de los hombres, y aunque era evidente para Eowaz que el agotamiento y el sufrimiento había causado estragos en todos ellos, al menos físicamente estaban en mejores condiciones que las arzhaelíes.

• ¿Qué sucede Eowaz?  --  preguntó Iván después que se hicieron cargo de Amy y de Elar, y que la primera había recuperado el conocimiento
• En primera instancia quería informarles que hemos estado enfrentando diversos ataques, en apariencia son blancos aleatorios y que no obedecen a ningún fin particular, pero que han causado considerables daños.
• ¿Tenemos muchos heridos?  --  preguntó Daira
• Algunos en el caso de los miembros de la Orden, y muchos firbolgs. Suponemos que todo esto forma parte del plan desestabilizador de Mikael, y sabiendo como sabe que ustedes están buscando a Samantha y a Kenneth, ha aprovechado la situación para sembrar el caos a gran escala. Peter está enfrentando una de las peores crisis de su vida a nivel político y ya la comunidad comienza a pedir el cambio de autoridades. Ayer El Heraldo publicó un comunicado firmado por algunos miembros destacados de la vida pública, donde piden en forma muy insistente que se convoquen nuevas elecciones.
• Con todo respeto señor, nosotros no somos políticos  --  dijo Garlan  --  y aunque lamento mucho que Peter McKenzie esté pasando por un mal momento, no veo por qué tenemos que interrumpir lo que estamos haciendo por esto.
• Y ciertamente papá está preparado para hacer frente a las crisis políticas que, como acaba de decir McEwan, no es lo nuestro – agregó Jonathan que había perdido su habitual talante alegre
• No se trata de interrumpirlo  --  dijo Eowaz con paciencia e ignorando el comentario de Jonathan  -- sino de que estén al tanto, porque si bien primero se enfocaron en atacar al Concejo de Estado, ahora vienen por nosotros. Ayer salió el comunicado que les mencioné, pero hoy apareció uno que cuestionaba el buen juicio del Concejo al habernos confiado de nuevo la seguridad. 
• ¡Son unos imbéciles, a tiempo completo!  --  vociferó Jonathan
• No nos corresponde a nosotros juzgar Jonathan, solo quería que estuviesen al tanto de los posibles problemas con los que pueden encontrarse si la masa comienza a hacerse eco de estas protestas.
• No creo que nadie tenga muchas ganas de enfrentarse a un arzhaelí  --  dijo Dan
• Y peor para el imbécil que lo haga, porque no me siento especialmente inclinado a tener consideración con nadie  --  acotó el normalmente simpático Alaric que en verdad estaba de un humor asesino
• Señor  --  intervino Mael  --  al igual que Garlan lamento mucho lo que está sucediendo y le agradezco que nos haya puesto al tanto, pero siendo que no podemos hacer nada por ello y si no tiene usted objeciones, al menos yo volveré a lo que estaba haciendo.
• Hay una cosa más  --  dijo Eowaz  --  entiendo la angustia y la preocupación de todos, porque también yo lo estoy, pero si no se toman un descanso, en breve ninguno de ustedes podrá hacer nada  --  y miró a Amy, a Elar y a Aderyn que eran las que peor lucían  --  Sugiero por el bien tanto de ustedes como por el de Samantha y Kenneth, que se organicen en grupos y así todos puedan descansar un poco.