Estaba más que claro, ¿no es así?, era obvio, todo indicaba aquello que esperábamos.
Alessandro: ~El doctor dijo que no era algo de lo que preocuparse pero que debía evitar este tipo de accidentes por su bien. La vi con sus ojos cerrados con esas largas pestañas que la hacían ver como una muñeca, tenía un rostro sereno, levante la mirada viendo la puerta del baño rota sintiendo como volvía el recuerdo de lo que pasó hace rato~
Flashback
Alessandro: ~Elisabetta tenía un largo rato en el baño por lo que toque la puerta en busca de una respuesta sin embargo no obtuve nada, mi desesperación al imaginarme lo peor me hizo perder la cabeza hasta el punto de golpear aquella puerta con el cuerpo hasta tirarla abajo.
Cuando miré alrededor la vi en el suelo desmayada, estaba pálida y fría, me asusté a tal punto que mis lágrimas empezaron a caer sobre su rostro, intente despertarla pero nada, la tendí sobre la cama y llame con rapidez al doctor de la familia el cual vino de prisa sin poner pero alguno.~
Fin del flashback
Elisabetta empezó a dar indicios de que iba a despertar por lo que Alessandro se acercó más a ella acariciando su pelo, ansioso por preguntarle cómo se sentía.
Alessandro: cara mia, ¿te sientes mejor?
Elisabetta: ~el simple hecho de escuchar su voz me afectó, haciéndome llorar a mares~
Alessandro: no llores per favore amore mio, me partes el corazón, dime que quieres y te lo daré, solo pídemelo.
Elisabetta: solo quiero morir -pide entre lágrimas y hipidos- no pido más que eso, ya estoy cansada de luchar y luchar sin obtener nada, ya no te pido que cambies, no te pido libertad lo único que quiero es morir...por favor.
Alessandro: ni siquiera la muerte misma podría alejarte de mí, ¿aún no lo entiendes?, yo iría contigo y por ti al fin del mundo, a veces quisiera dejarte ir pero te necesito para calmar mis infiernos. Así que no me vuelvas a pedir eso jamás.
Un profundo silencio se formó nuevamente en la habitación donde solo sus respiraciones se hacían notar.
Elisabetta: ¿cuándo?
Alessandro: ¿cuándo qué?
Elisabetta: ¿cuándo pensabas decírmelo?, ¿cuándo fuera a dar a luz?
Alessandro: juro que te lo iba a decir tan pronto como se me hubiera hecho posible pero el doctor dijo que no era bueno darte disgustos, por lo que imaginé que sería mejor ocultarlo un poco más.
Elisabetta: soy tan estúpida, ¿cómo no me di cuenta?. No lo quiero tener.
Alessandro: no digas eso, es nuestro sueño hecho realidad.
Elisabetta: ¿nuestro?, ¿acabas de decir...nuestro?, yo nunca deseé esto maldito enfermo mental, debí de matarte cuando tuve la oportunidad, me repugnas tanto que me arrancaría la piel solo para evitar el ardor que me provoca tu tacto -apretaba los dientes mientras pronunciaba cada una de esas palabras que salieron con tal veneno y rencor mientras lo miraba a los ojos-
Alessandro: -la miró con aquellos ojos azules puros humedecidos por las lágrimas- me estás haciendo daño.
Elisabetta: tú también me has hecho daño, tú me has lastimado mucho más. Si tanto anhelas que esté a tu lado me quedaré pero por Dios te juro que haré que te arrepientas.
Una faceta irreconocible se desató en Elisabetta, una llena de rencor y sin sentimiento alguno, una harta de todo y de todos.
Traducciones:
Cara mia: mi amor (de manera extremadamente cariñosa).
per favore amore mio: por favor amor mio.
¡Buenos vibes!