En la mañana siguiente en la región de Valyria en la ciudad de Dominus Lux, en un edificio imponente enorme completamente de blanco de seis plantas con grandes ventanales, y un gran emblema de forma circular, en el centro estaba un circulo en espiral que representaba el núcleo elemental y a su alrededor estaban los cuatro elementos en perfecta sincronía con cadenas a su alrededor y arriba estaba un casco de guerrero con cuernos que representaba al Lord, estaba hecho de oro y plata, era el emblema que representaba a Dominion.
Todos en Dominion lucia ese tatuaje con gran orgullo, incluso los cuatros grandes generales, quienes estaban reunidos en el gran salón de juntas, en una gran mesa redonda de mármol blanco estaban los cuatro generales reunidos.
El primer general Ranuz Astrus cuádruple supremo, de 20 años con su porte sereno y serio, alto y musculoso con su cabello blanco platinado perfectamente arreglado y sus ojos grises atentos a todo a su alrededor.
De frente a Ranuz, sentada estaba la segunda general Layne Virell cuádruple supremo, 14 años con su estilo tranquilo y relajado, pero atenta como una leona a punta de cazar a su presa, su cabello negro perfectamente atado a una cola alta con varios mechones salidos con intención, sus ojos dorados marrones estaban filosos y su sonrisa arrogante más viva que nunca en su rostro.
Al lado de ella estaba sentada la tercera general Kara Marckri cuádruple avanzado, 18 años, tenía un aire divertido y juguetón estaba tranquilamente relajada, su cabello castaño claro estaba suelto mientras sus ojos color lila estaban mirando con diversión a sus compañeros con una sonrisa pícara.
Al lado de Ranuz estaba sentado el cuarto general Thanus Vicortix cuádruple avanzado, 16 años, estaba completamente serio con el ceño fruncido y con una mueca de fastidio, alto y musculoso, su cabello rojo desarreglado cuidadosamente le daba un aire rebelde de chico malo, sus ojos azules estaban afilados.
Los cuatro generales estaban vestidos con sus uniformes militares impecables de color gris y detalles dorados, en el pecho del uniforme estaba bordado el emblema de Dominion y en sus hombros estaba bordado en dorado los números correspondientes a su rango.
Y en la cabecera de la mesa presidiendo la reunión, estaba la presencia más imponente de toda Elandar, el amo y señor de Dominion y toda la región de Valyria, el Lord Venaris, alto imponente musculoso con su cabello blanco como la nieve hasta los hombros peinado en una media cola y una barbaba de candado pulcra, con sus ojos azules profundos observando a todos los presentes en sumo silencio, su porte era firme y sereno, vestido con su túnica de hombre color azul oscuro con detalles plateados, un pantalón blanco largo y su capa negra con detalles dorados detrás de él.
—Escuchen bien, los cuatro —dijo, con voz firme y cortante—. Tenemos informes confirmados: varias pandillas han comenzado a unirse para destruir Dominion.
Thanus, el más arrogante de todos, soltó una carcajada y apoyó el codo en la mesa.
—Pero mi Lord —dijo despectivo—. Nadie puede contra nosotros, los cuatro juntos somos completamente invencibles, y separados somos increíbles. Y nuestros dos altos mandos son cuádruples nivel supremo con las mejores técnicas mortales, el que se atreva a levantarse contra nosotros, estará muerto antes de siguiera atacar.
–– No seas arrogante––dice Kara con una sonrisa burlona–– por estar así de confiado casi pierdes la vida contra esa pandilla de la región de Novohal, sino fuera porque Ranuz estaba cerca, ahora mismo tendríamos un nuevo cuarto general en esta reunión.
–– Pero ¿qué dices? ––bufo Thanus con los brazos cruzados–– lo tenía todo bajo control, solo estaba utilizando la técnica de Layne, de hacerle creer al enemigo que está ganando para luego atacarlo cuando menos se lo espere.
Layne, imperturbable, ni siquiera le dirigió la mirada. Su tono fue tan afilado como un bisturí.
––Yo lo hago usando la mente no la fuerza bruta, y anticipando cada movimiento de mi rival, no dejando que mi rival se anticipé a mí y vea mis puntos débiles.
––Oye, soy igual de inteligente que tú Layne––Thanus ya estaba fastidiado–– no te creas la gran cosa solo porque eres la estratega suprema.
Layne soltó una breve risa, helada y arrogante.
––¿Inteligente como yo?, ternura…Te gané tres veces seguidas en ajedrez en menos de quince movimientos. Y ni siquiera estaba concentrada.
Thanus se levantó de golpe, su puño retumbó sobre la mesa. —¡Layne, eres una perr…!
—¡Ya basta, Thanus! —tronó Ranuz, que se puso de pie de inmediato con voz de trueno—Respeta a nuestro Lord que nos honra con su presencia y también respeta a Layne, quien es tu superior en jerarquía y en la cadena de mando.
Thanus se sentó bufando, su mirada ardiendo de furia. Kara río por lo bajo, disfrutando de su humillación.
––No se preocupe mi Lord–– dice Ranuz más serio y calmado––no permitiremos que nadie se oponga a nuestro sistema perfecto de pandillas, Dominion y todo el sistema prevalecerá, como lo ha hecho estos 100 años y lo hará por 100 años más.
Lord Venaris asintió con solemnidad–– No esperaba menos. Ranuz… Layne…Ustedes son mis escudos, mis espadas, mi legado más puro. Confío en ustedes sobre todos los demás.
Ambos generales se levantaron como un solo cuerpo. Mano derecha al pecho, izquierda a la espalda, declararon al unísono en perfecta sincronía:
—Por amor y respeto a Dominion, daremos nuestras vidas.
Lord Venaris los observó con orgullo. Había creado monstruos… y le eran completamente leales.
––Muy bien, dejare este asunto en sus manos, sé que lo harán bien, como siempre lo han hecho. ––dice el Lord mientras se levanta, los cuatro generales se levantan al unísono y hacen una leve reverencia al Lord, mientras este se dirige a la puerta y sale, cerrándose la puerta detrás de él.
Editado: 24.08.2025