Epilogo
En este momento solo escuchaba el sonido de la lluvia y la observaba caer a raudales, me abrazo a mí misma para conservar el calor ya que mi ropa mojada solo penetran más el frio, quería detenerla pero no podía, en mi tristeza solo hacía que lloviera más.
¿Cómo llegue a este punto? estoy toda empapada sentada en la parada del bus, mi globo de feliz cumpleaños quería irse volando a pesar de la lluvia, pero la mantengo sujeta a mi mano, este globo es lo único lindo que me paso en este día.
Es cierto que debemos luchar por alcanzar nuestro sueños, esforzarnos y luchar por que se cumplan, ¿pero qué pasa cuando tienden a cumplirse?, ¿cuándo en ellos solo ves un inminente final?, mañana seria el día en que el caos arrasa con el mundo, no sé qué hacer, no sé cómo detenerlo, no sé ni cómo comenzó todo, pero estoy cansada de esta absurda cacería, no puedo soportar perder alguien más, este dolor en mi pecho que sangra cada dia por su ausencia, el que ya no la volveré a ver más, ni escuchar su risa o sus frases, no puedo con este dolor que me asfixia y solo llueve más fuerte.
---Del caos Originario surge la Luz--- susurro esa frase que solo da vueltas en mi cabeza, ¿pero rayos significa eso?
--- ¿Te molesta si te hago compañía?---Volteo al escuchar su voz, mi corazón inmediatamente se acelera solo que ahora no sé si sea bueno o malo, mi cabeza me dice es el culpable, pero al mismo tiempo mi corazón se niega a creerlo.
El no espera mi respuesta tan solo se sienta en la banca a mi derecha y me mira con esos profundos ojos oscuros, no sé lo que siente, nunca puedo sentir sus emociones y eso me confunde, tampoco le puedo pedir que se valla después de todo sigue lloviendo.
---¿Ahora no vas hablarme?--- Me sonríe tímido y mi corazón late más fuerte, yo solo me quedo observando como tonta, reacciona, quizás fue él quien la mato, quizás sea el quien destruya el mundo, con cuidado y bajo mi atenta mirada coloca un mechón de cabello naranja detrás de mi oreja y deja su mano izquierda sujetando mi rostro, lo veo acercarse y yo solo … solo cierro los ojos esperando que el momento por fin ocurra, más sin embargo un estruendoso rayo me hace pegar un brinco dándole en la frente.
Me llevo las manos a la frente para sobarme al igual que él, luego nos observamos y reímos, no, no puedo ser el, a lo lejos veo que se acerca el autobús y sin darme cuenta la lluvia había parado, cuando el bus se detiene y abre sus puertas, me dispongo a marcharme.
---Esta vez no te dejare ir-- lo escucho decir, para después sentir como me jalan del brazo seguido del beso más esperado de mi vida.