Hugo y Juan salieron de la casa, caminaron en dirección al carro de sus compañeros.
-Algo se está escondiendo - dijo Juan.
-Si, pero lo averiguaremos.
Hugo se acercó a los patrulleros que vigilan la casa a simple vista.
-quiero que vigilen, si sale la chica la siguen, me mantienen informado, mandaré a alguien más tarde para que los reemplace - dijo Hugo.
-Si señor - dijeron los dos patrulleros a tiempo.
Hugo le dio una seña a Juan para que subieran al auto, manejo en silencio, estaciono frente a la estación de policía.
-Necesito varios agentes vigilando la casa, a pie y en auto, consiguelos, que vigilen desde lejos para que no levanten sospechas - le dijo Hugo a Juan.
-Si señor yo me encargo.
-me mantiene informado.
Hugo arrancó y fue hasta el pequeño hotel donde se hospeda, allí en el estacionamiento sacó el celular, marcó el número del ministro de defensa.
-Buenas señor… si tenemos una pista… necesito una orden judicial para revisar una casa… sí señor… listo.
Hugo entró a su habitación, el ministro le dijo que en unos minutos tendría su orden entró y se recostó en la cama, descanso unos segundos, luego fue hasta la muy pequeña cocina que tenía dicha habitación, algo le llamó la atención, en la pequeña nevera había una nota que colgaba por un imán, Hugo la saco de ahi y la miró, estaba toda en blanco a excepción de una carita de feliz, que había sido impresa.
Hugo llamó a un equipo para que revisara la carta, en cuestión de minutos llegaron dos personas a su habitación.
-¿Quiero que revisen esto, huellas, cualquier cosa que nos diga de donde salió.
uno puso la hoja en una bolsa y se la llevo.
-Jefe, huellas.
Hugo mostró sus dedos y le sacaron muestras para eliminarlas de las pruebas que harían, el sujeto miró a toda la habitación.
-Jefe ¿también será necesario investigar la habitación?
-si, encárguense.
Hugo cogió sus llaves y abandonó la habitación, “así que quieres jugar, loco” pensó Hugo, como dijo su compañero si recibía una carta estaba comprobado, era el mismo asesino había vuelto después de doce años.
En el estacionamiento se recostó sobre su auto y marcó a su amigo Cristhian.
-Recibí la carta - dijo Hugo.
-¿enserio? ¿que te escribió?
-Solo mando una cara feliz.
-¿a mano?
-no, creo que es impresa.
-Bien, creo que es el.
-¿Qué tan frecuente recibías las cartas?
-no mucho, sabe encontrar el momento exacto para no levantar sospechas, siempre busca que se rebaje la seguridad o a veces te la manda por otros medios.
-¿qué medios?
-por ahora eso no importa, si es él está queriendo atención, quiere salir en los medios.
-¿debo permitirlo?
-debes darle lo justo, para que sepas el mensaje o lo que quiere y poder tener una pista.
-tenemos una pista, una chica fue vista con los ojos de las chicas, ya obtendré la orden.
-¿una chica?
-si, depende de lo que encontremos, podremos usarla para tal vez negociar con el.
-¿por qué no crees que fue la chica?
-es una niña, no tiene ni 18.
-bueno hubieras empezado por ahí, cuando lo tengas deberás retenerla, tal vez asi le de por entregarse, debe tener algo que ver con el asesino.
-Bien, gracias.
-Mucha suerte, la necesitarás.
Hugo escuchó el ruido de la radio dentro de su coche, entró al auto y en el asiento del conductor escuchó la voz de Juan.
-Detective aquí Juan, cambio.
-aquí estoy, cambio.
-tenemos dos agentes encubiertos a pie cerca a la casa, el auto fue retirado y fue ubicado junto a otros tres en las esquinas de las cuadras de la casa, todo listo con la vigilancia, cambio.
-copiado, arrimo por usted, cambio.
Hugo encendió el vehículo y se puso en marcha hasta la estación de policía, allí vio afuera a Juan esperándolo, este al ver el vehículo parar frente a la estación se subió.
-¿que paso jefe? ¿por qué mandó forenses a su casa?
-apareció una carta en la habitación.
-¿y que decía?
-Solo una cara feliz, se está burlando de nosotros o de mi, pero él no sabe qué sabemos de Samantha.
-¿y la orden?
-No creo que demore mucho.
-¿Alistó el equipo?
-si.
Juan usó el radio de su uniforme para indicar que necesitaba un equipo listo para registrar una casa, mientras que Hugo daba vueltas por el pueblo sin un rumbo definido.
-¿a dónde vamos?
-No lo sé, creo que está entre nosotros, pero creo que una persona nueva destacaría en este pueblo.
-la verdad no se jefe el pueblo ha crecido mucho, eso era antes, que era más pequeño.
-¿Será alguien de la comunidad?
-Podría ser, pero eso no nos ayuda.
Hugo estaba a punto de responder, cuando la radio del coche se escuchó.
-Atención tenemos movimientos en la casa, la puerta se está abriendo lentamente, la chica salió, está mirando a todos lados, empieza a caminar, se aleja de la casa.
-Síguela, desde lejos que no se entere.
-Recibido.
-a dónde vas - dice Hugo para Juan.
-¿vamos?
-aún no - Hugo siente como vibra su celular en el bolsillo, saca el celular y ve la orden que necesitaba, este rápidamente lo envía a la estación - lista la orden que salga el equipo.
-orden a sido enviada, procedan con operativo.
-que esperen mi orden.
-Atención, esperen al objetivo en 100 metros, esperen orden.
-recibido - dijo una voz de la radio de Juan.
-¿por qué esperamos? - preguntó Juan.
-no queremos que Samantha se nos asuste, cuando esté alejada de casa procedemos.
-listo jefe.
-Informen sobre la chica.
-la sigo de lejos, al parecer va en dirección a las afueras, aun seguimos cerca de la casa.
-Infórmame cuando esté a una distancia considerable.
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Editado: 07.05.2023