Desiciones sabias

- Chicos, no quiero interrumpir su momento de reconciliación - les habló Tessa, quien estaba peleando a pocos metros de ellos - pero necesitamos que ambos se concentren acá -

Ambos sonrieron con pena, pues por un momento habían olvidado que estaban en medio de una balacera.

- Vale vale, ya no nos regañes - se burló Maia, para después hablar por medio del micrófono que su audífono tenía integrado - Cannelle, necesito que me traigas la mochila de primeros auxilios para curar a Kader -

- De acuerdo, voy para allá - le respondió de inmediato - ¡Chicos necesito que me cubran! -

De inmediato todos a su alrededor buscaron protegerla para que pudiera llegar sin ningún rasguño. Pronto se encontró con ellos y junto a Maia curaron sus heridas lo mejor que podían. Cuando terminaron lo jalaron hasta la sombra de un árbol, donde pudiera estar sin peligro de ser atacado.

- Toma esta arma - la Cobra le dio un revólver - necesito que estés muy atento y te protejas lo mejor que puedas -

- Espera ¿A dónde vas? - la detuvo al ver que se ponía de pie

- Tengo que ayudar a los chicos, no puedo dejarlos a su suerte - le explicó

- No, quédate. No quiero que te lastimen - le suplico con temor

- Estaré bien amor, ustedes supieron entrenarme muy bien - buscó calmarlo - además, esto en gran parte es mi culpa y no puedo quedarme de brazos cruzados sabiendo eso -

- Prometeme que te cuidarás - le pidió rendido

- Solo si tú me prometes lo mismo - acordó

Ambos asintieron levemente, para luego volver a besarse. Cuando se separaron Maia se puso de pie y corrió al centro de la batalla disparando a diestra y siniestra, dejando sin vida a algunos del bando contrario. A lo lejos June alcanzó a verla y no dudó en apuntarle a la cabeza. Después de todo, a su parecer, ella era la única culpable de todo lo que estaba pasando, no sólo por haber atacado a su hermano, sino también por el riesgo que corría el Clan en ese momento. Estuvo a punto de dispararle, pero una patada en la espalda desvió la bala. Al girarse vio a Felicíe apuntándole con un arma, y dándole una mirada, más que de desprecio, de decepción. 

- Es increíble que la defiendas aún sabiendo que ella es la culpable de todo lo malo que nos ha pasado - se quejó mientras se levantaba lentamente

- ¿Estás seguro que ella es la causante de esto? - lo cuestionó incrédula - ¡¿En serio lo crees?! -

- ¡Por supuesto que lo creo! - aseguró - ella, Kader, Gillian, todos ustedes provocaron esto. Se acercaron demasiado al enemigo, confiaron en quien no debían y nos orillaron a mi hermano y a mí a hacer esto. ¡Esto es su culpa! -

Ante oírlo hablar así sintió que la rabia cubría todo su cuerpo, y no dudó en golpearlo de nuevo. Esta vez con un puñetazo en la cara. Y ahí inició la pelea entre ambos.

- ¡¿Cómo te atreves a culparnos a nosotros por tu traición?! - le grita entre golpes - ¡¡¿Acaso nosotros te pusimos un arma en la cabeza y te obligamos a vendernos al enemigo, fuimos nosotros los que buscamos a tu hermano para que nos tendiera una trampa?!! Solo puedo decir que tienes razón en algo, confiamos en quien no debíamos, confiamos en ti -

- Por favor Felicíe, no finjas inocencia - intentó tirarla con un par de movimientos rápidos - ustedes nunca confiaron en mí. De haber sido así habría dejado que yo liderara al Clan cuando Guillian murió y en vez de eso pusieron a Kader en su lugar solo porque era su amigo de la infancia, cuando yo había sido parte de los FireFriend desde el principio -

- Así que de eso se trata - razonó Felicíe esquivando los ataques - todo esto por que no eres líder del Clan, por eso te asociaste con el traidor de tu hermano -

- ¡Mi hermano no es ningún traidor!... -

- ¡Claro que lo es, y tú lo sabes! - lo interrumpió - ¿O es que ya olvidaste que intentó matar a Gillian y a Kader? Y no conforme con eso te abandonó apenas tuvo oportunidad -

- Eso no es verdad, Jouna no me abandonó ustedes lo expulsaron - defendió a su hermano

- ¡Porque él nos traicionó! - reclamó - y no sólo a Gillian, Kader o a mi, traicionó a todo el Clan y eso te incluye. Es verdad que nosotros lo exiliamos, pero fue su decisión irse sin ti. Aún sabiendo que eras menor de edad y su única familia prefirió dejarte a expensas de nosotros sabiendo que podíamos hacerte pagar por su error -

- ¡No, no es así! - se alteró - él nunca dudó de que con ustedes estaría seguro y me protegerán, sabía que ninguno de ustedes serían capaces de hacerme daño o fallarme -

- Y aun sabiendo eso tú si nos fallaste a nosotros - le dijo mirándolo con dolor

June pudo sentir que su corazón se estrujaba al oír eso. Y aunque no lo aceptara en voz alta, en el fondo sabía que tenía razón.

- Yo, yo solo quería que me dieran la oportunidad de demostrar el buen líder que podía ser - se excusó

- ¿Y crees que esta es la mejor forma de demostrarlo? - buscó hacerlo entender - solo mira a tu alrededor, esta gente busca exterminarnos y tú les ayudaste a conseguirlo. Y si consigue su objetivo no habrá más Clan que liderar. ¿En verdad valía la pena sacrificar a todos tus amigos por algo así? -

June bajo la mirada cual niño regañado. Sería mentira decir que no estaba consciente de eso, incluso desde el momento en que trazó ese plan con su hermano internamente esperaba que no diera resultados. Y aunque intentó acallar su conciencia sabía que había cometido un grave error al traicionarlos. ¿Pero qué podía hacer? Ya no había forma de remediar su error. Cuando alzó la mirada Felicie esperaba que dijera algo, pero en vez de eso June le apuntó con el arma y sin dudarlo disparó. Felicíe cayó al suelo, segura de que le había disparado a ella, pero pronto vio que no tenía ninguna herida. Cuando se giró pudo ver en el suelo a un hombre del bando enemigo con un disparo en la cabeza. June lo había matado al ver que intentaba atacarla cuando estaba con la guardia baja. La había salvado.