Asalto al Corazón

La verdad que te oculté

- Me abandonaron - aseguró más para él que para sus acompañantes

- Sé que debes estar muy dolido por cómo se dieron las cosas - le habló Zara con pena - pero ahora que estás aquí es momento de que sepas como se dieron las cosas -

Los cuatro tomaron asiento una pareja en frente de la otra. Y después de unos segundos que a todos les parecieron eternos Zara volvió a hablar.

- Tu padre era un gran chico, pero con una vida muy difícil - comenzó su relato - solo tenía 10 años cuando sus padres murieron en un accidente de tráfico, en ese entonces ellos eran nuestros vecinos y esa noche sus padres nos pidieron cuidar de él y me alegra que así haya sido ya que eso salvó su vida. Tus abuelos paternos eran hijos únicos al igual que tu padre, por lo que Franco no tenía a nadie a quien acudir, por eso nosotros decidimos quedarnos con él y criarlo como si fuero nuestro hijo -

- Al principio todo estuvo bien - continuó Seb - pero al paso de los años las cosas se complicaron, Anahela se enamoró de él y Franco para no causarle problemas con nosotros decidió huir de casa. Eso lo llevó a tener malas compañías que lo llevaron a meterse en los peores vicios. Mi pequeña Anahela lo amaba tanto que en un intento de conquistar su corazón también se metió en las drogas. Nadie lo sabia, ni siquiera habíamos vuelto a ver a Franco, no fue hasta que una noche nos llamaron del hospital avisándonos que nuestra hija había tenido una amenaza de aborto por una sobredosis -

- ¿Ellos querían abortarme? - pregunto dolido

- No mi niño, ninguno de los dos sabía que tú existías hasta ese mismo momento - Zara se apresuró a aclarar - y desde ese instante te amaron al grado de que hicieron todo lo que pudieron para dejar esa vida y convertirse en buenos padres para ti. Pero su pasado no iba a dejarlos tan fácilmente, aquellas personas que los habían metido en esa vida los querían de vuelta, sobre todo a tu padre. Y cuando él se negó le juraron que lo harían pagar, al principio sólo fueron amenazas, pero después de tu nacimiento estas se convirtieron en hechos. Muchas veces intentaron usarte para hacerles daño, después de todo tú eras su mayor debilidad. Tus padres estaban conscientes de eso y sabían que no podrían protegerte ¡¿Cómo hacerlo si Franco solo tenía 18 años y mi Anahela apenas 16? ¡Solo eran unos niños! -

- Nosotros también buscábamos la forma de ayudarlos, ¿Pero que pueden hacer un par de viejos contra la mafia parisina? - cuestionó Seb - al final fueron ellos los que tomaron la decisión. Sabían que mientras estuvieras a su lado tu vida correría peligro, todo estaba claro, tenían que dejarte ir -

- ¿En la banca de un parque durante la madrugada? - cuestionó expectante

- ¿Alguna vez escuchaste el relato del bebé Moisés?  - le preguntó su abuelo, a lo que él negó en silencio - hace muchos siglos un matrimonio pasó por lo mismo que tus padres, personas crueles buscaban matar a todo recién nacido que encontrarán. La madre de Moisés solo pensaba en la forma de proteger a su pequeño y en su posición lo único que pudo hacer fue dejarlo ir. Abandonarlo, como tú dices. Fabricó una pequeña canasta, recostó en ella a su hijo y lo posó sobre el río Nilo, pero no por eso se deslindó de su bienestar, más bien procuro que terminará en buenas manos y así fue. Terminó siendo el hijo adoptivo de la hija del Faraón. Tal vez contigo las cosas no salieron tan bien, pero ellos buscaron que estuvieras en el mejor lugar -

- El orfanato dónde te llevaron era de unos amigos de tus abuelos paternos - comentó su abuela - ellos se ofrecieron a ayudarnos, sabíamos que si alguno de nosotros te llevábamos directamente no tardarían en encontrarte, por eso aquella noche te cubrieron con periódicos, te llevaron al parque y con todo el dolor de sus corazones te dejaron en esa banca. Más no por eso te abandonaron, esperaron en un lugar oculto hasta ver que nuestros amigos llegaron y te llevaron con ellos. El trato era que te cuidarán hasta que pudieran librarse de esas personas y después volverían por ti. Pero eso jamás pudo ser -

- Pasaron 2 años y tu madre quedó nuevamente embarazada - Seb continúa el relato - intentaron ocultarlo pero no contemplaron que una de sus compañeras de trabajo fuera una informante de la mafia. Una tarde mientras almorzaban le dio a ver un té que contenía cianuro, este le provocó un aborto casi inmediato y a la ves una hemorragia que acabo con su vida -

- Semanas después Franco se dirigió a donde se reunía con estas personas - su voz era casi audible - estaba lleno de odio y dolor. Amaba a mi hija con toda su alma, y al perderla ya no veía una vida dónde ella no estuviera, pero también te tenía a ti, tú eras el único motor que lo motivaba a seguir. Ese mismo motor fue el que le dio el valor necesario para sacrificarse. Sabía que mientras uno de ellos estuviera vivo los peligros seguirían, tanto para ti como para nosotros. Por eso los buscó, sabiendo que sólo encontraría su muerte, y así fue. A la mañana siguiente encontraron su cuerpo inerte, lo habían matado sin piedad -

Para cuando habían terminado de contar la historia, todos ya estaban llorando. El matrimonio por el recuerdo de haber perdido a su hija y a quien habían amado como su hijo, Kader por saber el terrible final que padecieron sus padres y a Maia al ver el dolor del hombre al que amaba.

- ¿Sabes por qué te pusieron Kader? - le preguntó Zara tratando de contener sus sollozos

Kader negó, ocultando el hecho de que a su pensar era una forma para burlarse de él.

- Fue porque tu nacimiento les dio las fuerzas que necesitaban para salir de ese hoyo al que se habían metido - le aclaró - bastó con tenerte entre sus brazos para saber lo que debían hacer por lo que les quedaba de vida. Tú eras su destino y buscaban hacer lo que fuera necesario para que estuvieras bien, así tuvieran que entregar sus vidas -

- Y ahora estás aquí - Seb aún no lo podía creer - convertido en todo un hombre. Cuando los demás se enteren no lo van a creer -




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