Pasaron largos minutos en los que nadie dijo nada, ni siquiera tuvieron ánimos para recoger todo lo que Kader había tirado. Algunos se quedaron de pie con la mirada perdida en un punto de la casa y otros se mantenían caminando de un lado a otro sin lograr entender lo que pasaba. Fue en ese momento cuando la puerta se abrió y dejó ver a June, quien unas horas atrás había salido de la casa.
- Vaya, si que te pegó duro - comentó al ver a Kader en el suelo con la cabeza entre las rodillas
- No estoy de humor para tus bromas y mucho menos para que me digas 'Te lo dije' - le aclaró sin levantar la cabeza
- Tranquilo que no pienso hacer nada de eso - se sentó a su lado - es verdad que Maia nunca fue del todo de mi agrado, pero también estoy consciente de lo que sientes por ella y sería muy cruel de mi parte culparte por algo que no estaba en tu control -
- Si lo estaba, pude haber evitado que esto pasara. Si tan sólo… -
- Culparte no resolverá nada - lo interrumpió - además, no todo puede ser malo. Todo lo que pasa en la vida siempre trae algo bueno, aunque no siempre sea inmediato. ¿No es lo que siempre decía Gillian? -
Kader por fin alzó la mirada al escuchar las palabras de su difunto mejor amigo. Era raro que June lo mencionara, pero escuchar algo que él le diría lo consoló un poco.
- No lo sé June, siento que esta vez perdí más de lo que pude haber ganado - fue sincero
- Vamos hermano, no seas tan pesimista. Es obvio que no será fácil para ti superarlo, pero tirado aquí no conseguirás nada - lo reprendió - anda levántate y vámonos -
- ¿Ir a donde? - preguntó intentando ponerse de pie con las pocas fuerzas que tenía
- Yo que sé, a cualquier lugar en el que puedas despejar la mente y puedas pensar con claridad - sugirió
- No tengo ganas de salir - se negó
- No te estoy preguntando - se desesperó, pero pronto se calmó - aquí lo único que consigues es hundirte más y llevarte a los demás contigo, incluso los niños te miran con miedo. Si en verdad te preocupas por ellos no seas necio y ven conmigo -
- Creo que June tiene razón - lo apoyó Felicíe - tal vez un poco de aire fresco te ayude a sentirte un poco mejor. Desde siempre te has preocupado más por nosotros que por ti mismo, es hora de que te prestes un poco de atención. Así que ve y tomate todo el tiempo que necesites para calmarte -
- Bueno, supongo que tienen razón - aceptó no muy convencido
- ¡Así se habla! - dijo un animado June - ahora ponte de pie y vámonos -
June lo ayudó a pararse y lo fue empujando de la espalda con algo de brusquedad hasta que salieron de la casa. Cada uno se subió a su moto y fueron conduciendo por donde el pelinegro decía. Un tiempo después llegaron a un área que parecía estar bastante solitaria, no se alcanzaban a ver personas por donde pasaban y apenas si se oía algún ruido de lo lejos que estaba de la ciudad. Pero eso no le importó a Kader. Que tan mal estaba que sus sentidos no eran capaces de captar el peligro.
- ¿Qué hacemos hasta acá? - preguntó después de estar un rato caminando
- Ya te dije, la idea es que te relajes y un poco de soledad te va a ayudar - respondió sin detenerse
- Aún así siento que estamos bastante lejos, además no le veo caso a que los dos trajeramos motocicletas - comentó intentando seguir sus pasos - ¿No era mejor que trajeras tu auto? -
- NO… - elevó un poco la voz - es más difícil conducir un auto por estos rumbos y es bueno sentir el aire cuando conduces -
- A Maia le gustaba eso cuando paseábamos en la moto - recordó con nostalgia
- La idea de traerte aquí era que la olvidarás por un momento, no que la pensaras con cada cosa que vieras - lo regañó
- Lo siento pero no puedo evitarlo - se excusó
- Entiendo que te duela, pero tienes que superarlo y centrarte en lo que realmente merece tu atención - habló conteniendo su exasperación - tienes que recordar que antes de la Cobra está el Clan. Fuimos nosotros los que estuvimos siempre para ti, nunca tuvimos a nadie más que a nosotros mismos y no es justo que nos remplazaras por alguien que no lo merece -
- Lo sé, lo sé... -
- ¡No, no lo sabes. Olvidaste que ella era el enemigo, que lo mejor para todos era que te deshicieras de ella apenas tuvieras oportunidad! - le reclamó - pero en vez de eso le abriste las puertas de nuestra casa, la hiciste una de nosotros -
- Lo hice por el bien del Clan, lo sabes bien - se defendió
- Ambos sabemos que eso no es verdad, ¡Lo hiciste por ti, porque estúpidamente creíste que un hombre como tú podías tener a una mujer como ella! - aumentó la velocidad de sus pasos - te dije muchas veces que podíamos defendernos de ella y de cualquiera, pero como siempre no me escuchaste. ¡Tú y Guillian siempre han creído que soy un imbécil, que no hago nada bien! -
- ¡¿Qué tiene que ver Guillian en todo esto?! - lo cuestionó molesto
- TODO ¡¡¿Qué no ves que eres una copia barata de él?!! - se detuvo para enfrentarlo - ¡Siempre creyendote perfecto, culpando a los demás de lo malo que te pasa! Pero jamás te atreves a aceptar lo que haces mal. ¡¡Hoy te hiciste pasar por un mesero, te metiste a la casa de nuestros enemigos, e incluso te dejaste ver por una de ellos!! Todo eso sin pensar en los peligros que tus actos podrían provocar y todo por una mujer -
Aún más molesto se dio la vuelta para retomar su camino, mientras tanto Kader meditaba en todas sus palabras. Fue hasta apenas ese momento que se dio cuenta de un detalle.
- ¿Cómo sabes que hablé con Elisa? - le preguntó escéptico
June volvió a detenerse, esta vez mostrándose nervioso. Sin embargo no dijo nada.
- En ningún momento mencioné eso, tu ni siquiera estabas cuando le dije a los demás lo que había hecho y ahora que lo pienso ¿Dónde estuviste todo el día? - inquirió
- No tengo porque responderte - aclaró seco
- Dime que está pasando - le ordenó
- Sigue caminando Kader, no lo hagas más difícil - fue lo único que dijo volviendo a caminar