De ladrón a Ceniciento (3ra parte)

Cuando terminaron los respectivos escaneos, a los que al parecer ambos ya se estaban acostumbrando, los dos salieron del lugar para dirigirse al salón donde sería la fiesta. Esta vez iban en otro auto que más bien era una limusina con chofer incluido.

- Ahora que lo pienso tú ya has creado todo lo que necesitan saber de mi, pero yo no sé nada de ti - comentó Kader para llenar el silencio - creo que deberías decirme lo básico para no dejarnos en evidencia -

- Supongo que tienes razón - en realidad no era algo que a ella le importara, pero no estaba de más prevenir - ¿Qué quieres que te diga? -

- Antes que nada, tu edad - le pidió

- Cumplí 23 el 15 de abril - respondió

- Tu lugar favorito en la tierra - se le ocurrió de pronto

- La biblioteca de mi casa - respondió con rapidez

- ¿En serio, te gusta leer? - no imaginaba a alguien como ella metida en los libros

- Que sea hermosa no significa que sea estúpida - dijo arrogante - deberías quitarte ese estereotipo de que las rubias estamos huecas de la cabeza ¿Algo más? -

- ¿Por qué quisiste ser modelo? - pregunto después de pensar un poco

- Mi madre lo era antes de tenernos a mi hermana y a mi y como Elisa fue la elegida en seguir los pasos de papá yo debía seguir los de mamá - le respondió con calma

- ¿Osea que fue decisión de ella? - comentó confundido

- Algo así, yo era muy niña cuando empecé a modelar, demasiado como para comprender lo que eso implicaba - le aclaro - pero con el tiempo le fui tomando gusto, hasta que se volvió parte de mi, no me quejo en realidad. Siguiente pregunta -

- ¡Oh ya sé! - soltó emocionado - persona en la que más confíes y que no sea de tu familia -

- Minalou - contestó con una gran sonrisa

- ¿Quien? - nunca había escuchado ese nombre

- Así le digo a mi nana - aclaró con una ligera risa - se llama Lilou, pero cuando era niña me costaba pronunciarlo y siempre le estaba diciendo de distintas maneras. Hasta que un día le dije Minalou, que es una abreviación de Mi nana Lilou y se le quedó. Aunque ahora que lo pienso hace mucho que no hablo con ella, a pesar de que aún trabaja con nosotros -

Ante su comentario sus ojos se llenaron de nostalgia, mientras trataba de recordar todos esos buenos momentos que disfrutó a lado de su vieja nana y que ahora se sentían tan lejanos. Kader notó su tristeza y añoranza, ver ese lado de ella lo hizo verla más humana y eso le agrado. Lo que no le gusto es que fuera de esa manera, así que trato de cambiar el tema.

- ¿Cual es tu más grande sueño? - le pregunto en un intento de continuar con la conversación - además de querer quitarle el novio a tu hermana -

Bueno, tal vez no era el mejor animando a las personas, sobre todo si no las conocía, pero al menos lo intentó. Maia en cambio no se percató de ello, pues su mente se detuvo ante la extraña pregunta. ¿Cuál era su sueño, que podría desear alguien que lo tenía todo? Por más que lo intentó no encontraba una respuesta y eso la puso incómoda.

- Creí que habías dicho que querías saber lo básico y hasta ahora lo único básico que me has preguntado es mi edad - ignoró su pregunta - ¿Por qué no me preguntas cosas como mi color favorito, la música que escucho, o que comida me gusta? -

- Porque esas cosas no se preguntan, se averiguan - le respondió despreocupado - los gustos se observan, pero el interior se escucha. Tus preferencias las puede conocer quien sea que desee saberlo, solo tiene que verte por fuera y eso está bien. Pero no cualquiera se atreve a ver lo que eres por dentro y que lo hagan vale mucho más -

- Eso sonó muy profundo, pero no creo que puedas saber algo de alguien con solo verlo - dijo por decir

- Tienes razón, además ¿Que puedo saber yo? Si solo te he visto tres días y lo único que sé de tus gustos es que prefieres los colores claros, sobre todo en tonos pasteles, mientras que los oscuros prefieres combinarlos en una menor cantidad. Te encanta comer dulces, principalmente los que están hechos a base de dulce de leche o caramelo. Eso y que eres increíblemente organizada y planificadora en cada uno de tus pasos - la miró de reojo para ver su reacción

- ¿Cómo es que sabes eso? - pregunto sorprendida, pues había acertado

- Por qué te he visto, en todas estas veces que nos hemos encontrado solo te he visto usar colores claros, en la cafetería siempre pides un extraño postre con caramelo extra y un chocolate caliente con vainilla, al que todavía le agregas más azúcar y siempre tienes todo bien planeado para todo, empezando por este plan tuyo en el que a la fuerza estoy involucrado - enumeró cada una de las cosas que ha visto en ella

Maia no se atrevió a decir nada más, y es que le sorprendía que en solo tres días hubiera podido notar esas cosas. Tal vez eran detalles insignificantes, pero que lo supiera alguien a quien se supone que no le agradas ya era otra cosa. Bien dicen que al enemigo había que conocerlo de cerca, pero eso ya era excesivo, al menos para ella.

Cuando llegaron a la fiesta Kader fue el primero en salir del auto y como él caballero que fingía ser le tendió su mano a Maia para que ella pudiera salir. Al hacerlo los flash's no tardaron en llegar y no era para menos, toda la prensa quería ver a la famosa enjil daanav y a su misterioso acompañante. El cual para su pena o gusto era quien estaba robando toda la atención. Y las preguntas no tardaron en llegar, ¿Quién es él? ¿Qué relación tiene con la bella modelo? ¿Dónde se conocieron? ¿A qué se dedicaba? Esas eran pocas de las tantas preguntas que los periodistas hacían deseando obtener la exclusiva.

Con algo de dificultad lograron entrar al salón donde se llevaba a cabo la fiesta y la cual solo mostraba riqueza y egocentrismo por donde quiera que se veía.  Algunas veces se detuvieron para saludar a algunos de los presentes, quienes no perdían la oportunidad de querer averiguar todo lo que fuera posible del misterioso compañero de la modelo. Ante esa situación ambos supieron actuar muy bien, en todo momento se tenían en contacto físico, ya sea con los brazos entrelazados, las manos tomadas, o incluso abrazados por los hombros.