Astartea el ángel del infierno

capítulo 35

Tal como lo había pensado no pude dormir nada de nada, por lo tanto fui a molestar un poco a mi hermano contándole lo emocionada que me encontraba, no sé cómo lo hice pero no paraba de hablar de lo nerviosa que me encontraba, note como el comenzaba a desesperarse un poco pero no me decía nada para no ofenderme o eso es lo que pienso, al final comenzó a terminarse la noche por lo cual regrese a mi habitación para tener tiempo para alistarme. Busque nuevamente algo lindo que ponerme, opte por otro lindo vestido que tenía en mi clóset, me puse unos lindos zapatos y me probé un montón de diferentes peinados hasta encontrar el adecuado, mientras tanto pensaba en cómo se sentiría Acatriel, se encontraría ¿avergonzado, nervioso, emocionado?, ¿se encontraría al igual que yo? Solo espero divertirme en nuestra primera cita.

Narra Agramon

Finalmente, esos dos se dijeron lo que sentían, me sentía feliz por ellos y algo celoso, los celos del hermano mayor pero también me siento seguro y aliviado de que ahora tenga alguien quien la proteja. Al principio pensaba que su relación seria imposible e incluso apostaba a que no llegarían a ser amigos, pero mi hermana siempre termina sorprendiéndome con las sorpresas maravillosas que provoca en los demás. Últimamente no tengo el mismo tiempo que tenía antes de ser líder, ahora mismo tengo una reunión importante con Guta sobre un problema que hubo en el territorio con unos demonios, me gustaría primero darle una vuelta a Actriel y darle algunos consejos, pero tengo algo de prisa, solo espero que no lo arruine.

Narra Astartea

Me encontraba lista, ahora solo tenía que ir con Acatriel, Salí de mi habitación mi hermano se había ido a una reunión, en cuanto a mi amado protector se encontraba en la sala esperándome, lo mire su estilo era el de costumbre su cabello algo desarreglado y su típica ropa negra al parecer no hiso ningún esfuerzo para arreglarse me molesta un poco, pero es nuevo en esto así que dejare pasar este pequeño asunto que no es la gran cosa. Le hable se encontraba leyendo un libro, era algo extraño verlo leyendo ya que usualmente lo hace en su habitación ya que prefiere entrenar físicamente, en fin, le hable, pero él no me miro para nada, se puso de pie aun teniendo la vista en el libro.

— ¿es interesante? — quería preguntarle si pensaba que estaba linda pero la vergüenza no me lo permitía

— Un poco — contesto de manera indiferente sin mirarme

— Es muy extraño que leas un libro ¿a qué se debe?

— Solo me dio curiosidad

— Bien, creo que es hora de irnos para comenzar nuestra cita — finalmente dejo el libro, pero no comento nada sobre mi aspecto

— Te sigo — me dijo, no comprendí lo que quería decir

— ¿a qué te refieres?

— No sé a dónde iremos, tengo que seguirte

Esto no era lo que tenía pensado, pensé que estaríamos como una pareja caminando uno al lado del otro, pero en realidad yo soy la que se encuentra adelante mientras que Acatriel me sigue. Comprendo que no sabe a dónde vamos, pero tampoco tengo la menor idea de que hacer, quería hablarlo con el pero no he tenido oportunidad de decirlo. Me arme de valor y camine a su mismo ritmo quedando junto a el.

— Acatriel, en realidad no sé a dónde ir — le dije, el me miro extraño — quería hablar antes de irnos a donde ir, pero no tuve la oportunidad por alguna extraña razón que no comprendo — en fin ¿Qué lugar te gustaría?

— Cualquier lugar está bien — contesto fríamente mirando hacia el frente, me sentía irritada que no me dirigiera ni una sola mirada

— Bien, ¿Qué te parece si conseguimos algunas frutas y las comemos cerca del rio?

Acatriel afirmo, seguimos caminando ahora estábamos caminando uno al lado de otro, me gustaría que el tomara mi mano y camináramos como una pareja. Aunque es este mundo no es una costumbre hacerlo, pero no creo que le importe, tome su mano rápidamente pero el la aparto rápidamente.

— ¿sucede algo? — me pregunto, parecía algo exaltado

— No — conteste — solo quería que nos tomáramos de la mano

— ¿con que motivo? — pregunto extrañado

— Ninguno en especial — conteste algo desanimada pensando en que el no está acostumbrado a estas situaciones — bien busquemos las frutas — le dije tratando de formar una sonrisa sincera

Comenzamos a caminar en dirección al bosque sin darme cuenta Acatriel termino nuevamente detrás de mí lo cual me molestaba, ¿Por qué camina detrás? Debería caminar a mi lado ya somos una pareja, pero en cambio pareciera que no lo somos, es como si regresáramos al pasado cuando nos odiábamos. En el camino varios demonios me saludaban, últimamente me relacionaba más con los habitantes del territorio además me había ganado su respeto.

— Astartea — escuche mi nombre, me gire y mire a Exael un nuevo amigo mío

— Hola Exael — lo salude cuando llego a mí

— Esta mañana no la vi en su rutina diaria de vuelo — me dijo — me decepciono no poder admirarla en el cielo

— Me siento alagada — mire a Acatriel — por hoy estoy algo ocupada por lo cual no me viste

— ¿se encuentran en una misión o algo parecido? — cuando lo pregunto Exael, mis ánimos cayeron al suelo, eso quiere decir que no parecemos para nada una pareja

— Nada de eso, solo un paseo rutinario

— Ya veo en ese caso, ¿te parece pasar la tarde conmigo?

— Hoy me encuentro ocupada pero otro día estaría encantada — le conteste como buena amiga

Acatriel quien se encontraba atrás de mí, comenzó avanzar rápidamente, trasmitía un aura de enojo la cual te penetraba fuertemente. Me despedí de Exael y comencé seguirlo. Cuando lo alcance le pregunte que le sucedía, el solo me contesto que teníamos que terminar esto rápido para entrenar. ¿Entrenar? Era todo lo que tenía en mente, ayer era un demonio tierno quien se me confeso pero hoy se comportaba sin sentimiento alguno como si lo que sucedió el día anterior no existiera. Comenzaba irritarme, pero trataba de controlarme.




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