5 —Empezando A Tocar Fondo

—¡Suéltame!—, le dijo Mel al tipo que la tiene sujeta por las manos aplicando toda la fuerza en sus brazos para inmovilizarla mientras la tiene boca a bajo. Ahora tiene miedo.
—Cálmate que no haremos nada que tú no quieras. Sin embargo tú quisiste venir aquí.
—Pues ahora ya no quiero.
—Nadie te obligó a venir. Estabas bastante dispuesta.
Mel se quedó callada. Le pareció un buen revolcón. El hombre ahora se ve atemorizante y Mel intentó no poner resistencia ni forcejear cuando aplicó toda su fuerza otra vez sobre ella. Se ve bastante decidido, así que cerró los ojos y lo dejó que siguiera. O se oponía o quien sabe si salía de una pieza.
—Ponte un preservativo—, le pidió, y el tipo fue razonable.
Después la soltó, y sus manos descansaron del agarre y su cabello fue liberado también.
—Ahora sí nena, vas a saber lo que es estar con un hombre de verdad—. Mel volvió a cerrar los ojos y lloró en silencio. Pidiendo que acabara rápido, suplicando. No sabe cuánto tiempo duró pero lo sintió eterno. Después que todo terminó el dolor en sus partes se intensificó—. ¡Fue genial perra!—, le dijo recargándose sobre la cabecera de la cama. Que te den por atrás pensó ella parándose enseguida y se vistió rápido. El tipo ni siquiera se movió para fortuna de ella—. Puedes tomar dinero de mi cartera si quieres. Estuviste muy bien.
El tipo la trata como prostituta, bueno solo le falta algo para serlo: cobrar.
Mel no dijo nada y salió, porque lo único que quiere es largarse de ahí.
Un día la van a encontrar tirada en un baldío y será su culpa pensó. Tenía que parar, pero no puede, porque enrollarse con extraños un día le va a costar la vida, y aunque su vida es una mierda jamás se le ha pasado por la mente quitársela.
Condujo al departamento. No sabe si Andros estará, y sino seguro salió con Rox. Llevan casi ocho meses de relación. Ella le cae bien pero es un poco celosa y ha notado que ha Andros ya le empieza a molestar esa actitud de ella. Lo cela por todo.
El otro día Mel la encontró revisándole el celular a Andros. Lo más que va a encontrar serán videos pornos. Y mira que si sus amigos se mandan porno entre ellos. Tienen un grupo de WhatsApp "porno like" le pusieron. No, ella nunca ha dicho que su hermano es un santo. Es un caliente como todos los chicos de 23 años, solo que un caliente responsable que no se anda tirando chicas así nada más. Andros aún tiene 23 años, pero falta poco para que cumpla los 24. Ella hasta anda pensando que le va a organizar. En fin como a todos los chicos de su edad le gustan las mujeres, y cómo todos los hombres las mira también, con bastante discreción pero lo hace. Sobre todo las que tienen buen trasero y senos grandes. Bueno todos se fijan en eso. Pero no es un mujeriego que se anda acostando con cualquiera. Y sus novias le duran bastante, y Mel esta segura que es de esos que se echan el segundo round en la cama, porque obviamente también le encanta el sexo. Ese es su hermano, su amigo, la única persona en quien realmente puede confiar ciegamente. Y si Rox sigue comportándose así, se le va a ir.
Mel siguió conduciendo por la avenida pensando que es diciembre, que falta una semana para que las vacaciones empiecen. Y que como cada año no tienen ni puta idea de que van hacer y donde la va a pasar, porque son fechas a las que no les dan mucha importancia, no después que su familia se desintegró. Quizá vayan con la tía Helen, casi siempre se van con ella. Mel siente feo por su mamá, pero con Andros la cosa está peor. Ya casi ni se hablan y él le dijo que "ni de loco pasa diciembre en casa. Es navidad no un funeral", y sí, su mamá está muy molesta con él. Pero eso le pasa a Andros, por hacerle al tonto con su papá. Ahora son muy amigos. Mel ha llegado a pensar que hasta cenan los cuatro juntos. Bueno lo último ha sido exagerado. A ella le consta que Andros no las ha vuelto a ver.
Mel llegó al departamento y después de pensar más pendejadas se metió a bañar porque se siente sucia y muy dolorida. Aquel tipo la lastimó. Se desvistió y cuando se quitó la panty tiene sangre. Eso le pasa por idiota se dijo a si misma en voz alta.
Podría tener una vida normal, un novio, pero es tan débil y autodestructiva que hasta da lástima. Odia esos pensamientos porque la hacen pensar en su papá, en Niky, en todo. Pero más en su papá. Y entonces viene la culpa. Y luego el rencor. "Es fácil perdonar" dice Andros. Fácil para él, pero ella no puede. Sin embargo se está dando cuenta que actuar como lo hace no le va a joder la vida a nadie como supone, sino que se la está jodiendo a ella, y bien jodida. Empezó a enjuagarse y le ardió como la fregada. Se aguantó, salió y se vistió poniéndose un short y una blusa pegada. En menos de un mes tendrá que ir a hacerse unos exámenes de ETS. Vaya estúpida que es al exponer su vida de esa forma.
Son las diez y tiene hambre, así que salió a la cocina por un vaso de leche.
—No quise interrumpir—, dijo parándose en seco cuando vio que Andros está acostado en el sofá y Rox encima de él besándose. Vestidos para su buena suerte. No se dio cuenta que Andros había llegado. Y él tampoco sabía que estaba ahí.
—Llegabas mañana ¿No?—, preguntó con evidente sorpresa.
—Gracias por el recibimiento hermanito. Hola Rox. Te marqué y no entró la llamada. Te dejé un mensaje de voz diciendo que llegaba hoy.
—No encuentro el cargador. Me quedé sin batería—, dijo levantándose y Rox sentándose al lado.
Es sábado y se supone Mel regresaba el domingo hasta en la noche de Nueva York, pero su madre anduvo bastante insoportable y por eso llegó hoy. Pero antes de venir al departamento decidió pasar por un bar. Y después la violaron al parecer. No sabría decir si así sería considerado si ella llevara eso a los tribunales.
—Bueno, entraré por mi vaso de leche y me voy a dormir. Sigan con su rollo que yo me pongo mis audífonos.
Andros puso los ojos en blanco y Mel sabe que le ha arruinado su noche caliente en el sofá. Al menos por el momento porque una vez que ella se meta al cuarto espera que ellos sigan con su rollo, y conociendo a su hermano se meterá a su cuarto y ella espera que termine lo que ya ha empezado, sino mañana le van a doler las bolas.