024: Amigos

024: Amigos

Como si fueran dos estrellas personificadas los arcontes luchaban a muerte en las ruinas del templo, las luces y los rayos destrozaban la piedra y llenaban de bendiciones el mármol mientras las falanges de ambos guerreros se preparaban para reanudar su asalto. Los cortes que Niko había recibido debilitaron su fuerza enormemente, Laconia intentaba sanar lo más rápido posible sus heridas, pero en apenas unos momentos volverían al asedio y el joven tracio acercó su rostro al oído de Asterión.

-No creo que pueda vencer a ninguno de ellos, lo siento capitán.

Cuando estuvo a punto de soltar su espada por el cansancio Asterión lo agarró su espada por el filo para detener su caída.

-Tú y yo somos la clave para ganar Niko, ya te lo dije.

Mientras el polemarca decía esas palabras Laconia y Lita volvían al combate, esta vez Laconia se enfrentaría al bestiario, caestus y polemarca enemigo a la vez.

-Te daré tu oportunidad polemarca, hazlo rápido.

Las enormes flechas de Lita cruzaron sus cabezas e impactaron contra las del sagitario enemigo.

-Deja de llorar niño y ve a sernos útil.

Niko no entendía de donde salía la confianza de Asterión en él, la bestiaria semi-hidra era por mucho más competente que cualquiera que no fuera un arconte y la bendición única de Lita podía ser usada como una trampa de forma mucho más eficaz comparado a su bendición.

-Somos los más débiles en este combate capitán ¿Qué cosa podemos hacer?

Al escuchar la palabra “débil” los ojos de Asterión parecieron iluminarse, como si los engranajes de su cabeza finalmente terminaron su función y ahora solo quedaba la ejecución.

-Es porque somos los más débiles que podemos ganar este combate ¡LEVÁNTATE!

- Σφυρηλάτηση -

- Σφυρηλάτηση -

La armadura de fuego de Laconia brillaba intensamente para contraatacar la formación del enemigo al igual que la de la polemarca de Silao, ambas cubiertas de intensas llamas al colisionar espadas una pequeña explosión surgió desde el impacto mientras cada una de las flechas de fuego que se formaban de la bendición de la bestiaria intentaba impactar el sello del carnero de un cuerno en el pecho de la guerrera, pero la polemarca solo era la distracción y mientras su propio favor siguiera defendiendo el sello ella no perecería sus compañeros la defendieron al instante y Laconia recibió un poderoso martillazo desde el costado, hubiera volado hasta el final del laberinto si no fuera porque antes del golpe ella clavó su espada contra el arma de piedra.

- Δύναμη -

La cabeza del martillo de piedra explotó con una fuerza descomunal, Laconia intento usar sus alas para defenderse al escuchar a su enemigo pedir el favor como resultado estas quedaron completamente inutilizables, las piedras rasgaron y destrozaron cada piel y hueso que había en ellas, el inimaginable dolor le impidió a la guerrera esquivar o bloquear el siguiente golpe.

- Υιός -

El caestus convertido en relámpago impacto contra la bestiaria con toda su fuerza, sin embargo solo logro moverla unos cuantos pies, la fuerza de la bestiaria había detenido la bala eléctrica.

-Ni siquiera te comparas a los minotauros.

Mientras decía esas palabras Laconia pateaba con todas sus fuerzas el estómago de su enemiga lanzándola de regreso a su grupo, a pesar de su actitud la bestiaria estaba destruida, había soportado el ataque directo de dos favores y no sabía si sobreviviría el siguiente, aun así nunca dejo de dudar en Asterión quien explicaba lo más rápido y vagamente que podía su plan a su tracio.

-Lo único que necesito es que bloquees un solo ataque de su tracio y luego me lances un relámpago.

-¿Eh?

Ya no había tiempo para preguntas, el tracio enemigo armado con sus espadas y viento se acercaba para destajarlos en un parpadeo.

-Confió en ti Niko.

El joven vio como su polemarca corría en dirección a Laconia, él no era ninguna prioridad para el tracio enemigo por lo que fue completamente ignorado, Niko por otro lado tenía su mente hecha un desastre, apenas tenía el tiempo de una respiración para pensar como resistir el ataque de su enemigo y mientras todo parecía ralentizarse solo se le ocurrió utilizar la estrategia que ya había visto funcionar, la victoria de los débiles.

- Υιός -

Niko bendecido por Zeus se volvió su rayo y se lanzó en una carga suicida contra su oponente, solo necesitaba sobrevivir un ataque, el tracio encapuchado con sus espadas en mano lanzaba un tajo en equis contra el chico, no estaba en condiciones para esquivar otro ataque y bloquearlo con su espada solo evitaría el corte de las espadas, pero el viento destrozaría su cuerpo así que apostó por su única baza, con la velocidad de un relámpago Niko fue más rápido que el corte de su enemigo, con su espada en mano izquierda logró evitar que la espada derecha del tracio completara su recorrido golpeándola en la base del filo, pero la espada izquierda seguía su curso por lo que el joven intento agarrar la muñeca de su oponente, sin embargo por la inercia ya ganada el ataque era inevitable así que Niko usó cada hueso y carne de su antebrazo para retrasar su muerte por menos de un parpadeo, ese era todo el tiempo que necesitaba.